Devuélveme Mi Don [ChanSoo]

Capítulo 3

Chanyeol descubrió su poder en primer grado, todos los cadetes estaban en el gran salon para la hora del almuerzo, había un bullicio descomunal, como es propio de los más jóvenes. De repente, todos se callaron y él comenzó a cambiar. Se estaba convirtiendo en alguien muy alto y fuerte, todos creímos que sería una especie de Heracles, con super fuerza y su belleza divina. Excepto por su cabello negro. Aunque a Seulgi le encantaba ese tono.

Al contrario de lo que se pensaría, nadie retrocedió con miedo, sino que se acercaban con asombro para ver todo desde primera fila. Aunque existe una firme creencia de que es un don que se da por herencia, los cambiantes son relativamente pocos, según los registros, en este siglo, se han visto 30 aproximadamente.  Cuando él se estaba volviendo demasiado grande y su ropa comenzaba a romperse, los mayores y generales se lo llevaron del ojo público para encontrar una solución.

Los dones son muy útiles pero inestables. Debes entrenarlos día a día en la academia, antes de que un don mal usado o entrenado causara un desastre como ya se ha visto. Flame, en el año 780, incendió la anterior locación de la academia, acabando con la vida de jóvenes valientes y con su propia existencia. Caroline, cuyo poder era controlar el espacio, comprimió hasta pulgadas, un centro de comercio y a todos quienes se encontraban a 2 kilómetros a la redonda. Y actualmente, la amenaza más grande que ha existido, Tornado, que es capaz de causar devastadores desastres naturales. Ella está encerrada en una cárcel de máxima seguridad, al cuidado de personas que son capaces de inhibir su don. Todos dicen que es la persona más poderosa que se ha conocido.

Sinceramente, creí que algo parecido le sucedería a Chanyeol, que su don sería tan problemático que no lo volvería a ver. Por desgracia, al día siguiente, apareció como si nada. Alardeando de su super especial poder.

ㅡTenía que ser alguien tan estupendo como yo ㅡdecía como si le faltara algo más para ser insoportable.

La primera impresión que tuve de Chanyeol fue "idiota". Me empujó en el pasillo, cuando me dirigía hacia el edificio A para mi primera clase. Estaba demasiado emocionado como para dejarme apabullar. Sin embargo, continuó pasando una y otra y otra vez. Me interrumpía en las clases teóricas y si no podía, me ponía el pie para que cayera en las aulas de entrenamiento. No solo era más fuerte y más alto que yo, también robaba mis ideas y me hacía quedar como un tonto. Hasta Seulgi que está endiosada con él, podía ver que me trataba de la patada.

ㅡ¿Le hiciste algo? ㅡme preguntó una vez mientras buscábamos un libro antiguo en la biblioteca. Dejé que mis ojos le respondieran. ¿Cómo podía yo... un simple mortal... lastimar su ego tamaño edificio? Y como si lo hubiésemos invocado, apareció por ahí.

ㅡKyungsoo ㅡme dice creando contacto visual y sosteniendo una sonrisa endemoniadaㅡ. Señorita ㅡhasta su saludo me daba náuseas. Hizo una pequeña venia y se retiró hacia una mesa. No sabía que él estudiaba alguna vez.

Hace tiempo que el hostigamiento físico, cesó. Después de todo, ahora somos cadetes de tercera, es decir, de tercer año. Debemos ser más astutos, más correctos, más ejemplares. Mi teoría es que desea una reputación de honor. Un "héroe" no puede abusar de los más débiles, de sujetos como yo... que jamás han demostrado su don. Solo se limitaba a mirarme de vez en cuando y yo entendía a la perfección, "podría estar golpeándote ahora".

ㅡSé que estás ahí ㅡdice sin inmutarse, ni darse el trabajo de asegurarse que estaba encerradoㅡ. Huyes de la presentación, ¿verdad? Yo también lo haría si no tuviera un don.

ㅡ¡Sí tengo un don! ㅡgrité de vuelta y enseguida me llevé las manos a la boca. Si Chanyeol aún tenía alguna duda sobre si era yo, ya se la había disipado.

ㅡQué patético.

Abrí la puerta del cubículo y lo divisé en segundos, tenía una sonrisa de satisfacción provocada por mi desdicha. Dentro de mí se originó una furia sin control que me suplicaba que al menos, me atreviera a tirarle uno de eso dientes tan blancos que tiene. Dirigí mi puño con gran velocidad hacia su cara, pero antes de poder tocarlo, él comenzó a cambiar en algo más, creí que quería burlarse de mí, otra vez, pero esta transformación se parecía más a aquella vez... cuando él descubrió su don. Tan caótica como la primera vez. Los hombros de Chanyeol comenzaron a temblar con violencia, su piel cambiaba de color de manera aleatoria, desde morado hasta naranja y yo me estremecí del terror. Él quiso sostenerse en el lavabo, pero se desvaneció.