Tú no eres mi Holly. •||• Yoonseok/Sope.

☆15☆

El pálido dejó sus cosas en la misma mesa de siempre y se dirigió a la barra, pues al parecer el camarero habitual se encontraba de descanso en ese momento.

—Un frappé de caramelo y un latte.

La bonita chica anotó su orden y le afirmó que ella misma iría a dejar los cafés a su mesa, él solo le agradeció y se fue a sentar.

Sacó un libro que prestó de la biblioteca, El fantasma del piano, lo leería mientras su amigo de la infancia llegaba.

Afortunadamente no pasó mucho tiempo, y aunque el libro le había llamado mucho la atención, sentía sus ojos cansados de tanta clase.

El chico rubio se sentó frente a él, parecía algo tenso. —Hey.— Le saludó mientras guardaba nuevamente el libro en su mochila.

—Hyung...— Se rascó la nuca sin saber que más decir. En ese momento llegó la chica que estaba trabajando sola en la cafetería y colocó en la mesa ambos pedidos, Taehyung sintió que un tenue color carmesí pintó sus mejillas al ver que su hyung había pedido por él, y sobre todo, era su favorito. —Hyung, yo...— Levantó por fin la mirada hacia él, pero el pálido negó suavemente con la cabeza mientras bebía un sorbo de su taza.

—Taehyung, yo te debo una disculpa. Me precipité al molestarme y ni siquiera te cedí el darme una explicación.— Juntó sus manos por sobre la mesa mirándole. —De hecho si estás enojado conmigo, tienes todo el derecho, incluso te dejaré golpearme.—

El menor sintió sus ojos picar, pero no dejó que ninguna lágrima cayese de sus ojos. —Realmente eres un imbécil, hyung.—

—Lo sé...— Suspiró. —Jungkook me dijo lo que pasó esa vez. Debí haber parecido un imbécil yéndome de esa forma...—

Rió. —Siempre pareces un imbécil.— Probó por fin el frappé que había sido puesto frente a él. —Por cierto, ¿por qué le diste mi número a ese niño?, ¡No deja de acosarme!—

—Oye, oye, ¿quién te dijo que eso era tuyo?— Dió un capirotazo juguetón  a la nariz del rubio mientras una sonrisa burlesca aparecía en su rostro. —Y bueno, parece que realmente le gustas al chico, déjalo que se acerque un poco.— Se alzó de hombros. —Si no te termina de convencer, solo rechazalo. O... ¿Es que acaso ahora te gustan las mujeres?— Dijo falsamente preocupado para después soltar una gran risotada.

—¿¡De qué hablas!? ¡No!— Respondió exaltado. —Pero... ¿Es que acaso ya no te gusta Jeon?— Ladeó la cabeza mientras se le iluminaba el rostro cuando el contrario negó con la cabeza.

—No, no, él fue solo una pequeña atracción, creo.— Una mirada irónica fue dirigida del rubio al pelimenta. —¿Sabes? Después de la fiesta conocí a alguien.— La cara de Taehyung se apagó de a poco, pero igualmente cuestionó acerca de aquello con su mirada. —A pesar de que estaba oscuro y él llevaba diez abrigos encima pude ver parte de su rostro. Su mirada era brillante y cálida, parecía haber pasado por muchas cosas... Su voz era tan dulce y animada, yo estaba algo ebrio pero la recuerdo perfectamente, me encantaría volver a esucharle, pero, ¿sabes? Lo que más destacaba de él era su hermoso cabello castaño, le salían apenas unos mechones pero eso bastó para que me quisiese acercar y acariciarlo.—

Aquel último dato alarmó al rubio, pues fue exactamente como él se sintió cuando vió por primera vez a Hoseok. —Vaya... Pareces haberme descrito a Holly.— Bromeó, aunque realmente esa simple afirmación hizo que le doliera el pecho por alguna razón, ¿era posible que Hoseok se hubiera presentado anteriormente ante Yoongi?

—Ahora que lo dices... A simple vista era similar a Holly, si, su mirada me transmitió la misma paz que cuando veo a mi cachorro a los ojos. Pero definitivamente el pelaje de mi criatura es más bello.— Afirmó mientras sonreía levemente.

—Oh, vaya, si no recalcaras ese último punto podría haber jurado que te volviste loco y tu mente volvió humano a tu perro.— Rió tratando de no sonar forzado, Hoseok había dicho que aún no estaba preparado para que Yoongi lo viera en esa forma, ¿en realidad mintió? Miró atentamente las reacciones del pálido para notar alguna señal de alerta que le dijera que él ya sabía acerca de su mascota. Pero sus reacciones fueron totalmente naturales, lo que descartó cualquier posible sospecha del rubio.

—¿De qué hablas? ¿Te volviste más estúpido?— Rodó los ojos. —Definitivamente mi Holly está mejor como perro, son menos complejos que las personas y siempre está conmigo.—

—... Ya veo...— Musitó Taehyung, queriendo gritar a los cuatro vientos la estupidez de su hyung.

—Tae, tengo que irme. Nam no está en casa y Holly debe estar hambriento.

—¿Estás viviendo con Nam?

—Si, temo que en mi casa haya alguien, la están revisando ahora mismo.— Se colocó la mochila en el hombro.

—Oh, está bien, cuídate mucho, hyung.— Sonrió animadamente.

—Estamos bien, ¿no?

—Por supuesto.— Sonrió esta vez un poco menos genuino mientras miraba al chico marcharse. Rápidamente marcó el número de Seokjin.

—¿Hola?

—Jinnie, creo que Yoongi... Creo que conoció a Hoseok...— Murmuró solo para el micrófono del móvil.

—¡¿Qué?! ¡Eso no puede ser posible! Tú dijiste que él dijo que no dejaría que lo viera aún.

—Si... Pero, ¿y si mintió? Aunque hyung dijo que no sabe su nombre, al parecer solo miró la mitad de su rostro.

—Creo que es algo serio. Debemos de decirle a Namjoon.

—¿Tú crees?

—Si, parece inofensivo pero puede estar planeando algo, talvez la faceta de bobo sea una mentira.

—Tienes razón, ven a mi apartamento, voy a llamar a Nam.

[...]

—¿Qué es esa cosa muy importante y urgente que tenían que decirme? Estaba en una reunión, más vale que valga la pena.— Cuestionó el moreno mientras se sentaba en una de las sillas del pequeño apartamento del rubio.

—¿Qué tan buena debió de haber sido la reunión? Hasta te dieron cerveza para llevar.— Sonrió con ironía el mayor en el lugar, recibiendo un bufido de parte del alto.

—Chicos, basta. Centremonos en lo más importante.

El relato comenzó y la cara de Namjoon pasó a una de total desinterés a una horrorizada a medida que avanzaba la historia.

—¿Qué mierda están diciendo ustedes dos? ¿Un perro que se transforma a humano?

—Agh, te dije que iba a ser imposible.— Afirmó Taehyung a su mejor amigo.

—Es que es una completa estupidez, he pasado un buen tiempo y en ningún momento se ha "convertido a humano"

—Ja, eso dices tú.— Murmuró el mayor.

—¡Te digo que es verdad! ¡Nosotros lo vimos!— Palmeó la mesa. —¿Quién crees que se comía todo en casa de Yoongi? ¡Era él! ¡Lo secuestré para que Seokjin me crea y efectivamente ahora lo hace! ¡Él se transformó!—

—¡¿LO SECUESTRASTE!? ¿¡En ningún momento escapó!?

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