⊱┊BROKEN TIE 【Given OMEGAVERSE 】

Capítulo XIX ❝Una verdad incomoda❞🔞

¡Este capítulo ha quedado largo! Espero compense mis dos semanas y media desaparecida. ¡Espero que les guste y nos vemos abajo en los comentarios finales! 

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— ¡TÚ...! — gritó Uenoyama, haciendo uso del poco oxigeno que quedaba en sus pulmones — ¡TÚ DIJISTE QUE ERA NEGATIVO!

Haruki tragó en seco y parpadeó dos veces, intentando ordenar las palabras que llegaban atropelladamente a su boca. Nunca antes había visto a Uenoyama tan alterado, parecía que en cualquier momento le comenzaría un ataque de pánico.

— T..tranquilizate — dijo, lo más calmado que pudo, colocando una de sus manos sobre el hombro de Uenoyama y entrando por fin a la casa. Caminó unos cuantos pasos hasta la sala y tomó asiento en el sillón, siendo seguido por Uenoyama. Buscó con la mirada a Mafuyu pero no lo vio, así que supuso que seguiría durmiendo — Esto pasa a veces 

Uenoyama le dedicó una mirada interrogativa, esperando a que continuara con su monologo. 

— Falso negativo — explicó — Eres doctor, Uecchi, sabes que es una posibilidad

— Lo sé — respiró, tranquilizándose un poco — Pero suponía que al ser examen de sangre sería mucho más confiable

— También yo — confesó 

JODER, JODER, JODER. Uenoyama sentía que iba a desmayarse. ¡Ahora todo tenía sentido! La perdida de apetito de Mafuyu, sus sutiles pero constantes cambios de humor, la debilidad de su cuerpo, sus mareos y nauseas. ¿Cómo carajo no lo vio venir? Era tan evidente, pero había estado tan absorto en sus problemas que ni siquiera se le pasó por la mente -principalmente porque había borrado la posibilidad al saber que la prueba había sido negativa en un principio- pero...¡Joder! En verdad aquello era la cereza sobre el pastel.

— ¿Qué vas a hacer? — Haruki preguntó lo que más temía preguntarse Uenoyama, pues estaba aterrado, y nunca antes en su vida se había sentido tan perdido — Bueno, todavía falta que Mafuyu lo sepa...

— ¿Qué yo sepa que? — preguntó de repente Mafuyu, apareciendo de la nada y acercándose a ellos, consiguiendo que ambos se sorprendieran 

— Ah...— suspiró Haruki — eh...umm — balbuceó, nervioso

— ¿AH? — Mafuyu alzó una ceja y una graciosa mueca se dibujó en su rostro confundido. Haruki parecía estar luchando con las palabras y Uenoyama era una momia petrificada a un lado. Su rostro estaba blanco como papel — ¿Qué rayos pasó mientras estaba en el baño?

¿Cuánto tiempo me fui?, se preguntó a sí mismo, pues no entendía como en los escasos minutos que estuvo en el baño hubo tiempo suficiente para que Haruki llegara y Uenoyama se viera como si le acabaran de sacar el aire con un golpe en el estomago.

— ¡Yo los dejo para que hablen! — dijo de repente Haruki, levantándose rápidamente del sillón y saliendo de la casa como alma que lleva el diablo

Haruki salió de la casa aporreando la puerta detrás de él. Un minuto de silencio lo siguió. Mafuyu carraspeó con la garganta, intentando iniciar conversación. Uenoyama estaba...raro

— ¿Qué tienes? ¿Qué hacía Haruki aquí tan temprano?

La voz de Mafuyu regresó a Uenoyama al planeta tierra. Había estado flotando en el espacio que era su mente en ese momento. Usualmente cuando tenía momentos de pánico imaginaba una reunión con todos sus yo internos, pero aquella noticia había sido tan impactante que ni siquiera ellos reaccionaron, todos los Uenoyama dentro de él estaban en shock, flotando en el espacio de su mente.