la casa de papel (palermo)

volumen 1. "26. a cubierto"

las paredes tiemblan y un poco de polvo cae del techo, lo que hace que palermo, rio y bogota frenen su caminata en las escaleras. palermo agarra la radio de inmediato cuando siente que su corazon se detiene. "velez" es lo primero que pronuncia, sin obtener respuesta. "helsinki" dice sintiendo que se ahoga. lo primero que le sale hacer es mirar a rio, y se asusta el triple cuando lo ve con los ojos bien abiertos y entrando en panico al igual que bogota. "¡velez, helsinki! ¡¿me escuchan?!" ahora grita. nada. silencio puro.

1 mes antes de la hora cero.

(...) ... "... lucas se juntaba mucho con los ladrones del barrio, los que le vendian la droga. y un dia se afanó 25 millones de un banco. esa tarde noche yo volvia a casa despues de comprar para cocinar, y vi la mesa llena de plata. no lo podia creer. fajos todos encintados uno encima del otro. el sueño de cualquiera. pero... ¿que otra cosa me llamó mas la atencion? que se estaba merqueando otra vez. no se porqué, pero cuando lo vi asi, en ese preciso momento, me volvi loca. fui, le metí una piña y le tiré todo el polvo al piso. me cagó a palos y yo a él, entre los dos. pero esa vez nos pasamos. a la noche mientras dormiamos yo pensaba, y miraba la plata arriba de la mesa. él se la iba a gastar toda en droga y probablemente se iba a morir. ¿qué hice yo? me llevé toda la plata para que no se mate. y esa misma noche, mientras él dormia tan profundo por el paco, que ni un helicoptero lo iba a despertar, me fuí. me compré un par de cosas como para mudarme, y me fuí a las bahamas, lugar que siempre soñé. despues de unos cuantos meses me llamó el profesor, y ahora estoy aca" sonríe y mira a palermo, quien le devuelve la sonrisa. "y nunca más lo volví a ver. lo que hice, lo podes tomar como quieras. le robé la plata por chorra traidora hija de puta, o para salvarle la vida. yo se porqué lo hice. le pedí al profesor que me averigue como andaba él, y me contó que se curó. consiguió trabajo y le va muy bien, por suerte" palermo, muy metido en la historia que velez le acaba de contar, siente que debe hacer incapié en una parte... (...).

"¡velez! ¡helsinki!" la voz de palermo a traves de la radio. velez siente la cara contra el piso. poco a poco y aturdida, gira sobre su cuerpo desparramandose por el suelo. logra abrir los ojos y escucha a palermo en la radio. encuentra a helsinki un poco mas alejado, y cuando nota su situacion, se desespera. "¡velez!" se arrastra hasta él a velocidad.

"¡helsi!" dice velez al borde del llanto al encontrarlo casi muerto con su pierna atrapada por una estatua que cayó sobre él. es literalmente imposible que velez pueda mover esa estatua, pero por inercia, lo intenta. sin resultados, niega con la cabeza a punto de llorar. lo toma por el rostro. "¡helsi aguanta!" le pide y agarra la radio. "¡palermo!" grita velez. palermo, por su parte vuelve a respirar y se agarra del antebrazo de rio. "vengan por favor" grita velez apurada. "helsi está a punto de morir ayudenme estoy sola, volaron el techo estos hijos de puta" dice y observa como los gendarmes ingresan con unas sogas desde el techo. "¡vengan que estoy sola!" finaliza y sin esperar respuesta, agarra su rifle, se esconde detras de la estatua y dispara sin parar a los gendarmes. son alrededor de catorce, contra ella sola. en cuanto se oculta en su escondite, recibe todos los disparos de vuelta. recarga el rifle mientras cierra los ojos con fuerza al sentir el rebote de todas las balas por la estatua y las paredes. "¡aguanta helsi!" grita y en cuanto tiene oportunidad, devuelve todos los disparos. en alrededor de cuatro minutos, aparece la salvacion. palermo, rio y bogota ingresan al tiroteo y le dan tiempo a velez de que cargue su rifle. una vez que lo logra, ahora ella dispara mientras palermo, bogota y rio intentan quitar la estatua de encima de helsi. "¡no lo van a poder mover!" grita velez sin detenerse. "¡pesa minimo una tonelada!" finaliza y se esconde cuando los gendarmes devuelven los disparos.

"¿eso servirá?" pregunta rio señalando una de las columnas que penden de un hilo sobre el techo.

"¡lo vamos a averiguar!" grita palermo y le da una indicacion a velez que solo ella entiende. velez quita una bengala de adentro de su ropa y la arroja hacia el escondite de los gendarmes, provocando una gran cortina de humo que no deja ver absolutamente nada, oportunidad para que bogota y rio salgan al campo totalmente expuestos para bajar esa columna. velez aprovecha y se arrastra hasta helsinki y toma la mano de palermo. "¿te golpeaste?" le pregunta palermo apretando sus dedos. ella niega con la cabeza rapidamente, mintiendole. ambos acarician a helsi para que no se duerma, y justo cuando velez y palermo se miran al mismo tiempo y se dedican una pequeña sonrisa, unos disparos rebotando contra la estatua los asusta, y uno de ellos impacta en el chaleco de palermo. la primera reaccion de velez es gritar del susto y sin pensarlo, desactiva una granada que tiene colgada y la arroja hacia el escondite de los gendarmes, sintiendo que eso protegerá a palermo de cualquier cosa. "¡chaleco!" grita palermo adolorido para velez y ella abre los ojos en sorpresa. bogota y rio corren hacia el escondite y entre todos tapan a helsinki. la granada se detona no muy lejos de ellos y rompe casi todo a su alrededor, logrando, por suerte, que la columna que rio y bogota estaban tratando de bajar, caiga en su totalidad.

