XLII

2.7K 362 9
                                    

—¿Sabes que Sunoo puede moverse en el agua?— dijo Ni-ki.

—¿Como un pez?— preguntó Jay.

El castaño lo miró con el ceño fruncido, Jay río.

—Bien, bien, continúa.

—El fin de semana lo acompañé a una sesión de agua-terapia. Tienen una piscina pequeña, pero profunda, esta hecha para personas como Sunoo.

>>El agua te llega hasta el cuello, pero puedes moverte perfectamente, y ayuda a la columna, que es el problema que tiene Sunoo.

Jay asintió, vió la sonrisa de Ni-ki y supo que lo había disfrutado mucho más que sólo acompañarlo en su terapia.

—¿Qué hicieron?— preguntó, a lo que Ni-ki alzó la vista, y tardó unos segundos en caer.

—¡No! No, no, no— negó, con sus mejillas enrojecidas—. Nosotros no... Hicimos eso.

Jay asintió, con una leve sonrisa.

—¿Y tú y Jungwon qué?

—Habla dormido— dijo el rubio con una sonrisa, para confusión de Ni-ki—. Creo... que nunca te explicamos su mudez... en resumen, Jungwon no puede hablar o hacer ningún sonido de forma consciente, pero si no hace cuando esta dormido, sin querer.

Ni-ki pensó un momento, para luego asentir.

—Es raro, pero Jungwonie siempre fue especial.

Jay asintió.

—Y... ¿eso?

Se miraron en silencio un momento, luego Jay negó.

—Tampoco— Dijo, bajo—. Igual, pensar en eso se siente raro. Conozco a Jungwon desde hace años, y una parte de mí lo sigue viendo como el adorable niño que tengo que proteger... Y por más que sea su novio y todo, lo quiero de una formas más amorosa, que sexual.

Ni-ki asintió.

—Con Sunoo me pasa algo parecido— concordó—. Somos amigos desde niños, y por el tema de su columna y todo eso... Es complicado.

Jay asintió.

—En ese sentido, Sunoo es especial.

Ni-ki sonrió ampliamente.

—Claro que lo es.

𝕄𝕦𝕥𝕖 ♧ 𝕁𝕒𝕪𝕨𝕠𝕟 ♧Where stories live. Discover now