Capitulo 23

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Lazos de sangre.

Tanit.

Todos están alerta y temerosos de que llegue Giovanni Bianco a la central, una vez que bajamos me separo de Nikolaj quien me suelta la mano para acercarse a Giovanni.

—A la sala de investigaciones—ordena.

Me quedo parada para que el camine pero se detiene para voltear en mi dirección.

—Te dije siempre a mi lado—me regaña.

—¡Tanit!—me llama Tyler quien está con Thomas y Eiza—¿No vienes?

—Debo ir con el general lo siento—los dejo mientras sigo a Nikolaj.

Todos miran a Giovanni mientras camina aún con la bala en la pierna, no lo quiero observar mucho ya que algo causa en mi, no es amor ni nada de esas mierdas es algo más raro.

Una vez que llegamos lo sientan y este se queja haciendo que comience a gritar.

—¡Hijos de perra!—grita lo más fuerte que puede—¡Malditos! ¡Ojalá todos se mueran!—nadie lo mira o le habla, dos personas se colocan detrás de él, las esposas le toman sus muñecas y tobillos.

Con Nikolaj nos enfrentamos a él para que este comience a reír, ≪Genial un loco de mierda .

General Morrison—le sonríe—Y...—intenta leer mi gafete—Teniente coronel Tanit Bythesea.

—No estamos aquí para juegos—le dice Nikolaj irritado—Así que coopera que no tengo paciencia.

—¿Tú de verdad crees que yo traicionaré a mi familia?—cuestiona impresionado—¿Solo para ayudarte a ti?

Nikolaj no le dice nada solo se levanta hasta donde está él para lanzarse un puñetazo en toda su herida de bala, este grita fuerte para que Nik lo tome del cabello y le tome su cara.

—Coopera o no tendré piedad—le susurra.

—No dire nada..—gime adolorido.

—Bien—le vuelve a pegar en su zona para que dos de sus dedos los meta en la herida—Habla.

Giovanni no deja de gritar quedo en blanco ante tal escena pero me obligo a moverme para tomar a Nikolaj de su brazo y sacarlo de ahí.

Giovanni me mira por un segundo y nuevamente vuelvo a sentir esa vibra extraña.

—¿Tú también lo sientes?—pregunta adolorido mirándome.

—¿Sentir que?—le devuelvo la pregunta.

—La vibra—suelta.

Me quedo callada ante eso, Nikolaj nos mira a ambos para ignorar eso.

—No hables mierdas y mejor ayuda que te puedes salvar—dice irónico.

—No me creas idiota.

Ahora me enfado yo lanzándole un golpe en su cara, la sangre le brota de la nariz para lanzarla al suelo.

—Hija de perra—susurra.

Ahora Nikolaj lo golpea nuevamente en la herida para que esté se queje fuertemente.

—Tan terco como un Bianco—dice Nikolaj por lo bajo.

—Habla maldita escoria—exclamó.

—Pueden golpearme todo lo que quieran pero no dire una mierda—me lanza un escupo que no alcanza a llegarme.

Nikolaj lo toma del cuello para lanzarle el un escupo en su cara.

—Bien ya que no hablarás haré lo siguiente—su mano sigue con sangre pero la comienza a limpiar—Te interpondrás a un juicio el cual se llevará a cabo en dos días más por ahora te tendrán en la celda como te lo mereces pero con los más peligroso cosa de que pagues por lo que has hecho—se voltea—Sin más que decir cuídate—sale del lugar y me veo obligada a seguirlo.

Peligrosa Adicción Donde viven las historias. Descúbrelo ahora