Capítulo 21

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Paso una semana desde el famoso picnic y tanto Ezran como Claudia habían notado algo raro entre Callum y Rayla, no parecía ser algo malo pero si... muy extraño. Sin embargo todo fue más notorio en la sesión de entrenamiento del heredero al trono, Soren y el luchaban con las clásicas espadas de madera, Rayla daba indicaciones mientras que Callum y Claudia solo observaban todo.

-Esquiva, ataca, esquiva, quieto...

Ezran dejo de intentar y solo puso su espada en diagonal, mientras que Soren se recuperaba un poco, entonces Rayla sonrió maliciosamente.

-Movimiento de rodilla

Ezran obedeció e hizo el clásico movimiento con su respectiva espada, dejando al rubio en el suelo una vez más mientras los demás empezaban a reir. Soren se molesto.

-¿En serio? ¿No tienes otros movimientos? ¡Siempre usas el mismo!

-Y aun así, sigues cayendo en el mismo truco -respondio Rayla con gracia, ayudando a Soren a levantarse.

-Y seguirás cayendo, lo digo por experiencia -menciono Callum con una sonrisita, sonrisita que no tardo mucho en borrarse -Aunque yo ya no caigo en eso, de hecho nunca caí, aunque no es como que este cayendo por Rayla, en realidad jamás he caído por Rayla

Claudia inmediatamente se dio cuenta de que el chico empezaba a entrar en pánico, así que mejor interrumpió lo que estaba diciendo.

-Entendimos, Rayla no te hará caer de nuevo, tranquilo -dijo la peli negra en un tono relajante.

-Si Callum, relájate un poco, yo tampoco caigo por ti, nunca he caído por ti y nunca lo haré, jamás, aunque eso no quiere decir que no me agrades, pero tampoco quiere decir que me agrades, en realidad... -Rayla fue interrumpida por Soren.

-¿Es en serio? Ya quedo claro, nadie cae por nadie ¿Podemos continuar?

Claudia hizo una mueca ¿Por que de la nada ambos se pusieron tan nerviosos con la palabra "Caer"? ¿Que podía significar? Después de pensarlo por un par de segundos, logro descifrar la situación será... ¿Caer enamorados? ¡Por supuesto! Tenía que ser eso.

"Oh Claudia, eres una chica muy lista" pensó la chica, para después soltar un pequeño grito emocionado.

Por otra parte, quienes la acompañaban la miraron un tanto extrañados.

-¿Te sientes bien, Claudia? -pregunto Ezran, levantando una ceja.

-De Maravilla, no se preocupen por mi -respondio la ojiverde sin dejar de sonreír.

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Rayla estaba en los techos del castillo, no pensaba bajar de ahí en al menos las siguientes dos horas, no tenía humor para toparse con absolutamente nadie y menos con el príncipe Callum. Desde el día en que fueron al bosque, trataba de evitarlo la mayor parte del tiempo ya que desde entonces se había dado cuenta de sus sentimientos por el, si es que así se les podía llamar y es que Rayla tenia experiencia nula en esos temas, su especialidad eran los golpes y esas cosas ¿Romance? Eso era una pérdida de tiempo o al menos así lo pensaba antes de llegar aquí, todo era más fácil antes ¿Cierto? Su única meta era matar al príncipe así que casi siempre pensaba en eso y por un momento deseo que todo volviera a ser igual que antes pero ese deseo desapareció, por que si ella estuviera en Xadia no sabría todo lo que ahora sabe. Los humanos no son una peste, al menos no todos, no habría aprendido de ellos y lo más triste, quizás no habría tenido la oportunidad de conocer realmente a Callum.

-Basta, solo es un humano- se dijo Rayla a si misma para entonces mirar hacia el cielo y sonreír un poco- un gran tonto humano

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Callum estudiaba un libro en la biblioteca, trataba de mantener su mente ocupada para no pensar en... lo que sea que siente por Rayla y es que era difícil describirlo, claro que a Callum ya le había gustado alguien antes pero aún así esto era en cierto punto desconocido e incluso aterrador ¿En que momento empezó a sentirse atraído por la elfa que lo trató de matar docenas de veces? ¿En que momento empezaron a ser tan cercanos? Más preguntas de este estilo rondaban por su cabeza, pero sus pensamientos se vieron interrumpidos por su primer amor fallido.

