Extra I

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—Repite porque estamos aquí.

—Porque era gratis la entrada.

—Cierto.—responde Tae con arrepentimiento en su voz.

Trato de aguantar la risa, pero es imposible al ver el pequeño puchero que se forma en los labios de mi novio, claramente disconforme con la situación en la que estamos.

—La próxima vez tenemos que averiguar qué estamos yendo a ver. Por más que la entrada sea gratis.-murmura lo último.

Sé que se está aburriendo hasta la muerte, así que me levanto de mi asiento, llamando la atención de varias personas en la pequeña sala. Sostengo su mano y tiro de ella hasta que él también se encuentra de pie. Me mira con algo de alivio en los ojos y caminamos hasta la entrada del lugar para salir.

Una vez fuera, veo que cerca hay un puesto de comida y me dirijo hasta ahí. Taehyung me sigue el paso y ahora ambos estamos esperando por nuestro turno.

—Podemos decir que fue una experiencia y un aprendizaje.

Tae se ríe y me golpea en el brazo.—No se piensa en claro cuando dice entrada gratis, amor.

—En eso tienes razón.—digo.—Pero, a ver, tampoco esperaba que fuera una obra de teatro sobre la vida de una papa.

Guardamos silencio por unos segundos antes de estallar en carcajadas. El hombre que atiende el puesto nos mira como si fuéramos dos lunáticos, pero al momento de ver el dinero que extiendo hacia él, ignora por completo nuestro comportamiento y nos da dos sándwiches.

Ya calmados del ataque de risa, nos acercamos hasta un banco que se encuentra vacío y algo lejos del parque.

Yo no digo que odie a los niños, pero si lo hago.

Sé que en su momento fui uno, pero eso tampoco me detiene a pensar que son insufribles. Aparte del hecho que recae en las acciones en que los padres mal acostumbran a sus hijos.

—Eso fue muy anticonceptivo de su parte.—murmura Taehyung después de ver como un chico, de no más de 5 años, le pega a su padre en los testículos.

—Demasiado anticonceptivo.

Nos quedamos en silencio, disfrutando de la compañía del otro mientras devoramos el sándwich como si fuera la última comida de nuestras vidas.

El momento se rompe en el instante en que siento unas manos taparme los ojos. Mi primer reacción es lanzar un golpe directo para atrás, escuchando un quejido de dolor. Vuelvo a ver, lo que da cuenta que mi objetivo se cumplió, pero cuando me giro a ver la persona que lo hizo lo único que puedo hacer es rodar los ojos.

—Me puedes decir la cantidad de veces que te dije que no hagas eso.—escucho la voz de Taehyung a un lado mío.

Lo miro algo indignado por ni siquiera haberse preocupado de mi estado físico y emocional.

La persona en el suelo se levanto, todavía sobando la parte derecha de su cara. Me dirige una mirada entre divertida y molesta, claramente sé el porqué de esa mezcla de emociones.

—Me lo dijiste varias veces, pero prefiero ignorarte.

Jaebum sonríe mostrando todos sus dientes como un niño pequeño. De repente también esta Miyeon a su lado, abrazada a su costado.

—Perdonen, todavía sigue un poco tarado.—se disculpa como si el estado de Jae fuera un pecado capital.

—¡Miyeon!—se queja en voz alta.

Taehyung se ríe con voz suave. Camina hasta el tacho más cercano y tira el envoltorio de nuestros —ahora, inexistentes— sándwiches.

Nos unimos junto a Jae y Miyeon, que apenas habían llegado a la feria del parque. Llegado a un momento nos toca despedirnos, ya que tanto como Tae y yo tenemos trabajo mañana temprano y no podemos darnos el gusto de quedarnos hasta tarde.

Ya no.

Un suspiro escapa de mis labios mientras estiro mi brazo y lo apoyo sobre los hombros de mi novio, quien rodea mi cintura con su brazo. Caminamos así hasta donde dejamos aparcado el auto y nos subimos rumbo a casa.

Una vez llegamos y estamos dentro de nuestro hogar, una sonrisa se pinta en mi rostro.

Porque si, me encanta salir y compartir momentos con mi pareja, pero también me encanta en demasía la comodidad de la casa y lo hogareña, acogedora, llena de recuerdos que luce.

Taehyung se agacha para saludar a nuestro pequeño cachorro que se mantuvo a los cuidados de la vecina de al lado. Me quedo parado en la puerta con la imagen de mi esposo sosteniendo a Yeontan contra su pecho camino a nuestra habitación.

Si, no hay nada mejor que esto.

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Nerd [kookv-🌺]Where stories live. Discover now