Taehyung tiene un secreto, uno que absolutamente nadie sabe y el cual está dispuesto a llevarse a la tumba.
O así era hasta que conoció a sus supuestos amigos. ¿Supuestos? Sí, porque en realidad esos amigos son de su hermano gemelo, Taehwan, el cua...
Las navidades en Daegu están siendo una tortura para él. Escuchar a sus padres llorar por las noches cuando se levanta con ganas de beber agua le hace sentirse más culpable de lo que ya está.
Agradece estar mensajeándose o llamándose con sus amigos, o bueno, amigos de su hermano. Sobretodo con Jungkook. El azabache es tan lindo con él que ahora puede confirmar al fin que siente cosas por él.
Hace unos días cuando hablaron por videollamada antes de irse a dormir, escuchando la voz adormilada del contrario y como aún así no quería colgar porque le aseguró que no quería dejar de hablar con él, su corazón golpeó tan fuerte su pecho que creyó que se le iba a salir.
Le gusta Jeon Jungkook, uno de los mejores amigos de Taehwan y no sabe como actuar la próxima vez que le vaya a ver.
Ha estado pensando bastante en esa semana que lleva en Daegu y ha llegado a la conclusión de que en cuanto vuelva debe contarles la verdad a sus amigos. No puede continuar con esa mentira por más tiempo y aunque le echen de casa y le dejen de hablar, lo prefiere antes que seguir mintiéndoles y terminar sintiéndose peor de lo que ya se siente.
Hoy, sin embargo, es su cumpleaños. A medianoche recibió felicitaciones por parte de los chicos y sus padres le dieron sus regalos por la mañana. Parece un día normal y se siente triste.
Jungkook le preguntó días antes si quería que fuera a verle, pero con intención de no molestarle le dijo que no hacía falta.
Pero Jungkook sabe más de lo que parece y sobre las dos de la tarde aparece en la puerta de su casa con una bolsa en una mano y una porción de tarta en la otra. "Feliz cumpleaños" le dice con una gran sonrisa.
Su sorpresa es obvia y eso hace que el pelinegro ría felizmente. "¿Sorprendido?" le pregunta.
"Claramente" responde mientras intenta procesar que Jungkook está realmente en su casa. "Pasa, pasa."
"¿Estás solo?"
"Sí, mis padres fueron a casa de unos amigos" responde. "Creo que no es fácil verme hoy porque les recuerdo a mi hermano más que nunca."
La mirada de Jungkook se centra en las cenizas de Taehwan y toma las cosas de sus manos. "Puedes ir si quieres" dice.
"¿Seguro?"
"Mmhm, me paso rezando todos los días" sonríe con tristeza. "Estaré en la cocina mientras."
Le deja solo mientras observa la tarta con una pequeña sonrisa en sus labios y analiza la otra bolsa. ¿Será un regalo? Oh, Dios...
Coloca el dulce en un plato y coge un par de tenedores para que ambos puedan disfrutar comiéndolo. Escucha los pasos de Jungkook dirigirse hacia donde se encuentra y se gira. "Esto tiene muy buena pinta. No tenías que haber comprado nada, Kook."
"Es lo mínimo que podía hacer" le resta importancia y se sienta en la mesa junto a él. "Abre el regalo" le pide.
"La tarta era suficiente" se queja con suavidad.
De la bolsa saca una bola transparente con un osito dentro y con decorativos navideños. Automáticamente sonríe. "No tenías que haberme comprado nada, pero muchas gracias."
"No lo compré" niega. "Yo lo hice."
"¡Oh! Entonces me gusta mucho más" con valentía se acerca para abrazarle. Su plan era un abrazo rápido, pero Jungkook le aprieta contra su pecho y termina relajándose entre sus brazos. "Gracias por estar aquí."
"¿No te molesta que viniera sin avisar?"
Niega con la cabeza y se aleja ligeramente para mirarle a los ojos. "Estoy feliz de que lo hicieras."
Jungkook no puede soportar el estar tan cerca sin hacer nada, por lo que besa su mejilla y luego su nariz. "Eres tan lindo."
Las mejillas de Taehyung se colorean y eso le hace más gracia al pelinegro. "Vamos a c-comer la tarta" tartamudea.
...
HOLAAAA
¿Qué os ha parecido el capítulo?
Comentadme si hay algún error <3
No os olvidéis de votar, comentar y/o darle al botón para seguirme, GRACIAS 💜
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
