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- ¿Estas segura de que te dijo eso? – pregunta Abby mientras vamos a su casa

- Si, segurísima

- ¿Le has dicho algo a tu madre, cariño? – pregunta de nuevo Abby, apenada

- No.

- !Se lo tienes que decir!

- Lo sé, lo sé, pero se le ve tan feliz con ese... capullo asqueroso – maldigo mientras algunas lagrimas caen

- Te entiendo bella, pero le tienes que decir, antes de que llegue a más, antes de que te toque o te diga algo de nuevo – mientras Abby dice eso me abraza, haciendo de hombro donde poder llorar.

- Supongo que le diré – digo insegura, me daba muchísimo miedo de que ella se pusiera de su parte.

- Limpia esas lágrimas y vamos a buscarte un modelito para esta noche – dice Abby separándose de mí y dándome un beso en la mejilla.

- Te quiero muchísimo rubia, gracias por todo – sollozo mientras Abby me vuelve a abrazar

- Te quiero más, enana asquerosa.

Me limpio las lagrimas y entramos en la casa, riendo como si nada hubiera pasado, eso es lo que me encantaba de Abby, me hacia sentir bien y especial con nada. Es la mejor amiga que nunca pude desear.

- Ese te quedaría de lujo – dice Abby mientras lanzaba besos al aire

- ¿Segura? ¿No está muy subido de tono? – la inseguridad me posee una vez mas.

Era un vestido negro y corto, con tirantes, se me pegaba a la perfeccion haciendo resaltar cada una de mis curvas.

- Estas bellísima, seguro que los tíos se te tiran como osos a la miel.

- Argh, no me convence esa idea la verdad – rio mientras ella rodea los ojos.

- Un momento, me llama Karla – dice mientras coge la llamada, mientras que yo opto por ojear los mensajes que tengo, pero uno me llama mi atención.

El bobo de Jack <3

3 mensajes no leídos.

El: Perdón por lo de antes

El: ¿Podrías venir ahora después a esta dirección?

El: Joder, no te hagas de rogar idiota

El ultimo mensaje fue hace 3 minutos, mientras que los otros eran de hace 50 minutos.

Yo: ¿Ha pasado algo?

Me responde al minuto.

El: Si joder, ven a la anterior dirección.

Yo: estoy con Abby, ¿qué quieres?

El: ok no importa te lo enseño mañana. Chao Campbell.

Yo: Chao imbécil.

Abby termina de hablar con Karla justo cuando yo termino con Jack.

- Con quien hablabas pillinaaaaa – ríe Abby intentando quitarme el móvil

- Un chico de mi clase – rio sin darle importancia.

- Atrevidaaaaa

- Solo quería que... - dudo, no sé qué quería

- ¿Aja? Uyuyuy, estas muy sonrojada – se ríe Abby mientras yo me pongo modo tomate.

- Solo quería que le pasase los deberes de historia.

- Aja, si, claro, enséñamelo entonces

Por suerte mi móvil suena. Es mi madre. Abby rodea los ojos mientras ríe, lo cojo y empieza a soltar gemidos.

- ¿Hannah? ¿Con quién estas?

- Yo... - no podía hablar sin reír – con Abby

- Ah, ok, en casa a las 9, recuerda que aun no termino el instituto ¿sí?

- Ok mamá, hasta luego. – me despido apenada.

Abby me mira mientras se intenta aguantar la risa, me la contagia mientras le doy una manotada en el muslo

- Ayyy, agresiva – Abby finge llorar. –¿ya son las 8, prefieres que te lleve ya a casa?

- Bueno, vale, me hacía mucha ilusión salir – miento

- Hannah, no soy tonta, se que no te agradaba la idea de salir. – ríe Abby – si quieres puedo quedarme contigo para que el imbécil ese no se te acerque.

- Me encantaría – sonrió alegremente.

La chica rubia les pide permiso a sus padres, le dicen que, si y vamos andando juntas, agarradas del brazo como dos abuelas que van contando chismorreos del pueblo.

35 millones de sonrisas junto a tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora