CAPÍTULO 10: NOCHE JUNTOS.

9.1K 601 8
                                    

CASSY-

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

CASSY-

Me hundí en mi propio asiento, cruzando mis brazos sobre mi pecho mientras mi mirada estaba perdida en el reloj que estaba colgando sobre la pared de enfrente. Me moría de ganas de que llegara la hora de salida del colegio.

— Oye..— Escuche la voz de sean en un tono bajo para no llamar la atención de la maestra, lo ignore.— Cassandra, te estoy hablando.— Insistió clavando la punta de su lápiz en mi brazo derecho intentando así llamar mi atención.

— Dame una razón para no patearte de la silla.— Pedí mirandolo de reojo viendo su sonrisa arrogante adornar su rostro.

—¿Qué querías decir con "mi bebé ya se encuentra en la ciudad"?— Pregunto ignorando por completo lo anteriormente dicho por mi, como siempre.

— Mira, ven.— Lo agarre de la mano cuando el timbre sonó dejandonos salir del salón, lo guíe hasta un sector del estacionamiento parándome frente a mi hermoso y preciado auto.— Te presento al amor de mi vida, mi pequeño bebé.

— Dios, ¿Es tuyo?— Pregunto con asombro mientras su mano se pasaba por el capo del dodge azul que estaba frente a nosotros.

— Totalmente mío.

— Es genial, ¿Puedo manejarlo?

Una carcajada escapo de mi boca sin tapujo, bastante sonora a decir verdad antes de palmear la espalda de sean mientras negaba.

— Antes muerta de dejarte manejar a mi bebé, no hasta que aprendas a manejar.

— Superalo.

— Jamás!

[>>>]

— ¿Qué harás hoy?

— Pedir comida a delivery, ver peliculas en mi casa y quedarme en la cama.. Es sábado en tokio, ¿Qué más podría hacer?— Lo mire brevemente antes de volver a poner mi mirada en el camino.

— Mnh, ¿Carreras?— Propuso.

Hice una mueca al escucharlo. Negué levemente.— Comida y películas.

Repetí.

—Carreras.— Insistió.

— Ve tú, dejame en paz.

— Tú tienes el auto.

— Han te dio uno, ve con ese.

—Vamos! ¿Si, aceptas?— persistió con su propuesta, casi suplicando para que fuera con él.

— No. — Seguí firme— Si quieres puedes unirte a mi noche de comida y películas acompañando con cerveza.

Sean la miro por un segundos pensando si daría su brazo a torcer o no, suspiro antes de hablar— ¿Voy a poder besarte?

Por inercia puse mis ojos en blanco, cansada de sus intentos de coqueteo— No. Ve a besar a la novia de DK.

— ¿Celosa?— sonrió con arrogancia mirandome.

— ¿De ti? Jamás.— negué con una pequeña sonrisa— Entonces ¿vienes, o te dejo en tu casa?

— Me uno, pero yo elijo la película.

— Bien, deberías avisarle a tú padre donde estarás.—Propuse.

—No soy un niño.

— No, pero eres un niño problema y tu padre lo sabe, solo llamalo para decirle que estaras en casa y no escapando de la policía.— Insistí.

— ¿Vamos a armar una pelea cada vez que digamos algo?—Pregunto pasando sus manos por su cabello.

— Solo llamalo, no es muy difícil.

—No.

—Bien, lo llamare yo misma.— busque mi teléfono móvil, y mientras iba manejando marque el número del padre de sean, quien no dejaba de quejarse.

— ¿Hola?— dijeron de la otra linea.

—Hola, soy cassy la amiga de sean.

—oh! Cassy ¿Sean esta en problemas?

—No, no.. Solo llamaba para avisarle que sean se quedara en casa a ver peliculas y adelantar algunos trabajos de la escuela, quería saber si no le molestaba.

Sean, no dejaba de decir por lo bajo que su padre no estaría feliz con la idea y lo haría volver a casa, pero si algo me sirvió ser la niña de mami y papi, es que manipular a los mayores se me da genial.

— Gracias por avisar, no hay problema! Pasen una linda noche y confió en ti cassy! Espero no sea una mentira.

—Jamás podría mentirle! Gracias y no se preocupe por sean, adiós.

Me despedí sonando lo más inocente que podía, corte la llamada y tire el teléfono a la parte de atrás del auto, jamás lo usaba.

— Eres una manipuladora profesional.

—¿Gracias?

— No fue halago! De todas formas, es genial que papá confíe en ti, me evita mentiras si tengo que salir contigo.

— Si, lo se.—Frene el auto.— Llegamos a casa.— ambos bajamos del auto y nos dirigimos adentro del depto.

Sean observo cada parte del apartamento, no era mucho, solo; un cuarto, un baño, sala y comedor, una cocina y el balcón. Tampoco estaba muy decorado, no me había tomado el tiempo de hacerlo.

— Lindo lugar.

— Normal, no es lo mejor del mundo.. Pero es algo — Me quite la chaqueta dejandola sobre el sillón.

— ¿Extrañas a tu familia?— pregunto tomando un cuadro de arriba del mueble, era una foto mía con toda mi familia en mi cumpleaños número 15, antes de todo.

— Aveces, sobretodo a mi abuela. Pero con el tiempo te acostumbras un poco al menos.— le entrego una cerveza al castaño.

— No pareces vos la de la foto.— admitió tomando la cerveza, ella sonrió acercándose para poder ver mejor la foto que miraba sean.

— Lo se, he cambiado mucho este último tiempo.

En la foto se me podía ver a en medio de todos con un vestido blanco, una chaqueta rosita, tenía trenzas con mi cabello rubio, el collar de perlas e incluso iba maquillada.

— Lo único que mantienes es el collar de perlas, luego no te pareces ni un poco a la de la foto.

—Digamos, no es mi estilo favorito.. No iba conmigo realmente, a mis primas les quedaba hermoso, pero a mi no, me hacía sentir vacía.

Sean se sento en el sofa mientras yo iba por algo de comer — ¿Y ahora? ¿Te sentís completa?

Volvi dejando todo sobre la mesita ratona y ne sente a su lado— No como esperaba, pero me siento mejor y eso me hace sentir que tome una buena decisión.

— Eso es lo importante.

— Eso creo.

Los dos nos acomodamos mejor en el sofá, sean me acerco a él dejandome acostarme en su pecho mientras él buscaba una película.

Iba a ser una linda noche juntos.














[>>>]

Gracias por leer💜
Por el amor y por todo.

Cassy West• ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora