Subaru Natsuki, un chico hikikomori de 17 años cambio de realidad para llegar a un mundo muy distinto al que conoce. Un mundo con sus propias crisis y problemas que ofrecerá a Subaru la oportunidad de rehacer su vida solo que esta vez con los podere...
Luego de escapar exitosamente de la Sede de los caballeros de Lugunica y de aceptar la propuesta de la maid Ram, Subaru junto a Emilia se fueron en un carruaje conducido por la maid de cabello rosado. El carruaje los sacó de los barrios bajos pasando por las calles de la ciudad mientras Subaru miraba detenidamente las calles a la vez que Emilia lo miraba.
—Emilia: "¿Subaru?, ¿Estas bien?".
—Subaru: "Si Emilia, solo que he estado muy distraído con mis cosas".
—Emilia: "¿Que sucede Subaru?, ¿Acaso tiene que ver con la decisión de venir conmigo?".
—Subaru: "No, eso no Emilia. Solo que estoy preocupado por Felt. La chica que te robo la insignia ayer, esta en problemas y es mi culpa".
—Emilia: "Entiendo, te preocupa el bienestar de esa ladrona".
—Subaru: "En realidad me preocupo demasiado por una persona que apenas conocí, pero me sentiría mejor si supiera donde se encuentra. ¿Tal vez tu sabes algo Emilia?".
—Emilia: "Bueno... ayer cuando te quedaste inconsciente ella fue muy amable y me devolvió mi insignia pero Reinhardt paralizó su cuerpo alterando su prana y se la llevó".
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—Subaru: "Ya veo, supuse que Reinhardt la escoltaría a la sede para que sea interrogada por lo de Elsa, ¿Verdad?".
—Emilia: "Pienso lo mismo Subaru".
—Subaru: "Si tu patrocinador puede ayudarme a que ella y su abuelo estén a salvo haré lo que sea necesario. Por cierto, ¿A donde nos dirigimos Emilia?".
—Emilia: "En realidad pensé que seria mejor si cenamos en algún restaurante, debo suponer que no has comido nada durante el día".
—Subaru: "En realidad... " - el estomago de Subaru le exige comida.
—Subaru: "¡Es cierto!. ¡No he comido nada desde que llegue al reino!".
—Emilia: "¿Desde que llegaste al reino?, ¿Acaso eres un forastero Subaru?".
—Subaru: "Si lo soy, lamento si no te lo conté antes".
—Emilia: "Descuida Subaru, solo eso hace que mi interés por ti aumente".
—Subaru: "Espera, ¿Qué dijiste..?".
—Emilia: "Jejejeje...".
En ese momento el carruaje se detiene, Ram los invita a salir y a entrar a un restaurante. Subaru, con algunas lagrimas, aceptó la petición y termino pidiendo todo tipo de comida dejando perpleja a ambas chicas. Luego de una cena poco educada según Ram, los tres volvieron al carruaje para dirigirse a la mansión de Emilia.
Durante el camino Subaru y Emilia hablaron sobre sus gustos con la comida, cosas que les gustaba hacer y muchos otros temas. Subaru sentía mucha confianza al estar a lado de Emilia y la semi-elfa sentía que podía confiar en Subaru hasta que sin darse cuenta ya habían llegado a la mansión, pero de noche.
