𝐈𝐍𝐒𝐀𝐍𝐎 ✾【JiChen/ChenSung】✾

✾【5】✾

— Entonces discutieron— JeNo llegó a esa conclusión.

— Sí.

— Ni modo.

— ¿No crees que fue demasiado? — ChenLe se mordió los labios con temor.

Bueno, levantarse con un terrible dolor en el pecho no fue su plan, como tampoco lo fue darse cuenta que esa opresión fue producida por la ausencia de JiSung. Bastante desanimado bajó a la cocina descubriendo allí a un alfa terriblemente malo cocinando intentando preparar el desayuno. Así terminó contándole de la pelea con JaeMin.

— Nah, JaeMin se pasó, dijo cosas hirientes y te hizo menos por mí, lo cual es tonto teniendo en cuenta que me rechaza. Está siendo egoísta.

— Yo... Me siento mal, muy mal— Lloró desesperado— ¿Y si me odia? No quiero que me odie, es mi mejor amigo de toda la vida

— Lamento que tengas que saberlo de esta forma... Pero JaeMin puede llegar a ser una persona realmente cruel gracias a sus celos, ¿Entiendes? No quisiera que dejaran de ser amigos por mi culpa, ChenLe.

— No es tu culpa, son las cosas que él dice... Las cosas que yo he hecho.

— ¿Y qué has hecho? ¿Has hecho algo peor a lo que él hace?

— N-no...

— Sé que no quieres ensuciarte las manos y lo siento, pero en este juego a todos nos toca perder, porque ganar no sabemos.

— ¿Por qué me metiste en esto?

— Porque a este paso, sin mí, tú estarías en cama y muriendo. Al menos tener a un alfa pegado te distrae.

— Es cierto, perdóname... Sé que quieres que esté bien, que no enferme. — Sollozó tosiendo— Dios, me siento culpable.

— ¿Por estar con JiSung?

— S-sí... No debí dormir con él, fue un error.

— No lo fue, JaeMin hace cosas infames. Además, no tuvieron relaciones sexuales

— Me estoy convirtiendo en él por JiSung y no es correcto, ¿Sabes?

JeNo frunció el ceño mirando a ChenLe... Su amigo era jodidamente dulce y tierno, era consciente de que no deseaba ser peor que JaeMin y que le costaba no poder controlarse cuando se trataba del alto

El pobre omega temblaba e hiperventilaba, poniéndose el triple de pálido a lo que de por sí ya era. JeNo sabía que sus pérdidas de cordura se trataban del celo y la lejanía de su alma gemela. Mierda.

— Quédate quieto, trata de descansar, ¿Quieres?

— No, no puedo— Continuó llorando— Quiero a JiSung.

— ¿Voy por él?

— Ya estoy aquí— Oyó la voz del alfa detrás suyo— ¿Qué pasa, Lele?

Lele

— M-me siento mal— Respondió bajito

JiSung se arrodilló atrapando al menor antes de que colapsara en frío suelo y lo arrulló como a un niño pequeño, secándole las lágrimas con la manga de su suéter

— ¿Cómo es que no te sentí llegar? — JeNo cruzó los brazos— La seguridad de esta casa es una mierda.

— Lo es, no tenía seguro la puerta— Suspiró— Tendremos que arreglar eso.

ChenLe se aferró al pecho del pelinegro, escondiéndose en la curvatura del cuello de este alegrándose de aliviarse enseguida.

— Deberías subirlo a su habitación y dormirlo, no ha querido desayunar tampoco. Mis cereales con agua no son de su agrado, supongo.