Capítulo 10. No es de mi incumbencia
– Aquí esta tu helado de chispas de chocolate y el tuyo de queso. – Félix llego a nuestra mesa.
– Aww, recuerdas nuestros favoritos. – comenté con ternura.
– Obviamente. – reímos. Estábamos en nuestra heladería favorita pasando el rato, como siempre lo hacemos.
– ¿Pueden creer que mi madre me interrogo diciendo que si había alumnos que me molestaban? – reímos ante su comentario. – Esta paranoica, al igual que papá y eso que apenas llevamos un mes en esa escuela.
– Pues fíjate que los míos están normales. – dije. – Me sorprenden mucho.
– Los míos están como los de Sadie, en sí, les vale si me esta yendo bien o mal. – le resto importancia.
– ¿Has intentado hablar con Zoey? – pregunté cambiando de tema.
– Hemos estado hablando como antes, ya saben, por mensajes. – chillamos de emoción – Así que creo que las cosas van bien. – sonrió de lado.
– ¿Y cuál es el siguiente movimiento? – dijo Pau.
– Voy a escaparme con Zoey. – mi amiga y yo nos atragantamos.
– ¿Qué dices? – pronunciamos al unísono. Félix parecía bastante convencido.
– Si, ya lo pensé mucho y creo que lo mejor es irme con ella. – estaba en shock.
– Alto, alto. – sacudí mi cabeza– ¿Lo dices muy enserio?
– Claro que lo digo muy enserio y estoy a punto de proponérselo. – miré a mi amiga preocupada.
– Félix no puedes hacerle eso a Zoey, ella tiene sueños por cumplir. – comentó ella y estuve de acuerdo. – Y tu también, eso es obvio.
– Lo sé, por ello nos escaparemos cuando los dos terminemos la escuela. – sentí un poco de alivio.
– Wow, pues...nosotros no sabemos que decirte. – hablé.
– Recuerden que este es nuestro plan. – nos miro a las dos – Hacer lo que a nosotros nos nazca y no seguir los pasos de nuestros padres. Con eso probaremos que no seremos mas sus marionetas.
– Me alegra mucho que tu ya tengas tu plan a la perfección, pero debes pensarlo muy bien. – comenté.
– No es un gran plan, pero se que lo perfeccionaré al paso del tiempo. – suspiró – Mis padres siguen mas empeñados en acercarme a Madeline, pero ni ella, ni yo, estamos convencidos de casarnos.
– Genial, la tienes más fácil. – añadí con frustración. – Paul si esta cien por ciento convencido de casarse conmigo.
– Ya te vendrá algo a la cabeza.– Félix tomo mi mano – Tal vez mi "pareja" es la mas comprensiva, pero tu tienes a los padres mas flexibles. – Pauline asintió con la cabeza estando de acuerdo con lo que dice nuestro amigo – Estoy seguro que, si logras convencerlos sobre que esa idea es horrible, ellos puedan cambiar.
– Nuestros padres ni siquiera les interesa nuestra opinión. – volteé a ver a mi amiga – Al menos tus padres tienen un poco mas de conciencia, amiga.
– Me sorprende que se expresen así de mis padres, porque yo jamás lo había pensado. – hice una mueca y al momento se me vino a la mente ese día de la cena, donde mis padres no se veían tan convencidos de apresurar el compromiso. ¿Y si realmente tienen razón mis amigos?
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Te quiero conmigo (Libro I) (Terminada)
Teen FictionDe "mundos" diferentes, pero con la seguridad necesaria como para decir: Te quiero conmigo.