Cap. 15

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Leo sin pensarlo dos veces tomó la mano de Kubo para regresar de nuevo al museo corriendo tomando de paso también a Baymax. En su mente recordaba el relato que Miguel le solía contar junto a el asiático y Marco cuando eran niños, ahí podrían encontrar la respuesta para ir al mundo de los muertos. Bajaron con cuidado por la ventana, temían de que en cualquier momento la policía se podría dar cuenta de lo que estaba pasando dentro del museo y llevarlos a la cárcel por hacer algo ilegal como esto, y lo que menos querían eran mas problemas con la prensa o chismes que podrían perjudicar a ambas familias. Lo bueno de todo esto era que no tenían una alarma, pero si algo parecido y las autoridades podrían llegar en cualquier momento y los atraparían en el acto si siguen ahí. 

- Baymax ve con Tía Cass y la abuela nosotros nos encargaremos de buscar a Hiro -

- Esta bien ¿no necesitaran ayuda? -

Preguntó el robot alzando un poco el tono de voz a las afueras de la ventana.  

- para nada amigo estaremos bien... o eso creo -

Murmuró Leo las últimas palabras para que el robot no lo escuchara. 

- y no les digas nada de donde estamos o donde estuvimos - agregó Kubo

El robot dió una respuesta afirmativa y se fué del lugar dejando a los dos chicos totalmente solos, su tiempo estaba contado, según el relato de Miguel sólo tenían hasta que amanezca después de eso no había marcha atrás. 

- ¿Recuerdas como es que cruzó Miguel? -

Pregunto Kubo mientras trataba de recordar esa aparte de la historia de como fué que su amigo llegó al mundo de los muertos y de esta manera confirmar sus sospechas de que Hiro se había ido como Miguel o si se fue como un cobarde

- Fue hace tantos años -

Leonardo tenía esa parte del relato muy borrosa y confusa, fué entonces que ambos levantaron su mirada  vieron la guitarra blanca de uno de los antepasados de Rivera a un costado de uno de los trajes. Kubo se acercó para romper el cristal que lo rodeaba con su codo y tomó la guitarra, si ya estaba roto una vitrina otra no haría la gran cosa.

Primero se sentó en el suelo Leo y en su regazo se sentó Kubo acomodando la guitarra en sus manos y eso provocó un sonrojo en las mejillas del primero, era la primera vez que se sentaban así pero así fue Miguel al otro lado ellos también harían lo mismo. 

- ¿S-Sabes tocar la guitarra? -

Preguntó muy nervioso el mexicano. 

-  No, pero vale la pena intentarlo -

Con sus manos temblorosas Leo las pasó por la cintura de Kubo abrazándolo y puso su cabeza en su hombro

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Con sus manos temblorosas Leo las pasó por la cintura de Kubo abrazándolo y puso su cabeza en su hombro. Kubo soltó un suspiro al sentir el tacto en su cintura pero no le reclamó nada y rasgó las cuerdas de la guitarra cerrando sus ojos en el proceso, Leo se mantuvo con los ojos bien abiertos y pudo ver por unos segundos como algunos pétalos se levantaban del suelo antes de una luz cegadora lo obligara a cerrarlos. Empezaron a escuchar algunas voces pero no reconocían ni una sola. "Llegaron dos nuevos" "son muy jóvenes" "¿Cómo? ¿Murieron juntos?" "¿Son pareja?" escuchaban como un eco que poco a poco se oía más y más cerca, hasta que recuperaron la conciencia, ambos habían aparecido inconscientes en el suelo en un mundo muy extraño, pero era exactamente como su mejor amigo lo había descrito en su historia. 

Kubo tomó la guitarra y Leo lo abrazó como si quisiera protegerlo de todas las calaveras andantes, el moreno por un momento vió como entre todos ellos hubo alguien que lo reconocería en cualquier parte por su sudadera roja salir de ese lugar por una puerta, pero como estaba más preocupado por su novio no lo tomó tanta importancia, tal vez sólo estaba alucinando. Las calaveras los tenían totalmente rodeados sin oportunidad de escapar y solo ser abrumados por el sin numero de preguntas que les estaban haciendo. 

Héctor había puesto un punto final a la "conversación" que tenía con Miguel y sólo se fué a la barra para pedir un trago sin mirar como el chico se iba detrás de su "esposo", tomó su copa pero todo el alboroto y la enorme curiosidad que tenían los esqueletos con los nuevos también llamó su atención, no podía hacer de nuevo su número porque le dio la palabra a su tataranieto de que no lo volvería a hacer... por lo menos el resto del día. 

- abran paso que los están incomodando -

Sabía perfectamente como se sentía esos momentos de "interrogatorio" de parte de todos, era muy incomodo y sobe todo los podrían asustar. No sabía quienes eran, pero se acercó para tomarlos de los brazos y llevárselos, Kubo y Leo no pudieron negarse a ir con el, pero ¿Y si les hacía daño? eso podía ser posible, pero su aspecto se les hacía extrañamente familiar y no sabían la razón. El asiático tuvo que arreglarse con una sola mano para poner la guitarra con ayuda de la correa de cuero en su espalda y así tener mas facilidad de moverse. Cuando llegaron al escondite secreto de Héctor el los soltó para ver a quienes salvó. 

- ya son libres chamacos -

Se dió vuelta y ahí fué cuando se dió cuenta que ambos tenían carne en los huesos, ellos no estaban muertos ¡Estaban con vida! pero en el mundo de los muertos... ay no, esto se volvía a repetir. 

- ¡E-están vivos! No otra vez -

Hizo una ligera mueca de molestia por otra vez estar entre la espada y la pared, primero el esposo de Miguel y ahora ellos, no era solo uno ahora son 3 los que debía regresar al mundo de los vivos. 

- bien, vengan conmigo -

Los ayudaría aunque Kubo y Leo tenían todavía muchas dudas y procesar todo lo que estaba pasando era muy complicado. 

- ¿Podemos confiar en él? -

Susurró Kubo, ellos no se movieron de donde los había dejado la calavera con chaleco. 

- no quería decir nada pero se me hace conocido -

Respondió Leo quien tardó un poco en darse cuenta quien era, pero se acercó para tomarlo del brazo y así llamar su atención. Héctor detuvo su paso y miró al chico aun con el ceño fruncido.

- Espere, ¿Usted es Héctor Rivera? -

- si el mismo -

Levantó su pecho con orgullo tomando de sus tirantes. 

- ¡Es el tatarabuelo de Miguel! -

Grito Kubo y corrió hasta acercarse a ellos tomando la correa en su mano. 

- esperen un segundo ¿Conocen a Miguel? -

Preguntó Héctor confundido, ¿Acaso eran fans de Miguel!

- él es... bueno fue nuestro amigo cuando estaba vivo -

Dijo Leo con un leve nudo en la garganta

Héctor por su lado los miraba de pies a cabeza ¿Amigos? ¿Acaso ellos eran el panadero y el asiático que tanto hablaba Miguel desde que llego a estas tierras?

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⏰ Última actualización: Jun 25, 2022 ⏰

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Mas allá de la muerte (Higuel)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora