Una espera equivocada ||TAEGI

02

-Definitivamente no.

Jimin hizo un puchero y YoonGi lo miró mal, metiendo en su boca una porción de arroz.

-Vamos amor, no me digas que no te agrada la idea de tener un pequeño entre nosotros, un pedacito de ambos que corra entre los pasillos de la casa y te diga mamá.

Entonces YoonGi lo imagino, un niño todo sucio con el pañal colgando y todo chorreado con las babas esparciendolas por todos lados.

Simplemente repugnante.

-No-respondió con un gesto de asco genuino en su rostro-en mis planes no está tener hijos, mucho menos que me hablen por pronombres femeninos.

-Pero...

YoonGi suspiró, viendo a su prometido con fastidio.

-Ya hemos hablado muchas veces de esto, Jimin, yo no tengo deseos de ser padre.

-Pero nos vamos a casar... ¿No quieres formar una familia conmigo?

-De momento no esta en mis planes, Jimin, entiende.

-Pero si tu eres muy bueno con los niños, incluso a ellos les gusta estar contigo en el hospi...

-Escucha-YoonGi colocó sus palillos sobre la mesa, mirando a su pareja fijamente -Que yo sea profesional en mi trabajo no quiere decir que es algo que yo desee, yo no lo quiero, no ahora, ¿porqué siquiera seguimos teniendo esta absurda conversación en estos momentos?

Jimin bajo su mirada, antes de levantarse de su lugar en el comedor y tirar los restos de comida en el contenedor de basura.

-Me iré antes, hoy me toca estar en los cuneros-dijo Jimin haciendo una mueca antes de retirarse por completo, dejando a YoonGi solo.

YoonGi sostuvo su rostro entre sus manos, y exhalo, dejando salir el aire retenido en sus pulmones.

Enserio, ¿cuál era la urgencia por tocar el tema de los hijos?

Hasta cierto punto, YoonGi lo entendía, sabía que Jimin adoraba a los niños. Incluso había hecho una maestría en pediatría por lo mismo. Y cuando ambos se enamoraron y YoonGi le había comentado sobre su capacidad para embarazarse, el había notado esa emoción y brillo de ilusión en sus ojos. YoonGi lo sabía, sabía que llegaría el momento en que tendría que darle un hijo, pero el simplemente no se sentía listo, incluso se atrevía a decir que le asustaba un poco.

Era un hombre, las posibilidades de que el embarazo tuviera algún tipo de riesgo, a pesar de ser mínimas por los grandes avances en la tecnología, seguían estando ahí, y aquello le aterraba.

Decidiendo que no tenía caso pensar más en ello de momento, se levantó de su lugar con toda intención de volver a su área de trabajo, cuando sintió su celular vibrar, seguido de ese tono personalizado de llamada, aquel que solo tenía con dos de sus contactos.

Y ya que Jimin no podía ser, sólo le quedaba una opción.

-¿Nam?

-¡Yoon!, hola, hace tanto que no se de ti, me tienes abandonado.

-Nos vimos hace dos días, en la cena de compromiso.

-Demasiado tiempo, pero bueno, ¿cómo has estado?

-Bien, bueno volví a pelear con Jimin, ya sabes lo normal, lo mismo de siempre.

-Me alegro que estés super bien.

-¿Estas escuchando siquiera lo que di...Espera, ¿cuál el verdadero motivo de tu llamada?

-Pero YoonGi -dijo Namjoon haciendo un gesto exagerado aunque el contrario no podía verlo -¿Cómo puedes pensar algo así de mi?

-¿Entonces no es nada?

-Claro que no.

-Bien, entonces te dejo, tengo que volver al trabajo, ya sabes, no toda la gente tiene un novio millonario que te mantenga y te saque del trabajo.

Namjoon soltó una leve risita.

-¿Nunca lo vas a superar no es así?

-¿Cómo pasaste de ser su asistente a su pareja?, lo supere hace mil años.

-Se nota.

-Ni siquiera lo conozco.

-Por qué no has querido.

-¿Y ver cómo ambos comparten sus fluidos?, no gracias, pasó.

-¿Desde cuando eres tan asqueroso?

YoonGi miró el reloj en su muñeca e hizo una mueca, el realmente tenía que volver ahora.

-Voy a colgar, realmente tengo que irme-dijo para bajar su celular con intenciones de colgar la llamada.

-¡E-espera!-YoonGi se detuvo, volviendo el celular a su oreja izquierda.

-Dilo rápido Nam, me llamaran la atención.

-Ven hoy a mi casa después del trabajo, ahí te diré todo, ¿si?

-Nam...

-¿Por favor?

YoonGi suspiró.

-Está bien, nos vemos allá.

-¡Si!, gracias YoonGi, te quiero amigo.

YoonGi sonrió, iba a responder cuando Namjoon lo interrumpió.

-Bueno te dejo para que no te regañen, adiós -dijo para finalizar la llamada.

YoonGi parpadeo, viendo fijamente el teléfono.

Aveces su amigo podía ser bastante extraño.