CAPITULO 14

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Narra _____

Desperté y quise levantarme pero un fuerte dolor de cabeza empezó a darme. Recordé lo de anoche y me arrepentí de tomar alcohol.

- A partir de hoy, no vuelvo a tomar de esa manera ¡AY MI CABEZA! - escuché que tocaron la puerta - ¡Adelante, pase! - Tomioka pasó
- Buenas tardes
- Buenas tardes...¡¿BUENAS TARDES?!
- Si, te quedaste dormida
- ¡Rayos! Pero hoy empezaba mi entrenamiento... ¡Auch, me duele!
- ¿Qué te duele?
- La cabeza
- Ah... Te traeré medicina para que se te pase
- Muchas gracias Tomioka-san
- Y por el entrenamiento, no te preocupes. El patrón me explicó todo. Además, dijo que hoy teníamos día libre y que mañana empezarían nuestras misiones, así como tú entrenamiento. Así que es mejor que descanses hoy.
- ¡Oh! que bueno que nos haya dejado el día libre
- Ya vuelvo
- Te espero - le sonreí

Esperé a que Tomioka me trajera la medicina, estaba muy arrepentida por lo que había pasado ayer. Nisiquiera me acordaba de mucho, solo me acuerdo de cuando fuí a la finca Mariposa junto con Tomioka, conversé con los demás hasta la competencia, a partir de ese punto, ya no me acuerdo más.

- Volví - Tomioka pasó a mi habitación - ten, con esto se te pasará - me dió la medicina
- Gracias - lo tomé. La medicina consistía en una infusión de un conjunto de hierbas medicinales - Tomioka-san...¿Hice algo malo o vergonzoso anoche?
- Ah...N'no - (¿Tartamudeo?)
- Dime la verdad
- Enserio, no pasó nada...
- Mm está bien, te creo - le sonreí. No estaba segura al cien por ciento, pero era Tomioka quien me lo decía, y el no miente que digamos, así que decidí creerle - Bueno voy a descansar
- Está bien, entonces me retiro. Nos vemos - levantó la mano como signo de adiós

Cuando se fue, yo me dispuse a dormir. Por el dolor de cabeza, me sentía muy cansada.

Narra Tomioka

Cuando _____ me preguntó cierta cosa. Decidí no decirle nada sobre el beso, porque no quería que se sintiera mal por aquello, o que se arrepienta por hacerlo. Simplemente, no quería escuchar que dijera que estaba arrepentida o que no le haya gustado.

Decidí mentirle. Yo soy un hombre que siempre dice la verdad, pero esta ocasión era la excepción. Fui egoísta, lo sé, pero también fue por su bien ¿no?. Es decir, si le hubiera dicho, sería incómodo, y más para ella.

Narra _____

Volví a despertar ya sintiéndome mucho mejor, gracias a la medicina me pude recuperar, pero me desperté en la noche. Y como no había comido nada en todo el día por el dolor que tuve y por estar durmiendo, obviamente me daría hambre. Así que me dirigí a la cocina.

Todas las luces estaban apagadas, me pareció raro ya que sulen apagarlas a partir de media noche. No le di importancia y prendí unas de las lámparas que alumbraban la cocina. Comencé a prepararme un plato de T/C/F {Tu comida favorita}. No me estaba dando cuenta del bullicio que hacía por lo que alguien se aprecio detrás mío.

- ¿Qué estás haciendo?
- ¡Ay! - salté del susto - ¡Me asustaste! - respiré hondo y me calmé - estoy cocinando
- ¿Si sabes que es de madrugada no? - dijo Tomioka
- Amm no...pero ahora que me lo dices, sí
- Te ayudo para que termines rápido, porque recuerda que mañana es tu entrenamiento
- ¡Cierto! Gracias

Juntos terminamos de preparar mi comida, me serví mi porción en un plato, igualmente Tomioka se sirvió un poco. No me sorprendió para nada que haya hecho aquello, porque talvez se le había provocado un poco.

Ambos estábamos comiendo en silencio. No era un silencio incómodo al contrario, era uno que transmitía tranquilidad y comodidad. Cuando terminamos, lavamos nuestros platos usados y demás trastes usados. Nos despedimos y nos dirigimos cada uno a nuestras habitaciones a seguir descansando.

En la mañana, ambos despertamos y nos cambiamos para continuar con mi nuevo entrenamiento. Salimos de nuestras habitaciones saludándonos los buenos días y yendo a prepararnos el desayuno en la cocina.

Disfrutamos un delicioso desayuno y ambos gozábamos del sabor que tenía y de la compañía del otro. Al terminar, limpiamos todo y nos dirigimos al patio para mí entrenamiento.

Comencé a practicar mis posturas, con algunas indicaciones que Tomioka me sugería.

- ¡Tienes una misión! ¡Hay demonios aproximándose en las afueras del pueblo Gokayama! ¡DEPRISA CAWWW! - se trataba del cuervo de Tomioka quien le mencionaba su nueva misión. Este solo asintió
- Sigue entrenando, vendré en unos días para ver tu avance
- Está bien, cuídate Tomioka-san - le sonreí, este se sonrojó y se fué

Observé que poco a poco se iba retirando Tomioka del Cuartel General. Luego, cuando mi vista ya no alcanzaba a verlo por la lejanía, me dispuse a seguir entrenando y mejorar mis habilidades como cazadora de demonios.

Si se preguntaban en dónde está mi cuervo, pues este se encuentra de "vacaciones" por el momento, ya que como ya saben, estoy aún en entrenamiento. Cuando reitere mis actividades e inicie mis misiones estará de vuelta al trabajo.

Pasaron un par de días y Tomioka regresó en la noche.

- ¡Bienvenido Tomioka-san! - me encontraba yo en la puerta de su finca
- Hola - mostró una pequeña sonrisa que casi ni se notaba, pero me hizo sonrojar un poco
- P'pasa - este pasó y se sentó en unos de los asientos que se encontraban en su sala
- Debes estar cansado ¿Por qué no descansas en tu habitación para que tengas más comodidad?
- No es necesario, estoy bien aquí
- ¿Enserio?
- Si, no te preocupes
- De acuerdo
- ¿Lograste conseguir algún avance?
- Si, logré perfeccionar aún más la quinta postura
- Bien, enséñame, quiero verlo
- Pero estás cansado, y ¿si mejor lo ves mañana?
- No, ahora
- Bueno...está bien - Nos dirigimos al patio y le mostré la quina postura
- Estuvo bien, mañana seguirás practicando aún más
- ¡Si!

Volvimos a entrar para ya dirigirnos cada uno a nuestras habitaciones y poder descansar a gusto.

ʀᴇᴠᴇɴɢᴇ (ᴛᴏᴍɪᴏᴋᴀ ɢɪʏᴜᴜ ʏ ᴛᴜ)Where stories live. Discover now