El resurgir del Tradicional Club de Clásicos (Parte 3)

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Los claros sonidos de bateos hechos por el Equipo de Béisbol podían oírse desde el exterior. Aunque no tengo más asuntos en este salón, Chitanda parecía querer hablar un poco más. Suspiré y cedí, y puse mi mochila en una mesa cercana.

Encerrada dentro, era lo que había dicho Chitanda. ¿Es así? Pensé por un momento. Yo tenía la llave, mientras Chitanda estaba en el interior. No recuerdo alguna vez haber cerrado la puerta. Entonces la respuesta era simple.

-¿No fuiste tú quien cerró la puesta desde dentro?

Sin embargo, Chitanda agitó la cabeza y negó inequívocamente.

-Yo nunca hice eso.

-Bueno, yo tenía la llave. ¿Quién más podría cerrar la puerta con llave, además de ti?

-

-Bueno, hay ocasiones en que las personas se olvidan de si han cerrado la puerta o no.

Sin embargo, Chitanda no parecía estar prestando atención a mi explicación, y de repente señaló detrás de mí.

-Por cierto, ¿es tu amigo ese de allá?

Me di la vuelta, y encontré la silueta del cuello de un uniforme negro tras la brecha de la puerta entreabierta. Su mirada rápidamente se encontró con la mía. Recuerdo haber visto esos ojos marrones que parecen como si estuvieran sonriendo, así que alcé mi voz y grité,

-¡Satoshi! Esa es una afición enferma la que tienes, escuchar a escondidas las conversaciones de otras personas.

La puerta se abrió y, como esperaba, la persona que entró fue Fukube Satoshi. Sin sentir ningún tipo de vergüenza, dijo descaradamente

-Bueno, lo siento. No tenía la intención de espiar.

-Puedes no tener la intención de, pero terminaste haciéndolo de todos modos.

-Puede que sea así. Pero no podía simplemente interrumpir cuando vi al normalmente inactivo Houtarou pasar tiempo a solas con una chica, en una habitación especial, durante la puesta de sol. No quería terminar siendo privado de tal visión.

¿De qué está hablando?

-Pensé que te habías ido a casa ya.

-Si, estaba a punto de hacerlo, pero entonces te vi con esta chica dentro de la habitación desde la planta baja. Supongo que todavía soy inexperto como mirón.

Ignoré los comentarios de Satoshi sobre nosotros viendo desde el exterior, ya que era su forma habitual de bromear. Sin embargo, para las personas que no están acostumbradas a este tipo de bromas alegres, podrían terminar tomándolas en serio.

Parecía que a Chitanda también la habían engañado.

-Ah, eh, yo...

Su expresión tranquila de hace un momento había desaparecido, siendo remplazada por una apariencia nerviosa. Ella parece ser del tipo que lleva sus expresiones en la cara, parecía estar diciendo: mira, me siento nerviosa en este momento, con esa miradita nerviosa. Si bien es divertido verla así, yo no iba a dejar que llegara más lejos.

Afortunadamente, con el fin de exponer la broma de Satoshi, todo lo que tenía que hacer era preguntarle

-¿Hablas en serio?

-Por supuesto que no.

-Phew.

Chitanda dejó escapar un suspiro de alivio. Tal era el lema de Satoshi: Las bromas son para hacerse en el momento, así que también son malentendidos que deben desvanecerse de inmediato.

Hyouka Volumen 1  [TERMINADO]Where stories live. Discover now