-Callum, te he estado buscando por todas partes -menciono Claudia sentándose a lado del castaño -Hoy me di cuenta de que tu y yo necesitamos hablar...

-Si es para hablar de lo del escape de Rayla, siento que aún es muy pronto -murmuro Callum tan bajo como pudo.

-Vine a hablar de Rayla si, pero no de su escape, se que te gusta...

-¡¿QUÉ?! -gritó Callum alterado.

-¡Shhhh! Es una biblioteca -susurro la encargada de la biblioteca real.

-Lo siento -respondio el príncipe bajando la voz, para después mirar a Claudia -Lo que sea que te haya dicho Ez, no es cierto

-Ez no me dijo nada, aunque igual sospecha porque te diré que no puedes ser más obvio, pero respira, ella no sospecha nada

-Y entonces... ¿Tu se lo vas a decir? -pregunto Callum de manera seria.

-Claro que no Callum, ese es tu trabajo, en realidad yo solo quiero darte un consejo...

Claudia miro hacia todos lados asegurándose de que nadie escuchara, entonces miro fijamente los ojos del príncipe y comenzó a hablar.

-Hoy cuando la mencionaste te pusiste muy nervioso y es normal, pero en realidad no tienes porque estarlo, eres increíble y estoy bastante segura de que Rayla lo sabe, solo... sé tu mismo y deja que todo fluya, créeme, cuando hagas eso entonces los nervios desaparecerán

-¿Cómo lo sabes? -pregunto Callum.

-Tengo fe en ti, además de que Ezran y Soren apostaron, no quieres decepcionar a tu hermano ¿Verdad?

Callum río un poco, parecía que todo el mundo se había dado cuenta de sus sentimientos excepto el y quizás Rayla.

Tenía que hablarle de nuevo.

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Rayla finalmente bajo de los techos, lenta y cuidadosamente para no quemarse, aun seguia igual de confundida que hace unas horas pero por lo menos ahora estaba un poco más relajada, procedió a entrar al castillo para bajar a los jardines pero entonces se encontró con el gran tonto humano que la estaba confundiendo tanto.

-Rayla, Hola quería felicitarte por el entrenamiento de hoy, creo que Ez va muy bien

La elfa asintió con la cabeza.

-No es nada, es talentoso, será temible en el campo de batalla -respondio ella.

Hubo un silencio tenso entre los dos, parecía que había mucho y nada que decir a la vez.

-Sabes...- los dos hablaron al mismo tiempo, entonces Callum tomó aire.

-Lo lamento, tu primero

-De acuerdo, muero de hambre, acompáñame por algunas tartas de jalea

Callum sonrió de lado mientras inclinaba un poco la cabeza.

-¿Tartas de Jalea?

-Compartire algunas contigo, lo prometo -contesto la peli blanca con una sonrisa, relajándose un poco -despues... hagamos algo divertido

-¿Molestar a Soren?

Rayla sonrió con Algo de gracia.

-Me leíste la mente

Esa tarde fue tranquila, divertida y llena de risas. Después de una semana de nervios y estrés, las cosas volvieron a fluir de una manera natural pero ahora completamente consciente de lo que sucedía, Rayla sabía que quizás sentía una cierta atracción hacia Callum y Callum sabía que empezaba a sentir algo por Rayla y aunque al principio fue algo aterrador, ahora parecía ser algo bueno, algo que sin duda disfrutaría pero había un pequeño detalle del cual ambos se habían olvidado.

Había una guerra, ellos eran enemigos y su misión era matarse, no enamorarse ¿Un humano y una elfa como pareja?

"Que idea tan ridícula" pensó el consejero real.

¿Peleamos?Where stories live. Discover now