Capitulo 4

8.6K 1.2K 244
                                    

Izana así se llamaba el pequeño que vivía en el orfanato junto a otros niños sin hogar

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Izana así se llamaba el pequeño que vivía en el orfanato junto a otros niños sin hogar.
  Saeko después de despertar salió rápidamente hacia el lugar, tenia que verlo, aunque no los uniera la sangre eran familia.

- Hace dos días éramos una familia de cuatro Sae, míranos ahora - Momo estaba ansiosa por conocer al menor y a su vez feliz, había otro integrante en su familia ,pero esperaba que fuese el último, no porque fuese malo tener otro niño, sino por su pareja que moriría de un ataque después de escuchar la noticia.

La pareja entró mientras miraban el lugar una mujer se les acercó, amablemente las guió hasta el jardín donde estaban todos los niños.

- Aquí están todos los niños, Izana se encuentra cerca de los árboles junto a Kakucho, por favor no sean muy invasivas con ellos... Kakucho entró recientemente luego de perder a sus padres. - se notaba lo apenada en la mujer.

- Es un momento delicado para las dos partes, no se preocupe sabemos como manejar la situación. - La rubia habló decidida, su mirada reflejaba seriedad ante el asunto.

- Mi dulce Momo~♡ - se sorprendió al notar un brazo en sus hombros - ¡Me gusta esa nueva cara tuya! - empezó a reír mientras caminaba hacia los pequeños.

Con sus poderosisimos 1.70 cm llamaba la atención de cada niño en el pequeño jardín, pero sus ojos se posaban en los dos que estaban bajo el árbol, dando ilusión a un cuadro pintoresco, refrescante e hilarante.

- ¿Quien eres? - el pequeño peliblanco miró de reojo a Saeko, su presencia no molestaba pero tampoco era muy cómoda que digamos.

- ¡Soy tu tía! - Sonrió mostrando los dientes mientras se apuntaba así misma.

Los ojos de Izana y Kakucho se iluminaron, raro fue la reacción del segundo pero podía sentir la calidez que desprendían, no adoptaría a un solo niño, sino a dos.

- ¿Te llevarás a Izana? - repentinamente hablo Kakucho mirando el suelo, se sentía cohibido.

- Si y también a ti Kakucho, noté que eres muy cercano a Izana, la familia siempre tiene que estar unida ¿no lo crees? -

Los cuatro entraron a la casa ,siendo bienvenidos por el abuelo y los hermanos sano, con gran felicidad Emma se reencontró con Izana

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Los cuatro entraron a la casa ,siendo bienvenidos por el abuelo y los hermanos sano, con gran felicidad Emma se reencontró con Izana.

- ¡Te extrañé! - grito Emma mientras abrazaba a Izana.

- No sabía donde estabas...- reprimió el menor.

- Descuiden ,nuestras mamás se encargarán de que estemos juntos para siempre- hablo Mikey.

- Abuelo, algo para decir - miro al Mayor de los Sano.

- Shinichiro por favor dime que no tengo otro nieto por ahí - contestó.

- Definitivamente no. -

- Esto ya parece pokémon - la pelinegra empezó a reír.

-¡Saeko! No llames así a los niños- hablo la joven.

- ¡Mikey yo te elijo! Busca el control remoto - ordeno la mayor mientras veía como el niño corría rápido a buscar dicho control.

Todos reían ante la escena, hasta que la pregunta que más quería evadir Saeko llegó.

- Esto... ¿porque no me parezco a mis padres? - Izana te IA miedo ante la respuesta.

- Enanos déjenme sola con Iza, vayan con el anciano y Momo a mostrarle la casa a Kakucho. - se veía preocupada la rubia ante su mención pero dio caso omiso.

Dejaron solos a los dos ,el.ambie te s devolvió tenso pero sabía que la verdad mientras más cerca este sería mejor para no causar desastres en el futuro.

- Es un poco complicado. -

- No importa, quiero la respuesta- empezaba a ponerse nervioso.

- Bueno... la verdad es que eres hijo de una mujer filipina, eres el hijo del esposo del padre de Emma- se sentía nerviosa al decirle eso a un niño tan pequeño.

- Entiendo...- se levantó pero antes de que diera un paso fue sujetado del brazo.

- Izana debes entender que te adopté a ti y a Kakucho, somos familia y eso no es cosa de quien tiene sangre de quien - el agarre se desvaneció mientras el pequeño se bajaba para recibir un fuerte abrazo.

- ¿Mamá?.

- Los cuidaré pase lo que pase.

- Si...

- Siempre y cuando no coman los pastelillos de chocolate que hace Momo para mí.

- Eh?

Intento de Tía || Tokyo Revengers Donde viven las historias. Descúbrelo ahora