Me convertí en un príncipe demonio / Volumen 3: Tormenta

Capítulo 462: La tan esperada llegada

[Capital Real]

(Perspectiva Reina Evelin)

Cuando pensé que todo estaba dispuesto para dar el golpe final... me encuentro que todos mis soldados, en la Puerta Oeste, se están retirando.

-¿Por qué decidieron esto?

-Seguramente tenga que ver con la Reina Maciel... ella es la que está obsesionada con destruir la barrera de Viole (Matilde)

Todos nos quedamos observando la pantalla.

-La Directora Matilde tiene razón... desde aquí nosotros solo podemos ver, no sentir... así que, imagino que el poder que debe estar desprendiendo es demasiado grande (Tania)

-Debemos confiar que han tomado la mejor decisión (Ícaro)

Esto hace que mis nervios regresen, pero multiplicados... parece que he malinterpretado la situación y puede que ahora estemos en problemas.

-Suspiro-

-¿Creen que tengamos tiempo de enviar más apoyo?

También debería pensar en mandar a alguien a la Puerta Este... el enfrentamiento terminó, pero parece haber demasiados heridos... necesitan asistencia.

-...Pues... no sé si llegarán a tiempo... pero, el problema es ¿A quién enviamos? (Matilde)

Cierto, casi no tenemos más fuerzas armadas en la Capital.

-Ahora contamos con más aliados, estoy segura que los elfos oscuros y los espíritus corrompidos nos ayudarán (Tania)

Elfos oscuros, espíritus corrompidos... no estoy segura de haber escuchado de ellos antes... de todas maneras, no tenemos más opción.

-De acuerdo, pediremos su apoyo

-Solo tenemos que enviar a Leonte a que hable con ellos... él se lleva mucho... (Tania)

De pronto, Tania, se queda callada.

-¿...Dónde está Leonte...? (Tania)

-...

-... (Matilde)

Todos miramos a nuestro alrededor y nadie lo ve.

-¿Habrá ido al baño? (Matilde)

-Puede ser... pero, es extraño que se fuera sin avisar... (Tania)

Esto no me gusta nada.

-Emmmm... su majestad... (Ícaro)

-¿Qué sucede Ícaro?

-Creo que encontré a Leonte (Ícaro)

Ícaro señala a una de sus pantallas.

-¿Cómo que encontraste a...

Y cuando lo veo, mis ojos se abren completamente.

-¡¿Cómo mierda llegó ahí?!

[...]

(Perspectiva Príncipe Leonte)

-Ladrido- (Whitta)

La velocidad de Whitta solo va aumentando con cada kilómetro que recorremos, lo que es impresionante y causó que tuviera que llevar mi mano a mi rostro para evitar que el pañuelo salga volando.

-¡Solo siento pura adrenalina! (Laira)

(Si Laira ha conseguido llegar hasta aquí sujetada de la cola de Whitta... ese pañuelo ya no se volará) [Ema]