3.- Juegos.

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El pequeño Jungkook se encoje en su lugar. Varios pares de ojos lo miran con curiosidad, solo uno de ellos le sonríe, y con fuerza se sujeta de la mano de su mayor, intentando esconderse detrás de él. Hoseok ríe enternecido. Sus amigos habían tenido la idea de jugar a las escondidas, pero cuando lo vieron llegar con el castañito, tres de ellos fruncieron el ceño con fastidio.

— ¿No eres muy pequeño para juntarte con nosotros?— la niña que recordaba con el nombre de Yeji pregunta, y Jungkook niega.

—Tengo 8— responde en voz baja, y Hoseok lo apoya asintiendo en dirección a los demás chicos.

—Eres menor que nosotros, podrías caerte y lastimarte, corremos muy rápido.

—Chicos, el estará bien. Solo jugaremos a las escondidas, ¿Por qué intentan asustarlo?— su hyung cuestiona, y no se escuchaba feliz.

—Porque dijiste que jugarías con nosotros, pero siempre estas con él.

El pelinegro no entendía porque tanto rechazo, era cierto que desde que el niño de ojos negros llego a casa, no se había despegado de él, queriendo siempre estar a su lado. Eso a Hoseok no le molestaba, Jungkook le parecía bastante adorable. Era silencioso cuando nadie se metía con su adorado oso de felpa, y aunque de vez en cuando preguntaba por su madre él se encargaba de cambiar el tema y evitar que las lágrimas del menor no mojaran la piel de sus mejillas. Era un niño tranquilo y amable también, entonces, ¿Por qué parecía no caerles bien a sus amigos-hermanos?

—Pero Jungkook también puede jugar. — Dice, y un puchero inconsciente se forma en su boca— ¿Por qué les molesta tanto?

—Hoseokie tiene razón. — el niño mayor habla, kook recuerda su nombre; Seokjin hyung — Kookie puede jugar con nosotros, no sean groseros mal educados o le diré a Yerim noona.

Un bufido proveniente de otro chico mayor se deja escuchar — Bien, pero si comienza a llorar como siempre, queda fuera.

—Sí, Namjoon, como digas. — Seokjin rodo los ojos.

Jungkook suelta una risita haciendo a Joon fruncir el ceño avergonzado.

—¡Entonces Seokjin oppa comienza a contar! — grita Yeji para seguido echarse a correr.

Los demás niños corren de igual forma en diferentes direcciones cada uno. Hoseok sujeta con fuerza la mano de su menor, riendo sonoramente mientras muy al fondo se escucha a Jin contar en voz alta.

Y Jungkook siente como su corazón late con fuerza y emoción.



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segundo capitulo de la semana listo uwu

gracias por leer!!

I Love You, Kookie - HopekookWhere stories live. Discover now