𝐒𝐎𝐘 𝐁𝐄𝐓𝐀 | 𝐇𝐞𝐫𝐦𝐚𝐧𝐨𝐬 𝐇𝐚𝐢𝐭𝐚𝐧𝐢

26

La puerta fue abierta y en medio de ella apareció Rindou no se veía nada bien.

-¿Rindou?-

Él dio unos pasos hacía mi, su cuerpo tambaleaba en cada paso que daba ante lo débil que estaba, finalmente su cuerpo cayó afortunadamente pude sostenerlo en mis brazos.

-Por favor no me odies- susurro.

-¿Odiarte? Yo......aunque lo intenté no puedo llegar hacer eso-

Rindou levanto su cara quedando a centímetros de mi rostro, podía ver tan detalladamente sus ojos color violeta, esos ojos con lo que alguna vez brillaban con intensidad ahora solo muestran una profunda tristeza.

Debieron sufrir mucho ¿Verdad? Yo también lo hice, si tan solo las cosas hubieran sido diferente.

Toque ligeramente su rostro sonrojado, estaba ardiendo en fiebre.

Todo indicaba que su rut había llegado, lo único que no le hacia perder completamente el control era el olor de sus hijos que estaban profundamente dormidos.

-Dime Rindou ¿A que has venido en ese estado?- acaricie gentilmente su mejilla mientras miraba sus ojos -Ve con tu omega, ella te espera-

-No......no, por favor si ella te dijo algo no le crees.......yo.......- Rindou no sabía cómo expresarse, buscaba las palabras adecuadas pero no las encontraba.

-Esta bien, yo no te estoy reclamando, no tienes que explicarme nada ¿Después de todo alguna vez llegamos hacer algo?-

-Claro que si, yo te considere mi novia al igual que Ran-

-Nunca me pediste eso formalmente, habían días en que me mataba mentalmente debatiendo si era tu amiga o una simple conocida, si realmente me consideraban su "novia" me hubiera gustado saberlo- me separe caminando lejos de él -Después de todo eso ya no importa ahora, Rindou ve con tu omega la necesitas a ella no a mí, soy beta, no soy suficiente para llegar a complacerte-

-¡No! Te equivocas no vine a eso, yo.......yo solo quiero permanecer a tu lado, eres mi lugar seguro, por favor no me alejes-

-Rindou yo no soy suficiente- no soy suficiente....era una dura verdad que tenía que aceptar.

-¡Eres más que suficiente!- Rindou alzó la voz haciendo que levante mi mira

El alfa cayó de rodillas a mi, mientras se aferraba a mis piernas.

-¿Rindou, que haces? Parate- intente levantar a Rindou, pero él se aferraba más a mis piernas.

-Perdón- susurro.

Rindou......-

-Perdóname por todo el daño que Ran y yo te causamos, a la única persona que quiero en mi vida eres tú y mis hijos. Es verdad, ella es mi destinada pero no la amo, a la única mujer que amaría por toda mi vida eres tú, te amo con la misma intensidad de cuándo era un adolescente, nunca deje de amarte-

-Basta Rindou, parate-

-Si te dejamos fue por que no teníamos otra opción, no queríamos que salgas lastima, Ran y yo no soportarimos que algo te pasará, creeme que de verdad hice lo imposible por volverte a ver, pero cada vez que intentaba volver a ti me detenía, el miedo de que algo malo te pasará por acercarme a ti se apoderaba de mi y retrocedía- apesar que Rindou estaba ardiendo en fiebre por su rut hablaba con tanta desesperación.

-No te hagas esto, párate- dije arrodillandome quedando a la misma altura que él, agarre su barbilla haciendo que me mirará a los ojos -Ahora no es momento de hablar sobre eso-