"¡yo los cubro!" les grita velez y arroja otra bengala, saca el rifle y se pone a disparar ciegamente. escucha el grito degarrador y agonizante de uno de los gendarmes y se le estremece el corazon. palermo se une a ella para disparar.

"¡velez te tenes que calmar!" grita palermo a su lado. "¡no podes tirar una puta granada por cada rasguño que me hagan, estas loca!" velez siente unas inmensas ganas de llorar. siente que acaba de volver al pasado, cuando defendia a su ex novio, y siente las mismas sensaciones espantosas que la devuelven a esas epocas en donde tan mal la pasó. velez no le contesta, y menos cuando lo unico que escucha son los gritos agonizantes del gendarme que seguramente ella hirió. en ese mismo momento, bogota y rio aparecen con la columna justo a tiempo cuando el humo termina de desaparecer. y es cuando velez ve a quien hirió, y su herida. la pierna de aquel hombre uniformado verde, reventada a hueso vivo. se trauma al instante, se le quiebra el corazon y se siente literalmente una asesina. por inercia deja de disparar y se le corta la respiracion. los gendarmes aprovechan y comienzan a disparar. las balas rebotando a centimetros de ella la hacen reaccionar y se oculta tras la estatua, temblando, sin poder respirar y sintiendo que las venas de su cuello reventarán del estres.

(...) ... "..."me gustaría citar algo de tu historia" dice palermo ahora mirandola a la cara. ella asiente con la cabeza curiosa. "habias dicho que querias que él vuelva a ser la persona que era cuando lo conociste"

"exactamente" palermo se rie, sintiendose identificado y recordando a berlin. antes del beso que le habia dado, berlin era uno. luego de eso, berlin era otro. y nada le habia roto mas el corazon que aquella desilusion.

"casi siempre nos pasa eso. no hay limite en lo lejos que iría, no hay barreras ni lonjitud. siempre decimos eso cuando conocemos a esa persona que creemos que es la correcta. y una vez que la tenemos, nunca es lo mismo. la querés cuando no te quiere, y una vez que lo hacen, derrepente los sentimientos cambian" palermo mira al cielo y ella tambien lo hace, encontrando la luna apenas saliendo por el atardecer. "somos como cohetes espaciales, y el corazon de él o ella, es la luna. y vamos directo hacia allí. puede salir bien, o te podes estrellar" velez mira a palermo hipnotizada en sus palabras. solo hacia falta una charla profunda con él para darse cuenta de que su ego y arrogancia, su mal humor y sus malos tratos, podrian ser opacados por un momento por esos pensamientos. por su parte, palermo encuentra en ella, una mujer realmente fuerte que ha soportado de todo. su imagen de niña juguetona y molesta, queda en segundo plano al conocerla realmente. pero palermo jamas se lo diría, su orgullo y su forma de ser nunca se lo permitirían. jamas dejaría mostrar esa faceta de él frente a una mujer, y menos frente a ella. solo le queda guardarselo para él. "generalmente a las mujeres que pasan por lo que vos pasaste, les llega la bendicion de un caballero, no un hombre. asi que, ya te va a llegar uno" es lo unico que dice con un tono casi sin importancia, disfrazando un deseo inconciente dentro de él y lo que verdaderamente le diría en ese momento.

"gracias, palermo" le responde ella con sinceridad. aprovecha que palermo se encuentra distraido mirando el cielo para echarle una mirada con media sonrisa, entre feliz y sorprendida de haber conocido otro palermo. vuelve su vista a la lluvia y es cuando palermo se da cuenta de que ella ya no lo está observando, entonces, la mira. y la analiza, y la conoce como realmente es. y suspira cuando en su corazon siente exactamente la misma sensación que sintió aquella tarde de otoño cuando conversó con berlin y lo conoció como realmente era. (...)

velez mira a palermo y todo parece ocurrir en camara lenta. y es cuando se da cuenta de que si palermo muere allí, ella no podría ser capaz de soportarlo. unas balas rebotando cerca de rio hacen que velez salga del escondite y dispare a cualquiera que se encuentre entre los gendarmes. "¡necesitamos refuerzos!" grita denver a traves de la radio de palermo. "¡son demasiados contra solo tokio y yo! ¡por lo menos que venga uno!" velez vuelve a esconderse y sin dudarlo grita.

"¡yo voy!" avisa, se levanta de su lugar y comienza a correr lejos.

"¡no!" niega palermo.

"¡ustedes saquen a helsinki!" grita velez y desaparece por los pasillos. palermo la mira hasta el ultimo segundo en que desaparece de su vista. suspira, traga saliva y aprieta el boton de su radio.

"denver, velez va en camino" anuncia.