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–kenma-san, ¿Porque ya no puede mover sus brazos?– pregunto mina mientras coloreaba un libro de dibujos a su lado

–... Es por el medicamento, ¿Verdad kuroo?– el nombrado se sorprendió pero sólo pudo aceptar con su cabeza levemente– cuando todo pase volveremos a jugar y podré mover mis piernas así que podemos correr juntos

–oh, ya veo... ¡Ya quiero que kenma-san se recupere!– el peliteñido le sonrió, su sonrisa se desvaneció cuando la pequeña volvió a enfocar su mirada en el cuadernillo así que el le dió una pequeña mirada a su amigo que se encontraba con su computadora enfrente de el

–kuroo... ¿Haz dormido?

–ehm esto... Si, pero mis ojeras son por la luz de la computadora, no te preocupes

–¿seguro?

–¡Claro! Yo puedo hacerlo– retiró su mano se la computadora con delicadeza y la colocó sobre la mejilla de kenma y le dió un par de caricias en la zona, sus ojos estaban conectados y el sonrojo  de kuroo empezaba a aumentar, pero en ningún momento aparto la mirada o su vista de kenma

–¡Achú!– kenma desvío su mirada a la de la niña

–¿Que pasa mina?

–tengo mucho frío– comenzó a pasar sus manos por sus brazos en busca de que se calentará, kuroo se acercó rápidamente a ella y le coloco una mano en su frente

–tienes calentura, ire por bokuto no tardó...

Kenma veía a la pequeña temblar de el frío, no podía hacer nada, ni siquiera podía decirle algo ya que tenía tanto miedo que no podía formular algo.
Al tiempo llegó bokuto con la respiración agitada, su rostro era de miedo y a cierto modo estaba más pálido de lo común.

–¡¿Estás bien?! Vamos tenemos que irnos– cargó a la infante y con prisa se la llevó de allí volviendo a dejar a kuroo y kenma solos

–¿Porque bokuto cuida tanto a mina?

–no lo sabemos, el es alguien muy serio... Se dice que antes de que yo llegará el era muy feliz

–¿Y que paso?

–nadie sabe, dicen que los antiguos doctores sabían pero ellos ya se retiraron, el único que sabe es el jefe pero nunca dice nada así que es un misterio

–ya veo...

–hace un momento... Tu, bueno, cuando te acaricié, tu...¿Sentiste algo?

–no... No puedo sentir nada, cuando me ayudas a bañarme no puedo sentir el agua o el limpiador, ni siquiera puedo sentir la temperatura

–ya veo, creí que algo cambió...

–no te preocupes, al fin y al cabo es el efecto secundario ¿No es cierto?– pregunto con una sonrisa en su rostro

–claro, es el efecto...– abrió de nuevo su computadora dejando de poner atención en kenma, el menor quitó su sonrisa drásticamente y enfocó su mirada en la ventana

–va a nevar

–si

–¿Podemos salir cuando suceda?

–es algo riesgoso... Pero por ti lo haré

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–voy a dormir kuroo

–si, hasta mañana kenma

–hasta mañana

Pasaron 5 minutos, 5 minutos desde que kuroo no para de mirar a kenma, 5 minutos dónde comprobó que kenma no sentía nada y que si lo llegaba a tocar no se despertaría con nada.

Se acercó lentamente a su rostro, sus largas pestañas le hacían adorarlo más.

"Mi hijo merece algo mejor en sus últimos momentos" y tal vez tenía razón pero a kuroo no le importaron esas palabras dichas por la madre de kenma así que acercó más su rostro y choco sus labios.

Fue tan corto y triste, tal parecía un beso de despedida.

Kuroo se separó rápidamente, comenzó a llorar en silencio, quería gritar pero lastimosamente solo los gritos o su voz despertaría a kenma.

Salió de la habitación y pudo ver cómo bokuto estaba sentado en el frío piso de el pasillo con la cabeza baja y sus manos sobre su cabeza en forma de desesperación.
Se acercó y se sentó a un lado de el.

–mina...se enfermó... Y-yo prometí cuidarla, realmente quiero que ella viva... Solo, solo un poco más... ¿Es tanto pedir?

–lo mismo sigo, ¿Porque tiene que pasarnos ésto?

–¿Porque tenemos que verlos como mueren lentamente?

–... Le queda poco a kenma... Si llega a perder la movilidad de su cara será el fin, eso llevará a qué no podrá comer y entonces... E-el...

Bokuto abrazo a kuroo, este acto lo sorprendió mucho pero solo dejo que pasará el tiempo y comenzó a llorar más fuerte.

–mina... Es la hermana pequeña de mi ex novio... Kim akaashi, probablemente sea ella el único recuerdo cercano que tengo de el, por eso la cuidó tanto porque mi akaashi... Murió y si veo morir a mina será mi final

–realmente vivir apesta...

–tal vez para nosotros es así por lo que pasamos... Estar aquí es un infierno

–un infierno horrible

HASTA EL FINAL Where stories live. Discover now