3. The dark prince

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— ¿Cómo le fue a Jiang Cheng en su primera cita? — preguntó Mianmian con una sonrisa de satisfacción en su rostro.

— ¿Sabes lo que es ser exasperante? — bufó Wei Wuxian mientras se recostaba en el sillón de la oficina de Mianmian — No quiso decirnos nada, ni una palabra, pero no se veía enojado y tampoco me amenazó con romperme las piernas.

— ¿Entonces?

— Supongo que no le disgustó... — murmuró Wei Wuxian y se levantó de un salto — ¡Dime quien era ese alfa! — insistió.

Mianmian rió — Conoces las reglas, no puedo revelar datos personales de mis clientes — respondió con una sonrisa que ni podía ensancharse más.

— ¡Mianmian! ¿No sientes pena por mi familia? — volvió a reclamar Wei Wuxian — Todos deseamos ver a Jiang Cheng feliz y él no nos da ni una pista.

— Se los dirá cuando esté listo — dijo ella intentando sonar un poco más seria — Jiang Cheng es el tipo de hombre que juega a los seguro, no les dirá nada hasta que encuentre a su alfa ideal.

Wei Wuxian hizo un puchero, tomó su chaqueta y salió de la oficina de Mianmian sin despedirse. Odiaba no saber cosas, él tenía que ser el primero en saberlas, necesitaba información y si tenía que seguir a Jiang Cheng, entonces lo haría, pero obtendría información por sus propios medios.

Mianmian no tomó a mal el comportamiento de Wei Wuxian. Ambos eran muy buenos amigos y ella ya estaba acostumbrada a los berrinches del moreno. De hecho, éstos eran mucho más usuales desde que Lan Wangji lo mimaba en exceso.

— Jiang Cheng, ¿qué le dijiste a mi primo? — se preguntó a sí misma recuperando esa sonrisita traviesa mientras miraba en la pantalla de su portátil las fotos de Jiang Cheng y Jin Zixuan.

La noche de la cita, Jin Zixuan había llamado a Mianmian para exigirle que le diera toda la información de Jiang Cheng, incluyendo su número telefónico, algo que ella, por supuesto, no hizo.

Jin Zixuan nunca se había puesto así por nadie, por lo que Mianmian realmente se preguntaba qué había dicho o hecho Jiang Cheng para que el heredero de los Jin estuviera tan desesperado por contactarlo.

— Bien, sea lo que sea, Zixuan tendrá que esperar a que conozcas a tus demás citas...aunque...— Mianmian se puso seria al ver al quinto pretendiente de Jiang Cheng — espero que llegues a conocer a éste antes de tomar una decisión.

**********

— ¿Esta noche tienes tu segunda cita? — preguntó Yanli fingiendo no mucho interés, aunque en verdad era una de las más emocionadas por su hermano.

Jiang Cheng, que solo había ido a la oficina para descansar un momento, puso los ojos en blanco — Papá, mamá, Wei Wuxian y ahora tu shijie...

— Lo siento, es solo que me imagino que debe ser muy emocionante saber que puedes encontrar tu alma gemela — respondió ella con una sonrisa.

— ¿Qué hay de ti? — preguntó Jiang Cheng. Después de todo, su hermana era mayor que él y aún estaba soltera por decisión propia.

Yanli bajó la mirada — Yo...estoy saliendo con alguien — confesó tímidamente.

— ¡¿QUÉ¡! — preguntó Jiang Cheng casi elevando la voz a la máxima potencia.

Yanli le hizo una seña para que bajara la voz.

— ¿Quién? — volvió a preguntar Jiang Cheng intentando no gritar de nuevo.

Yanli negó con la cabeza — Wei Wuxian no nos ha dicho nada acerca de la persona con la que está saliendo y prefiero mantenerlo de la misma forma.

Boy in redWhere stories live. Discover now