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En la actualidad, las jóvenes deben exhibir un gran surtido de talentos. En su búsqueda de pretendientes.
Deben ser conservadoras ingeniosas, músicas consumadas y expertas en el arte del desmayo. Porque lograr desmayarse sin que la enagua se asome siquiera es sin dudas un talento muy codiciado.
Por supuesto no todas han sido víctimas de la fiebre real que arrasa en la ciudad de Londres. Hay dos diamantes en particular que parecen inmunes.
Así que la autora se pregunta si la corona ha perdido su lustre.
Benedict se encontraba solo en el salón dibujando lo que parecía ser una mano, que le estaban saliendo sumamente mal cada vez que lo intentaba. Hasta que decidió ir a la casa Danbury, a acompañar a la Srta. Basset a dar un paseo. Llevándose la sorpresa de que su hermana y el duque también lo harían.
—Sabe, Lord Weaver también me invitó a dar un paseo—Mencionó la castaña. Haciendo que a Benedict se le hiciera un nudo en la garganta.
—¿Si? —Preguntó Benedict— ¿Por qué fui el afortunado?
—No lo sé, quizá costumbre—Adhara sonrió juguetona.
—Supongo que es un beneficio infinito—Mencionó Benedict siguiendo el juego, viendo a Daphne y Simon detenerse en el puente.
—Supone bien.
—¡Qué día tan lindo!, ¡todo soleado! y el cielo está despejado. ¿Cuánto nos durará?—Benedict sonrió mirando a lo lejos.
—Eso ni se pregunta—La castaña le siguió la mirada.
—El sol está celoso de usted— Bridgerton miró a la castaña.
—¿Por qué?
—Porque usted está iluminando mi día más que el
La castaña se sonrojó a más no poder, uniendo sus manos precavidamente tapandolas con su vestido.
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Cuando llegaron a la casa Bridgerton, ni bien Violet se acomodó llamó a su segundo hijo y lo hizo sentar en el sofá.
—Exijo saberlo ¿Todo este tiempo que pasas con la Srta. Basset dará frutos? —Preguntó severamente.
—¿No puede ser solamente tiempo bien empleado?
—¿Te gustaría que el duque dijera eso de tu hermana? —Danbury mencionó, mientras Daphne hacia una mueca— Un cortejo prolongado es una cosa, pero cualquiera con dos ojos ha notado que Adhara Basset llamó la atención de casi todos los pretendientes. Si tú tiene los ojos puestos en ella y deseas desposarla, por mí, que los demás desaparezcan y se conviertan en una anécdota jugosa, pero si solo estás coqueteando y ella pierde la oportunidad de un matrimonio extraordinario solamente por estar absorta en tus encantos...Bueno, entonces ella sería una tonta.
—Ella dista mucho de ser una tonta, madre.
—Entonces tu comportamiento es cruel y ambos sabemos que yo no te eduqué así— Violet se levantó del sillón.
—Sólo deseo la bendición de su hermano antes de ¡Tomar una decisión tan grande como esa! Además no haría un movimiento con la Srta. Basset hasta que Anthony esté bien, esté al tanto de la situación. Después de todo él es mi hermano mayor.
Una pequeña sonrisa apareció en los labios de Daphne, estaba feliz de que su hermano diera ese gran paso con su amiga.
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Ya el cielo estaba oscuro cuando Benedict salió al patio por aire fresco, viendo a Eloise de nuevo fumando en los columpios.
—Hallé fragmentos de tus bocetos en la chimenea.
—¿Me estás espiando? —Preguntó una vez sentado.
—Para que quiera espiarte, deberías ser interesante— Se burló la menor.
—Eran dibujos abominables. No soportaba verlos.
—Por eso se le llama bocetos. Yo escribo un diario. No es lo mismo que escribir una novela—Benedict sonrió burlón—Debe ser muy difícil querer hacer algo y no lograrlo— La menor comentó y a Benedict le llegó a sus pensamientos Adhara.
—Eloise...
—Si te gusta dibujar, pero te falta práctica, practica. Contrata a un maestro de dibujo o a una jovencita que finja asombro—Eloise le estaba diciendo lo mismo que aquella castaña que no se podía sacar de la mente, sabiendo que tenían un similar nivel de inteligencia—Si deseas alcanzar el cielo con las manos, solo debes estirarte. No todos podemos—Murmuró lo último—Sin ir más lejos, mira a Lady Whistledown. Es muy talentosa. Sin embargo debe ocultarse detrás de un seudónimo.
—Sí, porque, si se supiera su identidad, la colgarían por lo que dijo.
—No me refiero a eso, Whistledown es mujer. Por lo tanto no tiene nada, pero aún escribe. Tú eres un hombre lo tienes todo. Puedes hacer lo que desees, así que hazlo, sé audaz. Al menos así yo puedo vivir a través de ti—Dijo levantándose.
—Eloise...¿Eres Lady Whistledown? —Eloise rió—Eres una escritora consumada, te la pasas con tu diario, conoces los asuntos de todos y tienes más opiniones formadas que cualquiera. De cualquier forma tendrías mi apoyo y admiración. ¿Eres tú?
—No. Aunque si fuera yo ¿Crees que lo admitiría? —Dio media vuelta—Ah, hermano todo lo que te dije de hacer lo que desees, no me refería solo al arte—Dijo antes de entrar a la casa.
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🌟Hi there! Cumpliendo con lo prometido.
Los tenía abandonados, lo sé. Pero estudio en dos universidades y mi tiempo es minimo porque estoy en parciales. Regresaré pronto.
Espero les haya gustado, por favor no seas un lector fantasma, te amo mucho como para no saber de ti.
