Devuélveme Mi Don [ChanSoo]

Capítulo 9

La casa de Chanyeol era muy bella. El techo tenía una estructura de dos aguas y también un gran y amplio jardín. Él abrió la puerta y dejó su mochila en una pequeña mesa de la sala. Se dirigió a la cocina y preferí seguirlo antes que sentarme en esa casa bonita pero solitaria. Su cocina era bastante moderna, de color gris, como toda la casa, tenía una barra en vez de una mesa. Él estaba sacando un par de trastos.

ㅡ¿Tienes hambre?

ㅡCielos, sí.

Me pidió escoger entre unas sincronizadas de pimiento morrón con quesillo y chorizo o pasta con pollo, espinaca y brócoli, o alguna otra cosa con muchas verduras. ¿Estaba obsesionado con las verduras? Él alegó que las espinacas sufren de una discriminación terrible.
"Son buenas para tu cuerpo y acompañan muy bien tus comidas, pero por alguna razón que desconozco todos las odian. Por Dios, Popeye se las comía sin nada más".
Yo me reí un poco y después probamos la pasta. Reconocí que estaba en un error; aunque no sonaba ni se veía demasiado apetitoso, sí que lo era. No me contuve y pedí dos porciones.

ㅡ¿No qué no? ㅡme dice recogiendo todo los platos y comenzando a lavarlos. Le pido que me deje hacerlo por él, pero responde inmediatamenteㅡ. Descuida. Cuando vaya a tu casa, será tu turno.

¿Planeaba ir a mi casa? Chanyeol estaba dispuesto a pasar todo el tiempo posible a mi lado solo para restaurar su don. ¿Había hecho lo correcto al motivarlo para recuperar lo que había perdido? Ahora ya era muy tarde para arrepentimientos, tendría que ayudarle pase, lo que pase. Me senté contemplando las atenciones que tenía hasta que escuchamos que la puerta se abría. Se detuvo de forma abrupta y rápidamente corrió hasta el corredor.

ㅡPárate firme ㅡme dijo sin siquiera voltear a verme. Yo lo imité sin preguntar. Un hombre alto entró por la puerta. Su cabello presentaba algunas canas, pero en general se miraba bien conservado. Intuí que debía ser el padre de Chanyeolㅡ. Él es Kyungsoo, es un cadete de mi grado ㅡañadió con voz neutra. Jamás pensé que lo vería demostrando gran respeto hacia alguien más que no fuera algún mayor o general.

ㅡ¿Harán sus deberes? ㅡpreguntó el hombre dirigiéndome una mirada fugaz. Sentí que me había escaneado totalmente y me sentí un poco indefenso.

ㅡSí, señor ㅡresponde mirando hacia la pared en lugar de ver los ojos de su padre.

ㅡBien. No hagan mucho ruido ㅡañade y comienza a caminar hacia la cocinaㅡ. ¿Hay suficiente comida? ¿Quieres que vaya a comprar? ㅡle pregunta a medio pasillo. No se ha volteado, solo está parado como un fantasma.

ㅡNo falta nada, señor ㅡel padre de Chanyeol avanza sin más. Él me ve un poco apenado, aunque yo quería decirle que no pasaba nada. No tenía que explicarme nada si no quería.

Apartir de ese momento, no volví a ver al señor Park. Nosotros subimos a su habitación, llevé mi mochila y la dejé tirada en el suelo. En cuanto observé bien su alcoba, me sentí un verdadero desorden en todos los aspectos. Mi recámara jamás se vería como la de él. Tenía 3 diplomas enmarcados en la pared, un estante para los libros, un mueble lleno de figuras coleccionables perfectamente alineadas, una cama hecha, con almohadas y sábanas de un mismo color, un escritorio limpio y lleno de la papelería necesaria. En el buró junto a su cama se encontraba una pequeña lámpara de lectura y una fotografía. En ella había una mujer de belleza descomunal y estaba junto a alguien que me costó trabajo reconocer.

Chanyeol tenía una sonrisa amplia y sincera. Una que dejaba relucir una fila de dientes blancos y brillantes. No había ninguna arruga en su frente y tampoco podía sentir el aura de superioridad y fortaleza que siempre le acompaña. Solo era un chico que se veía feliz.

Había distinguido en un solo segundo las diferencias entre la relación con su padre y madre.

ㅡEs muy hermosa ㅡquise mencionar. Él ya se encontraba quitándose los zapatos del uniforme.

