Capítulo 4: Enseñándole Green Hill's a Amy.

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En ese mismo día, después de desayunar y de Maddie llevarse a su hermana, tocaba ahora ir con Tom, pues hoy tendrían un día de padre e hijos, incluída Amy.

ー¡Bien todos a por sus camisetas!ーgrito Tom con una sonrisa.

ー¡Entendido!ーgritaron el trío subiendo a sus cuartos.

Tom solo se quitó su chaleco, dejando ver su camiseta. En ella ponía "El mejor papá del multiverso." Mientras que se baja las gafas y hacia una posee ruda, Amy estaba sentada confundida pero aún así se estaba emocionado de como sería la salida.

El trío bajo con sus respectivas camisetas.

En la de Knuckles ponía "El hermano mayor súper fuerton."

Knuckles, apesar de que le dolió mucho la muerte de su padre y sabía que Tom no podía compararse a él, le abrió su corazón en este tiempo que comenzaron a estar juntos. Era como tener un padre otra vez y eso le encantaba, veía a Tom como una figura la cual admirar y al saber que repartía justicia-por ser un policía- su admiración aumento más.

Tom era responsable y le daba muchas lecciones, no lo demostraba mucho, pero si, comenzó a amar a Tom y a Maddie.

En la camiseta de Sonic ponía lo siguiente:

"El 2do consentido."

¿Por qué el 2do? Por qué obviamente Ozzy era el primero, consentido por todos, por Maddie, por Tom, por Knuckles, por Sonic y por Tails. ¡Por todo el mundo!

Y en la de Tails ponía, "Me llamo ternura." No sabía por qué razón le dieron esa camiseta, pero fue un regalo de Maddie y Tom, así que la amaba con mucho cariño.

Amy veía contenta a todos.

ー¡Se ven geniales!ーgrito Amy, Sonic se sonrojo, ¿cómo podía olvidar que ella estaba en la casa? ¡La camiseta le quedaba como un vestido! Y lo peor, no se veía para nada cool.

A Knuckles le quedaba bien, pues era alto, pero con Tails era otra cosa, se veía súper mono pero le quedaba más larga que a Sonic.

ー¡Bien, pues vamos!ーgrito Tails con una sonrisa.

Los demás sonrieron siguendole hasta la puerta.

ーEsperen, esperen, pequeños. Amy no tiene su camiseta, es primordial tener una para pasar un día junto a Tom.ーpronunció el hombre con una sonrisa.

Amy bajo la mirada.

ー¿Eso significa que no puedo ir?ーpregunto triste la pequeña.

ー¡No, eso significa que tendrás una!ーpronunció Tom poniéndole una camiseta arriba de su vestido.

En la camiseta de Amy decía:

"Hermosa y poderosa." Seguro que en poco tiempo tendría una camiseta personalizada.

ーAhora sí.ーdijo Tom, quién abrió la puerta para así ir hacia la ciudad.

Todos los animales junto al humano caminaban, ya era normal encontrarlos rondando por Green Hill's sin ningún problema, hasta el gobierno les permitió quedarse siempre y cuando no hicieran nada ilegal o dañarán algo.

¿Dañar? Por favor, ellos ayudaban, todos le querían.

ー¡Oh, es Sonic!ーgritaban al verlo pasear.

ー¡Oh, mira mamá, es Tails!ーgritaban también los niños.

ーKnuckles, pásate otra vez cuando quieras.ーhasta los de el Gym les conocía.

Pero todos estaban curiosos, había una nueva integrante en el equipo y era parecida a Sonic. Amy se sentía algo extraña por todas las mirada que les daban, Sonic se dió cuenta de lo nerviosa que se encontraba.

ーNo te preocupes, todos son buenas personas.ーpronunció Sonic con una sonrisa intentando calmar a la eriza.

Amy le correspondió la sonrisa, fue tan linda que todos se derritieron de ternura.

Todos se sorprendieron, por qué nunca vieron a Sonic ser así.

Siguieron caminando hasta llegar a un semáforo, Amy confundida miro a todos los integrantes. La pequeña no sabía y siguió caminando, los demás estaban conversando mientras.

ーPrimero iremos por lo de Tails, después por la comida de Knuckles.ーpronunció Tom, para que supieran como sería el horario del día.

ー¡Quiero galletas, deliciosas galletas! ¡Pero sobre todo uvas, muchas uvas!ーgrito Knuckles obviamente emocionado.

ーEs sorprendente como hay tantos recursos y se tiene un acceso a ellos tan fácil.ーpronunció Tails con una sonrisa.

ーBueno, la mayoría es así.ーcomento Tom al respecto.

ー¡Yo quiero chili-dogs! ¡Muchos, papá!ーaveces de a poco a Sonic era al que más se le escapaba esa palabra. A Tails algunas veces cuando tenía miedo o estaba emocionado. Y Knuckles, aún no lo llamaba así, pero le quería como tal.ー¿Tú qué quieres, Amy?ーpregunto Sonic y se asustó al no verla a su lado, la busco por todos lados y la encontró caminando por la calle, ¡mientras la luz estaba en rojo!

¡Es verdad, Amy no sabe casi nada de este mundo!

Al visualizar a un carro acercarse por un lado de la carretera su miedo, fue más, estaba tan cerca de ella. Hasta Amy se dió cuenta y asustada abrió los ojos. Fue un segundo, pero la salvó a tiempo usando su velocidad.

Pero Amy estaba aterrada, se le veía, por qué temblaba mucho.

ー¡Sonic! ¡Amy! ¡¿Se encuentran bien?!ーgrito Tom preocupado.

Iba a separar a Amy de Sonic para revisarla y Sonic iba a dejarsela para que la viera, al ser Tom, el sabía algunas cosas de medicina, además que siempre llevaba algo por si acaso. La eriza temerosa volvió a abrazar al erizo y Sonic lo único que pudo hacer fue abrazarla más fuerte para darle seguridad.

ーCreo que es mejor que yo me encargue, Tom.ーa Tom le sorprendió el tono que uso Sonic al decirlo, no era el simple tono de él, era el tono de alguien responsable. Y eso le hacía sentirse orgulloso.

ーTe la encargamos.ーpronunció Tom. Y todos se dirigieron al parque, el cual pocas veces era concurrido. Lo cual, era un beneficio para este día.

La eriza seguía asustada y Sonic acariciaba con tranquilidad sus púas, siguió así hasta que ella paro y por su voluntad se despejó de él.

ーL-Lo siento.ーpronunció ella con la cabeza bajada.

ーNo es tu culpa, Amy. Es normal que no sepas algunas cosas de la Tierra, fue irresponsable de mi parte no contarte nada. Lo siento.ーpronunció arrepentido Sonic.

ー¡No, no fue tu culpa, Sonic! Yo tampoco pregunte, fui una tonta.ーdijo Amy.

ー¡Es no es cierto! ¡La culpa fue mía!ーgrito él.

ー¡No, fue mi culpa!ーgrito la eriza.

ー¡No, fue mía!ーgrito él.

ー¡Que fue mía!ーgritaron los dos y abrieron los ojos soprendidos, para luego reír a carcajadas.

ーAmbos la tuvimos, ¿verdad?ーpronunció Sonic mirándola.

ーCierto.ーcontesto ella soltando unas risas.

Y las manos sobre el banco se encontraban sumamente cercanas, pero eso, no parecía importarles.

Solo estaban disfrutando de ese momento de calma.

Amy sin esperarlo, le empezaba a gustar...

Le empezaba a gustar la Tierra.




La maldición de Rose.[The Movie]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora