capitulo 41

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Hola!, borre el capítulo 41 sin querer pensando que era el aviso y cuando me di cuenta ya no podía arreglar la cagada que hice TT.
Así que estén preparados para leer el capítulo otra vez pero con algunos detalles agregados!.

La mañana era tranquila, las calles estaban un poco desiertas

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La mañana era tranquila, las calles estaban un poco desiertas.
  Y como no esperarlo si era domingo por la mañana, una pequeña luz verde se veía para distinguir que era una farmacia con su tipica señal de "+ ".

La pelinegra entra cautelosamente pero se asustó al recibir el saludo del personal.

- Buenos días! ¿En qué puedo ayudarla? - pregunto la señora un poco curiosa por la vergüenza de la pelinegra.

- Buenos días.... este....- Saeko no podía hablar claramente- Una prueba de embarazo, por favor.- hablo un poco roja de vergüenza.

- Oh, si. De que tipo buscaba? Están las económicas que solo te muestran el resultado pero en cambio hay otras que te avisan las semanas de gestación.- sonrio al notar la cara de confusión de la contraria.

- El de las semanas de gestación está bien.- sonrió tranquila. - Sabe? En los años anteriores nunca me preocupe por esto! Mi ex pareja era una chica- suspiro cansada.

- Oh...vaya, debe ser algo nuevo de cierta forma, no?- pregunto la señora.

- La verdad que no. - sonrió- Bueno lo de la prueba de embarazo si pero el resto no, realmente es bueno conmigo. Además que me ayudó bastante cuando mi ex intento secuestrarme. - hablo como si fuese lo más normal.

- Oh.. espera, que?- la miro un poco confundida.

- ¡Mamá vamos! - grito Haruchiyo desde la puerta. - ¡Deja de contarle tu vida a los extraños! - hablo furioso.

- No es una extraña, es la señora de la farmacia - suspiro mirando al niño- nos vemos! Después le cuento si es que estoy ya sabe - le guiño un ojo- Luego hablamos, volvere!

Saeko se despedía de la señora mientras Haruchiyo la arrastraba hasta la salida.

- Realmente quien es el que cuida a quien? - hablo molesto el albino.

- Siempre serás mi bebé- abrazo al pequeño, bueno no tan pequeño , mientras se burlaba por como correspondia a su abrazo sin rechistar.

- Papá es un idiota - hablo mientras apoyaba su menton en el hombro de la pelinegra.- No quiero un hermanito.... yo quería ser el menor- suspiro cansado.

Aunque no era algo común, también si se prestaba mucha atención se podía ver cómo sus ojos estaban un poco hinchados y rojos, producto de llorar por las noches mientras hablaba con Muto sobre sus peores pesadillas con el posible engendro que aparecería.

- Bueno en realidad Emma es la menor... pero por defecto tu tienes ese lugar, porque siempre serás mi bebé Haru- sonrió mientras lo abrazaba más fuerte - Además que nunca te dejare, siempre serás mi lugar de confianza, porque creés que solo a ti y a Shinichiro les dije sobre esto? -  se alejo para verlo a los ojos.

- Porque el trío de idiotas de Izana, Mikey y Kaku harán un escándalo mientras que Emma va a comprar muchas cosas para el engen.... digo bebé, además que le contarán todo a Papá- hizo un gesto de obviedad ante sus palabras.

- Exacto. - carcajeo suavemente mientras empezaban a caminar rumbo a la casa.

**

El aire era tenso en la casa de la familia Sano, más especialmente en el baño de la habitación de Saeko y Nilo, dónde la mujer y sus hijos Haruchiyo y Shinichiro esperaban a su mamá salir con su prueba.

Y ahí estaba, se había abierto la puerta con un estruendo y la mirada agachada de la pelinegra dando a entender la peor pesadilla del albino y algo un poco obvio para el hijo mayor.

Su madre tendría un adefecio/ hijo!

- Como te sientes? - pregunto Shinichiro mientras su madre se sentaba al lado suyo.

- Normal no es como si me creciera la panza mágicamente después de esto. - sonrió mientras miraba la prueba.

- Cinco semanas..... Es demasiado - Haruchiyo leía tranquilamente mientras pensaba los pros y contras de la situación.

Y si sale igual de estúpido que Mikey o Izana?
No, el era estúpido pero por parte de padre, además Nilo y su mamá eran diferentes.
Y si era caprichosa como Emma?
Imposible, y en todo caso no lo superaría a el.
En su defecto sería cool como Shinichiro.
No, Que chiste. Recordó sus veinte rechazos.
Podría ser tranquilo como Kakucho.
No, Kakucho no es tranquilo, lo aparenta pero a veces se le  sale lo estúpido y las cuando está con Izana.

No quedaba de otra, tendría que cuidarlo el mismo para que sea un digno hermano de el.

- Que tanto piensas Enano?- Shinichiro miro como el albino estaba mirando la ventana por las de veinte minutos.

- Conoces a Lupe? - pregunto el albino.

- No - lo miro extrañado el pelinegro.

- La que te mira y te escupe - Bromeó mientras Saeko se reía como Hiena.

- Maldito enano no es tan fácil encontrar a tu tipo ideal sabes? - suspiro derrotado.

- Es eso o no sabes cómo conquistar - hablo desinteresado.

- Bueno, basta-  calmo las cosas Saeko. - Como le diremos a sus hermanos y a Nilo.

- Decir qué - hablaron los cuatro restantes, apareciendo mágicamente como si nada.

- felicidades seremos hermanos mayores! - Sonrió Shinichiro mientras se escuchaba un estruendo fuerte, era Nilo en la entrada de la casa desmayado.

- Oh, creo que lo tomo para bien!- Sonrió Haruchiyo.

-  Tan bien que se tomó una siesta para festejar - Suspiro Kakucho.

- No seas malo kaku! - Bufo Izana y Emma.

- Hay que ayudaroo la otra vez se quejo porque lo dejamos tirado en el jardín - hablo cansado Mikey.

- Oh bueno, avisen cuando se despierte! Voy a tomar una siesta - sonrió Saeko.

Intento de Tía || Tokyo Revengers Wo Geschichten leben. Entdecke jetzt