▶ 𝐃𝐨𝐧'𝐭 𝐬𝐭𝐨𝐩 𝐦𝐞 𝐧𝐨𝐰

10 4 1
                                    

(𝑄𝑢𝑒𝑒𝑛)

Actualidad...

Cuando una multitud se reúne en un espacio solo para ver un espectáculo es increíble, pero si el vocalista guarda silencio mientras la música sigue sonando y el público continua la letra, justo en ese momento la vida parece algo indescriptible y sublime, Jeff se había quitado los auriculares para escuchar al público, sus seguidores se sabían a la perfección la canción Everest, la balada que a él más le gustaba cantar, esa donde el bajo se lucia; los chicos sonreían y seguían tocando para que su público cantaran, la fuerza de voluntad del vocalista para no llorar ante ese momento se perdió, se secó los ojos rápido y retomo su lugar terminando la canción.

No era el primer concierto que daban, pero si el primer sold out y en un estadio tan grande, sudaban de una manera horrible, habían subido con atuendos espectaculares y el cabello arreglado, pero concluyeron con todo mojado, estaban visiblemente asquerosos, pero por dentro con el corazón llenó.

Para cerrar el concierto los cinco se tomaron de las manos, hicieron reverencia y se despidieron del público.

Apenas entraron a camerinos el personal los acorralo con toallas y bebidas, solo querían darse un baño, comer y dormir.

—¿Alguien tiene energía para una fiesta? —Pregunto Jareth con una sonrisa burlona, los demás lo miraron cansados.

—Que gracioso Jareth. —Jeremías le dio un golpe en el brazo.

—Mis chicos, lo hicieron genial. —Fred se acercó a ellos para felicitarlos con una sonrisa, el grupo estaba acomodado en los sillones tratando de recuperar fuerzas— Un concierto perfecto, a la gente le encanta el decorado del escenario y sus atuendos chicos, estaba tan preocupado por eso.

—¿Eso te preocupaba? —Susurro Tobías secándose el rostro con una toalla.

—Sí, de ustedes no, sé que son magníficos, si no confió en su talento, entonces estaríamos mal. En fin, dense un baño y descansen, mañana nos vamos a la siguiente parada.

Era su sueño cumplido y debían adaptarse, pero igual tenían derecho a sentirse acabados luego de los conciertos.

Los cinco tenían un pequeño ritual después de presentarse, se tomaban de las manos y cerraban los ojos, no era una oración, solo agradecían por las oportunidades, los triunfos y la felicidad, Jeff siempre tomaba la vocería y al final se daban un abrazo grupal, luego de eso se separaban para ir cada uno a su cuarto y dormir.

Jefferson y Jareth estaban tirados en la alfombra de la habitación del líder, tenían una cajetilla de cigarrillos para compartir y estaban fumando el segundo de la noche, eran las once y no tenían sueño, a veces hablaban y otras permanecían en silencio, uno le daba una calada al cigarro y lo pasaba al otro, engañaban al cuerpo y la mente con eso, decían que así fumaban menos.

—La otra semana estaremos en Brasil, ¿no te parece irreal eso? —Comento Jeff tomando su turno para fumar.

—Es uno de los países que más me llaman la atención.

—¿Por qué?

—No sé, cualquier lugar fuera de mi casa es perfecto. —Jareth sonrío mientras le arrebataba el cigarro a su amigo.

Jeff observo a su amigo de reojo, con los ojos cerrados se veía tranquilo, desde que lo conoció siempre tuvo mil preguntas que nunca fue capaz de formularle, había visto muchas facetas del él, pero ahora veía una más serena que a veces parecía no ser Jareth.

Iba a tomar su turno para el cigarro cuando la puerta sonó, los dos se mantuvieron en silencio esperando que la persona se fuera, pero no ocurrió, los golpes se intensificaron.

𝑵𝑨𝑺𝑬𝑬𝑴 (PAUSA)Where stories live. Discover now