SUPERMAN Y FLASH

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Golfo de México. Cerca de la costa de Yucatán

21:32 hrs

Superman y Flash llegaron a Yucatán en menos de diez minutos. Clark enfocó su visión telescópica y vio la zona hotelera del lugar, y ya había mucho daño hecho. Varios edificios fueron derribados, los incendios se extendieron por otros lugares y hubo algunos civiles que resultaron heridos a raíz de esta destrucción. También había un puñado de soldados y policías muertos y heridos en las calles, lo que indicaba que las fuerzas armadas no habían podido enfrentar lo que había hecho esto.

-¿Tu y yo contra el grandulón? – dijo Flash volteándolo a ver –

-No lo querría de otro modo Barry – contesto Clark, mostrándole el pulgar arriba –

Aceleraron y llegaron al lado oeste de la ciudad, donde había comenzado el desastre. Como decía el informe, otro gigante de cuatro patas estaba pasando creando destrucción. Para sorpresa de los héroes, esta criatura tenía un cuerpo de cristal y sus patas terminaban en garras largas.

Superman puso una mirada de feroz determinación y voló hacia la cabeza del gigante de cristal, donde lo golpeo y lo tiró hacia atrás. El monstruo volteo la cabeza para mirarlo, luego dejó escapar un rugido y avanzó pesadamente hacia él.

Flash se acerco por debajo y evadió fácilmente los golpes de esas terribles garras y luego comenzó a golpear el pecho de la criatura con sus puños con la velocidad de la luz. Igualmente, Clark activo su visión de calor y saco repetidos lasers de sus ojos. Los ataques de los héroes lo dañaron lo suficiente como para dejar agujeros, pero la criatura comenzó a curarse y luego golpeo a Clark. Superman sintió su espalda golpear contra un edificio de oficinas, pero se puso de pie completamente consciente y reanudó su batalla con la criatura de cristal. Esta vez, golpeó sus costillas minerales y logró romperlas con facilidad. El monstruo chilló de dolor, pero sus heridas fueron igualmente temporales, ya que sus costillas fracturadas pronto se regeneraron.

Lo que sucedió a continuación tomó a Superman y a Flash completamente por sorpresa: el gigante de cristal abrió sus fauces con colmillos y sopló un viento gélido que le recordó a Superman su propio aliento helado. Estaba helado al sentirlo, y los héroes salieron volando a varios metros de distancia. Podían sentir el frío acumulándose a su alrededor, sellándolos hasta que estuvieron prácticamente sepultados en rocas de hielo.

Pero el gigante de cristal claramente nunca había conocido la determinación de la gente de la Tierra, ya que una fracción de segundo después, Superman salió de su trampa helada y voló para encontrarse con la cara de la criatura. Flash hizo lo mismo, solo que el uso su vibración rápida y fuerte, que hizo que saliera disparado de su prisión de hielo, golpeando a la criatura una vez más, dejando más abolladuras. Clark vio la oportunidad y taco con su visión de calor a las partes donde Flash lo había dejado herido. La táctica funcionó mejor de lo que se esperaba, porque el gigante de cristal aulló y se retiró cuando su forma de cristal comenzó a brillar con un rojo brillante.

Sin embargo, el éxito no duró, ya que la criatura se apoderó de Superman y comenzó a golpearlo repetidamente contra otro edificio como si fuera suficiente para romperlo. Por supuesto, Superman era demasiado duro para ser lastimado con una fuerza extrema, pero el golpe fue bastante discordante. Finalmente, Flash se apareció por el lado derecho y de un fuerte impulso, empujó hacia atrás al gigante, logrando desequilibrarlo.

El gigante de cristal se sorprendió por completo con este nuevo ataque y recurrió para intentar pisotear a Flash contra el suelo. Levantó una pierna cristalina, pero el corredor escarlata la esquivó y luego usando su vibración, rompió la pierna del monstruo. Cuando el monstruo lo intentó por segunda vez, Superman atrapó su otra pata con una fuerza extrema y la partió en dos. El monstruo de cristal cayó al suelo y luego se levantó lentamente de nuevo.

-¡Ahora destruyamos a esta sabandija! – Flash le dijo a su compañero –

-Lo atacare por el centro... – Superman se puso en posición de vuelo –

Con eso, voló bajo las formaciones de costillas del gigante de cristal, y le atravesó fuertemente en el pecho.

En unos minutos, Superman había tomado al gigante de cristal de la cabeza y lo arrojó hacia el donde estaba el Sol con un fuerte empujón. Observó cómo la criatura se alejaba volando de Yucatán hasta que estuvo lejos de su línea de visión, luego se fue junto con Flash.

El Hombre que Llego de las EstrellasWhere stories live. Discover now