Eternamente Mía (Frey Stein)

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—Esto no te saldra, lo prometo – digo entre dientes y el sonríe

—¿Porque lo dices? – dice con burla

—La que busca encuentra – digo bajando mi mano hasta su pecho —Y sabes tanto como yo que no te funcionara

—Error pequeña – dice y acerca su boca hasta mi oído —Yo creo que funcionara a la perfección

Su aliento choca contra mi cuello y suspiro cerrando los ojos cuando siento su cuchillo bajar hasta los botones de mi camisa —Se quien eres

Su sonrisa se agranda y me mira a los ojos para luego sacar un botón de su lugar en mi camisa dejando ver un poco mi clavícula —¿Y quién crees que soy según tu?

Saca el segundo botón de su lugar y aprieto mis manos tratando de controlar mi respiración y no sonar asustada —El vecino de en frente...

Su sonrisa se desvanece y un mechon de cabello de su cabello cae desde la capucha dejándome ver su cabello negro, lo analizo y lo grabó en mi mente

—Que metida que eres – dice metiendo una pierna entre las mías y cuando saca el tercer botón deja ver mi sostén

—¡Mamá! – grito ahora sí asustada

Golpea mi cabeza contra el suelo haciendo que quede algo aturdida por el golpe y oigo una risita que se desvanece al oír los pasos apresurados de mi madre en las escaleras

—Nos volveremos a ver pequeñas

Siento su cuerpo levantarse y salir por la ventana haciendo un ruido extraño al caer al suelo y luego salir corriendo, me apoyo en mis hombros con la respiración agitada

—¿Que sucede? – dice mamá abriendo la puerta de la habitación

—Nada, nada, solo me caí – digo cerrando mi camisa rápidamente y me levanto del suelo —Me siento algo mareada...

—Ire por una pastilla – dice mamá saliendo de la habitación

Me siento en la cama y golpeteo mi cabeza con mis dedos tratando de bajar el dolor pero nada pasa, seguramente es por el golpe que me dió la figura

Suspiró y respiro para no caer en la cama, siento un pinchazo y después siento un líquido en ella, tocó la parte trasera de mi cabeza y después veo la sangre en mis dedos

No tardó en caer en la cama, inconsciente

Frey Stein

Gruñó tratando de calmarme pero el no me ayuda para nada

—¡Ya! – grita el hombre cuando es la cuarta vez que lo apuñaló en el miembro

Gruñó, es un hombre que no a hecho nada a nadie pero mi cuerpo me pide a gritos que lo mate, que saque la sangre de su cuerpo para luego escuchar sus gritos

Suspiro alejándome del cuerpo mientras que miro el filo de mi cuchillo, bañado de sangre y lo miro de nuevo al hombre que no hace más que rogar que pare

Sus piernas están cortadas y por Poco salidas de su cuerpo por las cortadas que le e dado hace unas horas, y sonrió cuando el estrés y la emoción de matar no se an ido de mi cuerpo

Me acerco nuevamente a él y clavo mi cuchillo en su pecho para luego arrastrarlo por todo su abdomen, abriendo su cuerpo, dejando ver sus órganos

El grito de dolor se hace presente en la habitación haciendo que sonría, clavo mi cuchillo en sus órganos una y otra vez hasta que no haya más que sangre y su respiración ya no se sienta

Miro sus ojos que siguen abiertos pero apagados, está muerto, me levanto del suelo se la habitación y paso una mano por mi cara sacando la sangre de ella. Mi ropa está bañada de su asquerosa sangre pero aún tengo que ver qué haré con el cuerpo

Le haré un lindo regalo a la familia

Cuando terminó mi trabajo voy a casa, obviamente primero limpio un poco la sangre y después cuando llegó a casa entro por el patio trasero y entro a mi habitación por la ventana para no ser visto

Me desnudo y me doy una ducha caliente para sacar la sangre de mi cuerpo, mi cabello de pega a mi cuerpo y después de unas horas e eliminado cualquier rastro de sangre, tomo mi ropa una ves que estoy vestido y la quemó

Suspiró entrando a la casa como si nada para ver a mi familia cenar en la mesa principal

—Frey, cena con nosotros – dice Mamá con una sonrisa y suspiro mirando a mis dos padres –Tu padre está aquí – me sonríe

Veo a mi padre vestido aún con el uniforme de policía sonreírme mientras que tiene los cubiertos en la mano, me siento a su lado y mamá me sirve comida pero lo que menod quiero hacer es comer

—¿Cómo les va con la escuela? – pregunta papá sonriendo mientras que toma la mano de mamá

—Tuvimos un inconveniente – murmura mamá ganándose que la mirada de papá cambie su mirada

—¿Que sucedió? – pregunta mirándonos a mi y a Heist que no hace más que mirar su plato

—Lo que pasa fue... – dice Valter pero Heist lo interrumpe

—Fue que Frey está jugando al gato y al ratón en una de las vecinas y una compañera de nuestra clase, mejor dicho, su clase – dice Heist mirándome mal

Las mirada recaen en mi haciendo que gruña y papá deja los cubiertos en la mesa para juntar sus manos y las apoya en sus codos para tenerlas a la altura de su boca

—¿Cómo se llama? – pregunta y lo miro

—T/n Jones – le respondo y el asiente para luego dar un golpe en la mesa

—Sabia que nos traería problemas – dice en gruñido

—¿Que quieres decir con eso Pierce? – pregunta mamá confundida

—Esa chica... Esa chica estaba en la escena del crimen – dice molesto – Ella sabía algo pero no dijo nada

Paso una mano por mis cabellos y oigo un suspiro de mamá para luego levantarse de la mesa y mirar a papá

—Tienes que arreglarlo, Mayne estará aquí en menos de una semana y sabes como es el – dice Mamá con tono molesta

—Papá ve un obstáculo y solo tiene una solución para eso – dice Heist con burla, pasa un dedo por su garganta