My Universe.💫

Cristian D'Angelo💫

En la vieja Roma, Italia; se encontraba un apuesto joven de tez bronceada, cabello castaño y ojos café intermedio, que por el momento se encontraba lleno de incertidumbre.

Su amada novia, Dominique, se encontraba enferma los médicos aún la revisaban, Cristian junto con la familia De Luca esperaban pacientemente una respuesta del médico. La puerta finalmente se abrió y todos se pusieron de pie.

—¿Cómo está Dom?—pregunto Dian, la hermana menor de Dominique
—No tengo buenas noticia—dijo el médico
—¿Que le pasa a Dom?—pregunto Francesca De Luca, la madre de Dominique
—No tengo un diagnóstico exacto—dijo el médico— pero Dominique no va a sobrevivir

Hubo reacción es diferentes por un lado los padres de Dominique soltaron muchas lágrimas, Dian veía a un punto fijo y Cristian miraba al médico esperando que le dijera que no era cierto.

—Es una broma ¿Verdad?— pregunto Luciano De Luca
—Lo lamento señor De Luca, su hija morirá en tres días—dijo el médico
—¿Y podemos pasar a verla?—pregunto esperanzado Cristian
—Si joven D'Angelo—dijo el médico.

La familia De Luca acompaño al médico a la puerta de su casa, por lo tanto Cristian tomo valor y entro finalmente al cuarto de su amada Dominique.

Dominique era una joven de tez blanca, ojos azul celeste, cabello rubio y muy hermosa a los ojos de cualquiera que la viera, en ese momento la joven tenía la piel pálida, sus ojos no brillaban y su cabello estaba sin brillo

—Hola corazón—saludo sin fuerza Dominique.
—Hola princesa—saludo Cristian sentandose junto a ella
—¿Enserio solo vas a sentarte?—pregunto ella e hizo un puchero que le saco una sonrisa a Cristian— ven, acuéstate conmigo

El chico se recostó junto a la rubia, quien al tener cerca a su pareja se recostó en su pecho y el castaño la abrazo por la cintura.

—¿Cómo estás amor?—pregunto la rubia
—Estoy bien linda—dijo y le dió una sonrisa ladina
—Sabes que se cuando me mientes ¿Verdad?—dijo la rubia y le sonrió a su novio—, estarás bien cariño y se que mi familia también.
—No se de qué me...
—Se que solo tengo tres días—dijo la rubia con mucha tranquilidad
—Lo lamento tanto, amor—dijo Cristian y beso la cabeza de la rubia
—No importa—respondio ella y beso a su novio—. He pensado mucho que estos son mis últimos tres días así que me gustaría mucho que el segundo y tercer día lo pasarás conmigo
—Sabes que si hermosa—dijo el castaño y beso una vez más a la rubia.

Cristian se fue a su casa donde fue recibido por su madre, Alice D'Angelo, ella lo miro y supo de inmediato que algo no estaba bien.

—¿Cómo está Dom?—pregunto Alice a su hijo
—Tres días apartir de hoy—dijo Cristian y fue entonces que se desmoronó todo.

El joven se soltó a llorar ya que veía irse a su hermosa novia, la rubia y el castaño se conocían de toda la vida ya que los padres de ambos eran amigos. Francesco D'Angelo, antes de morir fue amigo de Luciano De Luca así que era obvio que Cristian y Dominique terminaran siendo amigos y poco a poco su amistad se convirtió en algo más.

Cuando tenían doce años Cristian se armó de valor y le pidió a Dominique ser novios, al inicio todos pensaban que era algo temporal pero al pasar los años él no la dejaba y ella tampoco quería dejarlo, así su relación comenzó a ser cada vez más bella, como toda pareja tenían muchas diferencias pero sabían resolverlo.

Cristian fue la primera vez de Dominique de todo y Dominique fue la primera vez de Cristian en todo, él jamás había sentido nada por nadie más y ahora ver a la chica que más ama morir poco a poco lo destruía.

—Lo lamento mucho hijo—dijo Alice a su único hijo
—Esta bien, ella está tranquila con eso—dijo Cristian secando sus lágrimas.
—¿Dominique sabe que va a morir?—pregunto impresionada Alice
—Si, hace un rato quise hacer de cuenta que no sabía nada de eso pero ella dijo que sabía que solo le quedan tres días—respondio Cristian.
—Todo va a estar bien hijo, se que vas a superarlo o por lo menos aprenderás a vivir con el dolor—intento consolar a su hijo—. Cris tal vez es un mal momento pero llegó la respuesta del colegio de Boston
—¿Llegó ya?—pregunto el joven impresionado.
—Si, ¿Quieres abrir la carta para saber que dice?—pregunto Alice
—No, por ahora no, solo quiero concentrarme en Dom antes de que la pierda—dijo el joven y soltó un suspiro.