One Shots de Capitán Tsubasa/Super Campeones.

#El sacrificio de un hermano: No podré jugar el mundial juvenil.

(Aclaración: Este One-shot es la continuación de "Primer encuentro y segundas oportunidades").

Pareja: Taro y Wendy.

Narrador omnisciente:

-Como mencionó anteriormente, Taro había llamado a su madre, Yumiko, para pedirle que se reunieran. Aunque sorprendida y encantada, ella aceptó sin pensarlo. Ahora, caminando juntos hacia la casa de la familia Yamaoka, Taro y Wendy se mantenían en una atmósfera de nervios y emoción:

Wendy: Vida, ¿Estás seguro de que está bien que vaya yo? Sé que es una reunión familiar, no quiero parecer intrusa…-Su voz tembló ligeramente, denotando inseguridad.

Taro: Princesa, ya te lo he dicho-Su tono era firme y reconfortante-Sí, estás más que bienvenida. Además, tú sabes tan bien como yo que eres parte de mi familia desde hace mucho. Me lo prometiste-Apretó su mano con suavidad, buscando transmitirle tranquilidad.

Wendy: Es cierto, me lo prometí. Voy a estar bien. Gracias por darme esta oportunidad-Respondió, apretando su agarre con determinación, tratando de calmar sus propias dudas.

-Continuaron caminando, las risas y las bromas entre ellos suavizaban la tensión. Finalmente, llegaron a la casa de los Yamaoka. Taro tocó el timbre y, en pocos segundos, una mujer les abrió la puerta con una sonrisa cálida:

Yumiko: ¡Hola, chicos! ¿Cómo están? Pasen, por favor-Les dio una acogedora bienvenida, su voz llena de afecto.

Taro: Hola, mamá. Perdona el retraso-Sonrió suavemente al ver a su madre, siempre tan llena de energía.

Wendy: Mucho gusto, Sra. Yamaoka-Saludó con timidez, pero también con sinceridad, sus ojos reflejando algo de nerviosismo.

Yumiko: No se preocupen, justo a tiempo-Respondió con una sonrisa abierta, guiándolos hacia el interior-¡Yoshiko, ven aquí!-Llamó a su hija mientras atravesaban la entrada.

-Dentro de la casa, la calidez del hogar se sentía en el aire. Se acomodaron en el sillón, donde una taza de café los esperaba:

Wendy: Muchas gracias por todo, Sra. Yamaoka-Tomó la taza con ambas manos, sintiéndose agradecida y al mismo tiempo un poco nerviosa. Su sonrisa era suave, pero sincera.

Yumiko: No es nada, querida-La observó con una mirada atenta, como si algo le resultara familiar-Perdón, ¿Me recuerdas de algún lado?-Su tono fue curioso, sin intenciones de incomodar.

Wendy: Oh, qué tonta soy…Soy Wendy, hija de María y Darío Torres-Se sonrojó levemente, dándose cuenta de su olvido.

Yumiko: ¡Claro! ¡Has crecido tanto desde la última vez que nos vimos! Eres idéntica a tu madre en su juventud. Qué alegría verte tan bien.-Exclamó, sorprendida al reconocerla.

Wendy: Sí, soy su hija-Sonrió, tocando ligeramente su mejilla, agradecida por la calidez en las palabras de Yumiko.

-En ese instante, Yoshiko y su esposo entraron a la sala:

Yoshiko: ¡Taro, viniste!-Exclamó corriendo hacia su hermano, abrazándolo con entusiasmo.

Sr. Yamaoka: Hola, chicos-Saludó, su sonrisa tan amigable como siempre.

Taro/Wendy: Hola, Yoshiko, Sr. Yamaoka.-Ambos respondieron al unísono, felices de ver a la familia.

Yoshiko: Qué bueno que viniste. ¿Y tú quién eres?-Observó a Wendy con curiosidad-¡Ah, ya sé! Eres la chica que me ayudó cuando fui a ver a Taro en el tricampeonato de secundaria, ¿Verdad?-Exclamó recordando algo de su encuentro anterior.