La vida nos unio

La separación

<< Eramos como dos desconocidos que se conocian muy bien >>

Mientras en el castillo, el rey Harrow se reunía con sus miembros del consejo, la guerra llevaba un rumbo muy drástico ya que era demasiado dispareja, en algunos momentos los elfos iban ganando y en otros los humanos, entre una muerte tras otra las oportunidades se perdían para cualquiera de los bandos.

Una de las primeras opciones era ir y pedir una alianza con los demás reinos para que asi ellos pudieran ganar, pero a la vez pensaban que no lo aceptarían después de todo son la misma raza pero no es su misma pelea, un lema que todos los reinos compartían era que "Cada quien velaba por su reino" claro que al comienzo estuvieron todos de acuerdo pero con el pasar de los años notaron que no era lo mejor, a pesar de eso nunca la cambiaron y era la norma que todos cumplían.

Por otro lado con los elfos, ellos ya estaban haciendo mas alianzas como la de los elfos de sol con algunos de luna, algunos de cielo con los de agua y asi pero sabían que tenían que actuar con rapidez si querían hacer su ataque y ganar esa guerra.

Mientras que después de una larga charla y risas los dos jóvenes se quedaron dormidos del cansancio.

Los ojos de Rayla se cerraron de un momento a otro sin duda alguna su compañero de viaje habia pesado mas de lo que ella creía y eso la habia agotado, comenzó a abrir sus bellos ojos violeta lentamente mientras sentía el aire freso en su cara. Cuando pudo ver por completo se dio con una enorme sorpresa, algo un poco vergonzoso como gracioso

-ve a Callum durmiendo en su hombro y se sonroja – ay dioses que vergüenza – se aparta con rapidez – uff, ¿en que momento paso esto? – se dice en mente – no lo recuerdo, aunque lo importante es que el no lo recordara... creo –

Por tanto escandalo que hizo peleando con ella misma, el joven de cabello castaño comenzó a despertar de su sueño.

- se despierta – Rayla?

- sorprendida pero lo disimula – A veo que ya despertaste, ¿Cómo te sientes?

- Bien me siento mejor creo que puedo volver yo solo con mi grupo de batalla

- Me alegra escuchar eso porque yo tambien tengo que regresar, mi equipo debe estar preocupado por mi desaparicion

- Pienso lo mismo de mi equipo.

- Bueno entonces, ¿volvemos?

- Si, pero hay que separarnos

- Tienes razón que volvamos juntos se vera raro y si alguien nos ve, pues será mucho peor.

- Rayla de nuevo muchas gracias por lo que hiciste

- No hay de que, espero volver a verte si es que algún día es posible

- asiente – Si 

- Tu vuelve por el mismo camino por donde vinimos yo tomare otro

- Bien, adiós – se va –

En la mente de ambos creían que habían hecho lo mejor al fin y al cabo solo se conocieron por pura coincidencia, todo lo que pasaría después tambien seria pura coincidencia, ¿o el destino?

Los dos jóvenes se alejaban cada ves uno mas del otro pero en el campo de batalla desde dos panoramas distintos dos chicas los buscan con mucha preocupación pues eran personas muy apegadas a ellos.

Por los aires Nix habia estado sobrevolando el campo de batalla por horas pero no habia encontrado rastro alguno de Rayla, las fuerzas se le estaban agotando y la idea de que la hubieran herido o matado se le hacia muy irreal pues la peliplateada era demasiado hábil y agilidosa como para ser atacada.