Extra 2

1.7K 178 62
                                    

Sukufushi.

La fresca brisa de verano golpeaba con suavidad en su pálido rostro. El pequeño azabache de azulados ojos jugaba en el parque con sus dos mascotas en compañía de su progenitor, quien lo cuidaba desde una banca.

Recuerda vagamente la aparición espontánea de dos cabelleras rosadas discutiendo por cuál de sus caninos abrazar, mientras que el padre de estos charlaba amenamente con el suyo. Los gemelos se acercaron a su tímido amigo, quien los recibió con un abrazo. Uno de ellos sonrió ampliamente mientras mencionaba su irónico nombre, por el contrario, el otro chico solo le observaba.

Él siempre llamó su atención, un ser completamente distinto al otro, a pesar de su amplio parecido, con un carácter pésimamente pesado. De niños muy pocas veces logró interactuar con el, aún si se conocían, sentía no conectar en ningún aspecto. Y ciertas veces, llegó a pensar que el chico simplemente no era de su agrado.

«Quizás porque ambos éramos Alfas»

Sin embargo, siempre tuvo la esperanza de mejorar con él, aún así, llegada la adolescencia se dio cuenta que realmente no lo toleraba. Era un altanero, grosero, problemático, confianzudo y mujeriego.

«Pero...»

Pero cuando su presencia estaba cerca, daba lo mejor de sí para no sacar a relucir dichas conductas. Se comportaba totalmente opuesto a cómo era, confundiéndolo muchas veces. No obstante, lo conocía, conocía muy bien a su... amigo. Tratar con Ryomen era como tratar con dos personas diferentes en una. Con las demás personas solía ser de cierta manera, mientras que con el...

«Siempre fue así, y nunca lo quise ver»

— Fushiguro...

«¿Realmente se trataba de eso? ¿O solo era mi mente jugando en mi contra?»

— ¡Fushiguro! - gritó el chico desesperado al ver que su amigo despertaba aturdido

— Que... ruidoso eres, Yuuji - dijo, por fin, cuando se estabilizó, recomponiendo su postura a la silla

— Me preocupaste - comentó con los ojos llorosos - Esta es la tercera vez que te desmayas de repente, ¿Estás enfermo?

El Alfa intentó recordar las otras veces mencionadas por el pelirosa. Sin embargo, no recordaba nada.

— No. Debió ser por el calor - contestó - Estoy bien, ¿De que hablábamos?

El Omega lo observó preocupado, eso no era normal. Ambos se encontraban solos en la cafetería de su instituto, pues ya la hora de salida había pasado.

— Estaba hablando de mi hermano - dijo - Tu eres el único al que Ryomen escucha, deberías considerar siquiera...

Había recordado de golpe la conversación con el chico, por lo que sabía a qué se refería, y lo interrumpió.

— Itadori, no - enunció serio - Te lo he dicho muchas veces, él no me agrada y no tengo porque meterme en sus asuntos. Aún si él me considera alguien importante, yo no. Ni siquiera sé, en primer lugar, porque es así conmigo, me parece hipócrita de su parte

— Megumi, no lo entiendes, él está e...

— Me tengo que retirar Yuuji - comentó levantándose de la silla donde se encontraba al observar una figura acercarse

El Alfa lo miró durante segundos cuando se acercó y pasó al lado suyo, sus ojos no podían estar más brillantes y atentos en ese momento.

A los ojos de Ryomen, Megumi era como una maravilla andando. Una dulce joya prohíbida que solo podía ser observada de lejos.

Baby Counterattack - Goyuu [Resubiendo]Where stories live. Discover now