Capítulo veintisiete

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Jenna.
20 de junio, 2023.

Mis manos no dejan de temblar mientras observo el celular que esta en el centro de la mesa, hace horas que el oficial Gideon se fue con sus agentes. No nos dijeron si iban a actuar ahora, pero algo en mi me dice que lo iban a hacer.

—Cariño, deja de ver así el celular. —dice mi padre.

No le digo nada y sigo viendo fijamente el celular cuando frente a mí aparece un vaso de agua junto con una barra energética. Es lo único a lo que mi estomago ha decidido aceptar, hace unas semanas mi madre hizo unos deliciosos macarrones con salsa de tomate y apenas el olor llego a mi nariz vomite lo poco que había comido en el día.

—No entiendo como haces para comer esas horribles barritas. —dice Max frunciendo el ceño.

—Perdona que esto sea lo único que mi estomago acepte y no lo vomite. —ruedo los ojos.

Todos en la habitación se me quedan viendo fijamente mientras le doy un mordisco a la barrita, me la como lentamente y sigo sintiendo la mirada de todos sobre mí.

—¿Qué les pasa? —digo frunciendo el ceño.

Nadie me dice por unos segundos entonces la mamá de Richard se pare del sofá en donde está sentada y se acerca a mí a paso lento observándome determinadamente.

—¿Desde hace cuanto has tenido estos vómitos? —pregunta cuidadosamente.

—Desde hace unas semanas. —digo pensando— Empezaron cuando mamá hizo esos macarrones con salsa.

Eli asiente lentamente con la cabeza y se vuelve hacia su esposo que me observa fijamente al igual que todos, parece que Dereck entiendo y sale por la puerta no se dónde.

—Desde hace dos semanas –dice mi madre –Jenna.

Veo el terror en los ojos de ella y en los de Eli.

—No estarás —empieza mi mamá.

Y es cuando lo entiendo. El terror entra en mi cuerpo.

—No. No estoy embarazada. —le digo cortándola.

—¿Cómo estas segura? —dice mi papá en una esquina.

Voy a abrir la boca, pero el celular que esta en la mesa suena y antes de que lo pueda agarrar Max lo hace. Apenas lo atiende me acerco rápidamente hacia él, veo que asiente varias veces y veo como sus ojos se ponen brillosos.

Y temo lo peor.

—Era el oficial Gideon. —dice cuando cuelga la llamada— Atraparon a Taylor.

Un par de lagrimas empiezan a salir y siento como mi cuerpo se relaja por esa noticia, pero él no es quien me interesa.

—¿Y Richard? ¿Te dijo algo de Richard? —le digo con un nudo en la garganta.

Mi hermano me observa y poco a poco una sonrisa va apareciendo en su rostro.

—Está bien. Esta en el hospital, lo tienen en observación por los golpes que tiene su cuerpo, pero estará bien dentro de unas semanas.

El alivio invade cada parte de mi cuerpo y no puedo controlar las lagrimas que empiezan a brotar de mis ojos, mi hermano me atrae hacia su cuerpo para abrazarme. Los suspiros de alivios se escuchan detrás de mí, sabía que no me dejaría.

—Mi niño está bien. —Eli suspira de alivio.

Me separo de mi hermano para ir abrazar a la mujer más importante en la vida mi hombre, los brazos de Eli me rodean mientras las dos lloramos. Siempre he admirado la relación que tienen ellos dos, recuerdo que siempre era Eli la que apoyaba a Richard en sus travesuras en contra de Dereck.

Destinos Cruzados - [BORRADOR] ✔️Onde histórias criam vida. Descubra agora