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Fredy Stein

Por ahora la familia de Jones no han venido preguntando por T/n y eso es bueno –Informa papá. Peerce

—Si nosotros no sabemos dónde está entonces no veo la preocupación – dice mamá cortando la carne

—Aun así tenemos que tener cuidado, en especial tu Heist – dice papá Valter apuntandolo con un tenedor

—No entendido aún el porque tengo que estar encerrado, sería menos sospechoso si saliera y viviera la vida – dice pasando una mano por su "Perfecto" cabello rubio

—No nos vamos a arriesgar– dice Kaia mirandonos a ambos – ustedes fueron los que la asustaron, no me sorprendería que ustedes la tengan

—Oye – dice Heist en forma de Advertencia – Yo no tengo a la mocosa encerrada en el sótano entiendes ¿Porque no vamos y lo comprobamos?

—No – digo mirándolos serio a todos —Estan peleando por una estupidez

—¿Tu sabes dónde está Frey? – pregunta mamá mirándome

En el sótano, sobre la cama, posiblemente dormida

—No mamá – digo mirándola —Si yo la tuviera no se los diría de todas formas

Me levanto de la mesa y salgo de la casa para ir a dar un paseo por la acera, veo la antigua habitación de T/n

Las noches que pase mirándola, las sonrisa que veía y las mirada de curiosidad que me daba solo aumentaban el deseo en mi cuerpo

Quería tenerla para mí, tenerla cerca, saber que ella está conmigo y demas

Me enferma la sola idea de quieran encontrar y llevársela de mi lado, todo está pasando como tiene que pasar y se que ella no tardará en entregarse a mi

No es que es necesario, yo la esperaría años si fuera posible. Admito que me dió ternura cuando me dijo que no sabía besar, claro que no sabe besar y eso me gusta. Quiero ser el primero en todo para ella

—Hola – dice una voz a mis espaldas

Me volteo y veo a una chica, algo alta y con una sonrisa en el rostro, su cabello rubio se mueve por el viento hasta que punto que le molesta

—Hola – digo mirándola serio

—Mira se que no es de mi incumbencia pero no pude evitar verte hablando con T/n Jones – dice y las alarmas de mi cabeza se prenden pero no lo demuestro

—¿Que tiene eso? – pregunto con las manos en los bolsillos

—Que ella está desaparecida – dice con obviedad

—¿Que estás insinuando? – pregunto acercándome a ella

—Que tu la mataste – dice dando un paso atrás con temor

Sonrío y niego con la cabeza para luego separarme de ella y darme la vuelta e irme

Los rayos del sol comienzan a hacerse presentes y yo no hago más que bajar las escaleras de mi casa y bajar al sótano, no e pensando en nada más que mirar sus hermosos ojos

T/n Jones

Después de dormir en una cama sumamente incómoda, suspiré cuando ya no pude dormir, no había ventanas como para ver qué hora o ver si ya era de día

El sonido de la puerta principal abriéndose llama mi atención haciendo que mire y mis ojos se abran cuando veo a Frey cruzado de brazos apoyado en la pared

—¿Qué hora es? – pregunto tallandome los ojos

—Las ocho de la mañana, ¿Que haces despierta?

—La cama no es muy cómoda – digo rascándome de la cabeza

El sonríe y se acerca a mi para sentarse en la cama y mirarme —La cambiaré

—Gracias – sonrió y el me devuelve la sonrisa

—¿Tienes hambre? – pregunta y asiento —Solo promete no lanzarme la comida otra vez

Sonrío y asiento, el sale de la habitación y para cuando vuelve yo ya estoy vestida mientras que miro en la habitación hasta encontrar una puerta, al abrirla mientras que el me mira

—No ví está habitación antes arriba – digo mirándolo mientras que miro el baño —Osea, sabría dónde estoy si..

—No estás arriba, no estás en la casa – dice cruzándose de brazos para luego acercarse y cerrar la puerta del baño —Estas lejos del pueblo

—¿Porqué? – pregunto mirando sus movimientos mientras que prepara el té en la bandeja

—¿Creías que tendría en mi habitación atada a la pared? – pregunta con burla

—No – digo rodeando los ojos

—Eres buena para abrir ventanas por lo cual, por eso no ves ninguna aquí – explica sentándose en el suelo – siéntate

—Quiero estar parada – digo apoyándome en la pared

—Que te sientes, es una orden – dice En demando y yo obedezco sentandome en la cama. En frente de el

—¿Cómo has dormido? – pregunto mirándolo para romper el silencio

—No dormí – dice mirándome y aún me sorprendió de la profundidad de sus ojos azules—No contigo aquí

—¿Yo tengo la culpa?

—No pero no se en que momento puedes hacer algo y escapar – dice dando un sorbo

—No escaparé – digo sin mirarlo y poniendo la visita en la taza en mis manos

—¿Entonces si te dejo la puerta abierta no escaparas? - pregunta con obviedad y una sonrisa

—No – digo de igual manera

—¿Porque? – pregunta mirándome con atención

—Porque se que si escapó, tú me seguirás y no se me da bien educación física– digo sonriendo mientras que llevo la taza a mis labios

El sonrie y da un sorbo de su té mientras que me mira, admito que su mirada azulada penetrante hace que me sienta incomoda pero una parte de mi cuerpo se siente agusta con ella

Suspiró cuando se levanta del suelo para dejar la taza en el pequeño mueble al lado de la cama donde hay nada más que cosas de curación, vendas y demás

El se acerca a mi y se sienta a mi lado para mirarme fijamente y luego hablar —Yo-

—¿Porque no estás con tu familia? – pregunto mirándolo y el solo niega al saber que lo interrumpí

—No soy un hombre de familia con ellos – dice mirando mis piernas —Levantante la camisa

Lo miro rápidamente algo asustada—¿Que?

—Que la levantes, así puedo ver la herida– dice y me relajo un poco

Abro mi camisa y me la saco para quedar en sostén —Acuestate

Eternamente Mía (Frey Stein) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora