Dos idiotas y un tsuki

Capítulo 10

Las semana había transcurrido, era jueves por la noche el trío de chicos se encontraban en la sala del pequeño departamento. Tsukishima se encontraba leyendo un libro mientras Kuroo y Bokuto se dedicaban a ver un maratón de caricaturas. Era ese momento de la semana donde los tres conviven juntos, era algo habitual aunque no hacían nada en especial o compartían muchas cosas solo eran ellos estando juntos sin hacer nada.

La primera temporada de los backyardigans había terminado, Bokuto y Kuroo decidieron que era momento para tomar un descanso e ir por un poco de comida. Después de tomar su merienda y también la leche que les había pedido anteriormente Tsukishima, los dos volvieron a la sala. Tetsuro tomó asiento en el sillón para dos en el cual se encontraba acostado Kei, invadiendo espacio personal y Koutaro tomó asiento en el sillón individual que se encontraba al lado de este.

-Así que Lentes ¿Porque te fuiste de la cabaña el fin de semana?- Cuestiona el peli azabache rompiendo el silencio de la sala.

-Te dije que tenía un llamado de la escuela que tenía que atender el domingo en la mañana- Responde dejando el libro en la pequeña mesa de centro, apartándose del cuerpo del moreno para tener más espacio.

-Cierto, con el chico lindo y de pecas del departamento de fotografía ¿verdad?- inquiere Koutaro.

Tsukishima no contesta y solo aparta la cara hacia un costado.

-ESPERA, Lentes ¿te acabas de poner nervioso?- Menciona Tetsuro gracias a la acción del menor

-Lentes, que pasa con ese chico. No me digas que mi pequeño bebé búho está enamorado- Chilla de manera dramática el peli bicolor.

-Que Lentes no es un animal y mucho menos un búho, si fuera así sería un gato-Ataca Kuroo.

-¡Claro que no! mi lentes es un buho bebe y no un feo gato- Contraataca Bokuto.

-Basta. Para empezar no soy un bebe, en segunda no soy ni un búho ni un gato, en tercera no soy de nadie y para terminar Yamaguchi solo es mi compañero de proyecto. No lo llames lindo ni pecoso- Anuncia de manera cansada Tsukishima.

-Okeey~, ¡pero si algo ocurre entre ustedes dos lo tienes que traer a casa para que pida tu mano y nuestra bendición!- Sanciona Bokuto  con un tono tipo madre.

-¡Que no pasa ni pasara nada con el! Dejen sus ideas tontas para ustedes que se supone que por eso son almas gemelas- Responde Kei con un tono de molestia.

-Tranquilo lentes, no tienes porque molestarte, es normal estar enamorado y por nuestra parte te apoyaremos- Dice Kuroo mientras pasa su mano por el hombro del menor.

-Agg, son demasiado molestos. Mejor di tu el porque has estado llegando tan tarde y saliendo tan temprano de casa desde el lunes. Aparte que ese mismo dia no llegaste a casa- Cuestiona Kei.

-Eso es fácil, e estado llendo a ver al chico que me gusta- Responde Kuroo restándole importancia.

La habitación queda en un total silencio después de las palabras dichas por el peli azabache, no porque lo desaprobaran o algo asi, solo era un poco extraño que de un momento a otro tuviera a alguien.

Después de aquel silencio Bokuto habló en un tono de gran alegría por su alma gemela y asi a continuacion tambien lo felicito el rubio. Tuvieron una pequeña charla del como fue el momento en que lo conoció (exceptuando algunas cosas que prefería quedarselas para el). Llegado un rato de aquella platica llego a colación la presencia de Tobio en aquella reunión.

-Por cierto lentes ¿Que paso contigo en preparatoria? no te vi en el ultimo partido que tuvimos con Karasuno. Pense que tu y Kageyama se llevaban bien, pero ni siquiera se dirigieron la mirada en el restaurante- Pregunta Kuroo 

-No tiene importancia, mi papá consiguió un nuevo trabajo después de la muerte de mama y decidió que podíamos cambiar de escuela y no es como si estuviera ansioso de ver de nuevo al fastidioso rey después de la escuela-Responde un poco inquieto y con una voz un poco molesta.

-Siempre pensé que te había gustado. Tu obsesión con él era un poco de manera romántica, llegue a pensar que podrían ser almas gemelas. Pero me imagino que tu eres de esa personas que ni siquiera tienen una- Charlotea Bokuto sin siquiera prestar atención a lo que dice.

-Cierto, siempre lo estabas molestando, pero aun asi lo conocías mejor que nadie del equipo y sabias casi toda su trayectoria. También se me hizo raro que conocieras tanto de él diciendo que no lo soportas- Aporta Kuroo.

Tsukishima solo se levanto del sillón en el cual estaba sentado, tomó su celular y auriculares que estaban puestos en la mesita y salió sin más del departamento.

Kei simplemente salió del departamento sin rumbo fijo, solo no podía soportarlos más. Sabía que eran unos idiotas y estaba acostumbrado a eso, pero esta vez simplemente no lo podia soportar mas. No era el hecho de la personalidad de sus compañeros de cuarto si no la existencia del antes nombrado.

Podría haber tenido una vida normal hasta ahora, nunca le importo que lo juzgaran por no tener amigos, tampoco le molestaba el hecho de que todos pensara que no tenía sentimientos, ¡nunca le importo un carajo la opinión de los demás! ¡Pero tenía que llegar el maldito de Tobio y poner de cabeza  todo lo que él llamaba vida! Todo habia estado bien si el no hubiera aparecido; Podría haber tenido una linda y solitaria vida, podría haber estado en el maldito club de literatura y llevar una vida tranquila lejos del voleibol y las mentiras de su hermano. ¡Pero no! tuvo que llegar él y hacer que tomara decisiones impulsivas solo por el estúpido "amor". Siempre pensó que aquel dicho de "el amor te vuelve tonto" era solo una estupidez para justificar las acciones de las tontas personas que lo decían, pero ahora solo se consideraba el más tonto de todas por querer ocuparla como excusa de sus propias estúpidas acciones.

Simplemente todo era estúpido, su madre no estaba, su hermano es como si tampoco y su padre ni hablar. Cada parte de su cuerpo es una mierda por cada vez que el mismo lo lastimaba, su mentalidad no era la mejor de todas. Pensó que todo lo que había pasado lo había superado, pensó que todo ese mal lo había olvidado y que ya nada mas le podria hacer daño. Todo eso era una absurda mentira ninguna de las heridas de su cuerpo se irán, cada pesadilla vivirá en su recuerdo. 

Su mente volvió en sí después de pasar su mano por aquel collar que estaba en su cuello, los pequeños colgantes de fresitas le hicieron recordar que estaba caminando por la calle sin algún rumbo. Kei tallo un poco sus sienes para dirigir su mirada hacia el lugar en el que estaba parado.

Sin darse cuenta había llegado al parque. Era el parque de las mariposas, un lugar sorpresivamente bonito, con pequeñas zonas de flores y un mariposario. Era el lugar que solía visitar con su madre cuando era pequeño y su lugar seguro en sus momentos de crisis. Decidió tomar un pequeño paseo antes de regresar a su departamento ya que estaba ahí. Estaba decidiendo la playlist que escucharía hasta que un llamado conocido captó su atención.

-¡TSUKKI!-

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*Se retira lentamente, antes de que le reclamen*🏃🏃🏃🏃

¡Nos vemos en algun otro miércoles!