ㅡEra ㅡdice a secas. No pude interpretar con qué sentimiento había expresado aquello, tan sólo comencé a imaginarme a alguien que había crecido sin ella. Lo siento, quise expresar, no quise, no quiero incomodarte, pero no hizo falta pues agregó las siguientes palabras.ㅡ Y sí que lo era. ¿De dónde crees que heredé esta galanura?

De nuevo me regresaron las ganas de lanzarle unas almohadas y desordenar su perfecta habitación.

Chanyeol me mostró toda su colección de figuras, me explicó porqué algunas eran invaluables y porqué otras tenían un valor sentimental. "Esta fue la primer figura de la guerrera Xao que tuve" decía con gran ilusión. Se la había dado su madre y mientras mencionaba cualquier cosa alusiva a ella, podía ver y sentir su felicidad, pero también podía ver su añoranza. No le era posible separar esos dos sentimientos porque nunca podría recordarla sin extrañarla.

Después me preguntó si leía, quise decir la verdad y expresar que no era demasiado fanático de la lectura, sin embargo, me jaló hacia su estante sin esperar una respuesta. "Estos son mis verdaderos tesoros" mencionó con un toque de presunción, como esperaba de él. Me prestó el que era su favorito y me pidió que lo cuidara como si de mi propia vida se tratara. Cuando lo cogí para leer sobre las almohadas me di cuenta que tenía marcas, algunas líneas estaban subrayadas, tenía los significados de palabras extrañas como apearse, trémula, y atribulado. Pude observar otros cuantos libros en el mueble de las figuras y le pregunté porqué se encontraban hasta abajo abandonados.

ㅡ¿Esos no te gustan o esos no los lees? ㅡChanyeol se encontraba sentado en el suelo, recostando su espalda en la orilla cama. Él alza la vista y la dirige hacia mí. Ve los libros que estoy señalando y al mismo tiempo su semblante se ensombreció.

ㅡEsas son mis lecturas actuales ㅡañade más serio que hace dos segundos. ¿Por que leía algo que no quería o que no apreciaba? ㅡSon libros académicos. Papá no aprecia ningún tipo de literatura que no sea esa.

Ahí estaba otra vez esa condescendencia cuando se hacía referencia a su padre.

ㅡNo te llevas muy bien con él, ¿verdad? ㅡYa no me pude contener y tuve que preguntar. Deseaba saber todo de su familia. ¿Qué le había sucedido a su madre? ¿Por qué le decía "señor" a su padre? ¿Realmente era tan serio como se veía o sólo era una fachada?

ㅡNo te puedes llevar muy bien con un superior del régimen ㅡdice como si se estuviera sacando 4 kilos de encima.

ㅡ¿Tu padre trabaja para el gobierno? ㅡme quedé con el ojo cuadrado de la sorpresa. Él asintió y continuó leyendo el cómic que había dejado en el suelo. Bueno, eso explicaba porqué le decía señor.

ㅡQuiere que sea su digno sucesor. Siempre me inscribe en cursos de lucha y clases extra ㅡpienso en todas las veces que fue superior tanto en clase como en el campo de entrenamiento. Obviamente no podía ser alguien bendecido en todo como todos creían, aquellas proezas eran resultado del esfuerzo y el tiempo que no necesariamente había querido invertir. Esta no era la recámara de alguien ordenado ni de alguien libreㅡ. ¿Y tus padres? ㅡme preguntó sacándome de mis pensamientos. Parecía interesado aunque tal vez solo quería desviar la conversación.

Comencé a relatarle los dones de cada uno, cómo se conocieron, lo fanático que era papá de la repostería y lo ordenada que era mamá con todos los objetos de la casa.

ㅡMamá adora las estrellas, recuerda donde vio aquella luz brillante aunque probablemente provenga de algun cuerpo estelar extinto ㅡcuando iba a contarle de Seungsoo me tensé. Sí que lo extrañaba demasiado y me había propuesto evitar pensar en él a toda costa.

ㅡ¿Quieres palomitas de maíz? ㅡañade, supongo que prefirió ofrecerme una merienda antes de preguntar qué me había puesto tan extraño y se lo agradecíaㅡ. Son saludables.

Asentí y lo vi marcharse. Mientras me encontraba solo en su habitación, recordé las palabras de su padre cuando me vio. ¿Harán sus deberes? le había preguntado. ¿Realmente no concebía la idea de que un amigo de su hijo llegara tan solo para divertirse? Cuando él volvió me di cuenta de que Chanyeol era hijo de un padre estricto que le pedía ser siempre el mejor a cambio de un poco de aceptación y cariño.