School days with idiots.

Dazai el otaku 👬

TW: Bichos/insectos.

Miercoles 12 de septiembre del 2007

La escuela ha estado más insoportable que nunca.

Apenas una semana desde que Nakahara le cedió su puesto a Yuan como vicepresidente de las porristas, y todos parecían querer patearme. 

Sabía que, por alguna razón, Yuan me odiaba. Estaba muy seguro que a Shirase le daba igual, pero esa pelirosa traía algo contra mi. 

Había pasado de ser el Otaku-raro-que-no-le-hablaba-a-nadie a el Marginado-que-posiblemente-es-un-psicopata de la escuela.

Los traidores habían intentado convencer a Nakahara de que se uniera a su grupito, el único cambio sería que esta vez no sería el pelirrojo el centro de todo, sino Yuan y Shirase.

Nakahara se negó, y tomó mi lugar como El-raro-que-no-le-habla-a-nadie.

¿Y saben que era lo que más me enojaba? En toda esa semana, mis tostaditas no habían recibido justicia

Nakahara pronto se hizo amigo de otro pelirrojo con una bandita en la nariz que iba en otro grupo, lo presentó con su bola de amigos. Yo en cambio seguía peleando con la señora de la cafetería que no quería devolverme el dinero por mis tostaditas caídas.

Observé a ese chaparrito pelirrojo desde mi banca. Estaba tomando notas de algo que explicaba la maestra, era sobre un proyecto o algo así, no le estaba poniendo atención. Después de todo, era tutoria, ¿para qué rayos existe tutoria?

Sé que observar fijamente a alguien desde el fondo del salón puede parecer extraño, pero realmente me molestaba que no se vengara de Shirase y Yuan.

"Muy bien, pónganse en parejas"  ordenó la maestra.

Los alumnos rápidamente se juntaron entre ellos, gritandose y juntando bancas.

Yo volteaba a todos lados sin saber que era lo que estaba pasando.

Odiaba los trabajos en equipo, siempre ineficientes y con falta de comunicación. Usualmente una persona terminaba haciendo todo.

Eso, y que nunca tenía con quien juntarme.

Nakahara tampoco parecía tener con quien hacer equipo. Antes, Shirase y Yuan peleaban por ver quién se juntaría con él. Y siempre eran el grupito que decía "¿profe, se puede de tres?".

Ahora Nakahara veía fijamente su cuaderno, sin levantar la vista.

Debo admitir que me dio penita. Perder toda su vida social de un día para otro... No sé que se sentirá, jamás he tenido amigos, pero ha de ser feo.

Me levanté de mi lugar y me senté frente a él. Había garabatado distintos objetos que se encontraban en el salón.

"¿Qué teníamos que hacer?" le pregunté. Honestamente, no sabía ni para qué nos juntábamos.

El me miró fijamente por unos segundos, antes de voltear a ver a sus compañeros. Todos tenían equipo. Suspiro con pesadez. ¿Por qué suspiraba? No soy tan mal compañero.

"Tenemos que hacer 14 días de servicio comunitario en tres lugares distintos" me dijo.

¿14 días de servicio comunitario? No recojo ni mi cuarto, ¿cómo voy a hacer servicio comunitario?

Mejor me hubiera saltado esta clase.

La maestra no me dio tiempo a quejarme, de inmediato dio nuevas instrucciones.