𝐄𝐥 𝟑𝟖 𝐞𝐬𝐭𝐚 𝐜𝐚𝐫𝐠𝐚𝐝𝐨 - 𝐙𝐞𝐛𝐚𝐥𝐥𝐨𝐬 𝐗 𝐕𝐚𝐳𝐪𝐮𝐞𝐳

Capitulo Seis - A quien querer

-¿Que carajo hacés acá vos?

Gritó casi sin pensar Exequiel, le era dificil, por no decir imposible, asimilar lo que estaba viendo.

Aaron ante el grito perdió el equilibrio y se cayó de encima de Luis, ambos desnudos, y mas que sorprendidos y asustados.

-Exe, ¿Como entraste?

Una pregunta casi irrelevante en ese momento, pero fue lo unico que puedo decir Vazquez.
Bastó con que Exequiel levantara su mano derecha, sosteniendo con sus dedos la llave de la puerta de entrada, la cual Vazquez reconoció al instante.

-Eh, Aaron me vino a visitar, ademas, ¿A vos que carajo te importa con quien me junto yo?

La peor parte para Zeballos es que Vazquez tenía razón, pero para el estaba mal, de hecho, estaba mal, ¿Por que nunca le dijo que se cogía a su otro amigo? Le guardo el secreto y ahora se enoja, un garca total.
No se dió cuenta, pero ya tenía los ojos cristalizados y con lagrimas amenazando a salir.

-Andate a la puta que te parió, Vazquez, sos un hijo de puta

Fue lo maximo que pudo decir, no tenía un argumento conciso para cagarlo a puteada, pero él sabía que él tenía razon.
Sin mucho mas que decir, y antes de que las lagrimas caigan por sus ojos, le tiró las llaves con todo el enojo que sentía y se fue a paso rapido de aquella casa, mientras que Sandez le seguía el paso.

Las lagrimas empezaron a salir una vez que salió de la casa, y esa caminata firme y furiosa se fue debilitando y frenando poco a poco.
Terminó por caer contra una pared en la vereda, quedando sentado y expulsando todo su llanto mientras que escondía su cabeza entre sus piernas y tapandose con sus brazos.
Rapidamente sintió como alguien lo abrazaba, pensó que era Vazquez, asi que se preparó para cagarlo a piñas, pero cuando levantó la mirada vió a Agustín junto a el, envolviendolo con su brazos fuertemente.
No pudo evitar corresponder el abrazo, terminando de quebrar en llanto en el pecho de su amigo, quien le acariciaba la espalda suavemente sin emitir palabra.

-Chango, no llores, dale

Le decía en voz baja Sandez, pero por mas que Zeballos intentaba parar, no podía.

-Changuito, por favor, ya está

Sentía como su amigo estaba sufriendo por verle llorar, lo notaba en su forma de hablar, y eso le hacía sentir mas dolor en su pecho, como si su corazón se estrujara

-Exe, te quiero mucho loco, no llores que me haces mal amigo, por favor

La voz de Sandez finalmente se terminó de quebrar, y este poco a poco empezó a soltar lagrimas tambien, Zeballos se sentía muy mal, pero no por lo que pasó, sino porque ahora le estaba arruinando el día a su amigo

-Chango, mirame

Escuchó como practicamente le susurró el otro, mientras que le levantaba el mentón para que crucen miradas

-Te quiero mucho Changuito

Dijo Sandez, y luego unió sus labios en un beso que tomó por sorpresa a Zeballos, pero no rechazó.
No sabe porque, quizas pensó en dejarse querer, quizas pensó en disfrutar, quizas se dejó llevar.
Pero puso su mano en la nuca de Agustín haciendo el beso mas intenso, y ambos lo estaban disfrutando.