FO - Parte 1

Capítulo 5. ¿Qué es pretender ser inocente?

Como si su cuerpo estuviera a punto de ser roto, Cen Li frunció el ceño en agonía y no hizo ningún sonido.

Por el contario, Ning Xiuyuan suspiró con satisfacción y su cinturón ya estaba totalmente desabrochado. Pero cada que movía su cuerpo hacia arriba, la otra persona intentaba apartarlo.

Cen Li cerró los ojos, las lágrimas que se habían acumulado en ellos, se deslizaron silenciosamente desde las esquinas de sus ojos y cayeron por debajo de las sábanas de la cama, manchándolas con una pequeña mancha de agua.

Sin embargo, esta apariencia estimulaba aún más la ferocidad en el cuerpo de Ning Xiuyuan.

Los pálidos labios de Cen Li fueron mordidos hasta que la sangre se filtró de la herida, como si fueran pétalos que se vieron obligados a marchitarse, y Ning Xiuyuan apretó su barbilla para que sus labios no pudieran cerrarse.

—¿Qué es toda esta pretensión de inocencia?

Cen Li inclinó la cabeza hacia un lado, evitando deliberadamente las palabras del otro hombre.

—¡Bien, me gustaría ver cuánto tiempo puedes aguantar! —Ning Xiuyuan hizo una mueca burlesca, y su mirada era como la de un "Shura¹" del infierno, que provocaba escalofríos.

Ning Xiuyuan hizo una llamada telefónica y, al cabo de media hora, llamaron a la puerta de la habitación.

Al principio, cuando se resistió, Ning Xiuyuan había utilizado todo tipo de tácticas con él, haciéndole todo lo que pensaba en sus malos pensamientos y lo que no haría con otros.

Más tarde, Cen Li supo que era inútil resistirse y se esforzó por permanecer en silencio, pero seguía sin ser algo de su agrado. De hecho, probablemente ya sabía que esta era la razón por la que, desde un principio, Ning Xiuyuan lo había buscado el día de hoy.

Ning Xiuyuan se cubrió el cuerpo con una bata y fue a abrir la puerta, mientras que Cen Li finalmente pudo descansar un rato. Su cuerpo estaba cubierto de moretones oscuros y su ropa estaba esparcida al azar, causando esferas arrugadas en el suelo.

Para él, esta no era más que una gran tortura.

Cuando regresó, Ning Xiuyuan llevaba una elaborada caja de madera en la mano, y lo que contenía adentro hizo que Cen Li mostrara rastros de miedo en su rostro.

Con gran esfuerzo, deslizó su cuerpo hacia el lado más interno de la cama, pero aún así fue sujetado por el tobillo y regresado a su posición original.

Cen Li fue torturado hasta que se desmayo y cuando se despertó, la persona a su lado ya no estaba.

Las cortinas bloquearon la luz de la habitación, Cen Li abrió los ojos vacíos como si fuera una marioneta en una cuerda, y tardó mucho tiempo en moverse lentamente, sintiendo el dolor que seguía a la reestructuración de todo su cuerpo. Lo habían limpiado, y no había la familiar sensación pegajosa a la que estaba acostumbrado.

Entonces, Cen Li notó algo diferente.

Ning Xiuyuan había utilizado el jade caliente empapado en medicina para nutrir su cuerpo, y pensó que tal vez esa persona no quería deshacerse de él todavía, por lo que siempre estaba torturándolo y luego lo cuidaba bien.

Pero para Cen Li, esto era aún peor que la anterior humillación.

Su expresión cambió finalmente, sus dedos se apretaron gradualmente y, tras un momento, se aflojaron débilmente.

Así son los hechos, en la actualidad, no podía escapar; el estado de su madre había vuelto a empeorar, y el dinero que se gastaba en la quimioterapia y la medicación diaria estaban fuera del alcance de un estudiante pobre como él.