💕CAPITULO 36💕

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Para parecer avergonzado y dejarle una buena impresión a Wang Yibo, Xiao WenHan se había puesto un suéter azul claro con capucha, vestía una camisa de lino, jeans blanqueados y zapatos de lona blancos. Lucía refrescante y limpio, como un estudiante universitario que no sabe nada de la vida.

Para él, Yibo no solo es un benefactor al que debe complacer, no ha podido dejar de pensar en él. Este sentimiento es como cuando una persona ha tenido hambre por mucho tiempo y frente a él se encuentra una tarta de queso. Su corazón se sentía emocionado, así que antes de abrir la puerta del restaurante, practicó una sonrisa en su rostro, trataba de parecer puro e inofensivo.

Cuando todo estuvo listo, esbozó una tímida sonrisa y abrió la puerta del restaurante, solo para ser sorprendido por la escena que tenía ante él.

No había ni un solo cliente en el restaurante. Las luces eran tenues y las velas con aroma a violeta estaban encendidas por todas partes. Un violinista estaba en la esquina tocando música tranquila, un camarero en la puerta le hizo una reverencia cortés

— Disculpe, ¿es Xiao WenHan? ¿El Sr. Xiao? El Sr. Wang te ha estado esperando durante mucho tiempo, por favor ven conmigo.

Xiao WenHan, ha sido un joven maestro durante más de diez años, pero todavía no ha visto una escena tan romántica. Durante un tiempo, su cabeza estuvo en blanco e incluso se olvidó de poner su falsa sonrisa y siguió al camarero.

Al abrir una puerta blanca tallada con flores rosas, Xiao WenHan vio a Wang Yibo sentado junto a la mesa.

La luz de las velas iluminaba la habitación privada, reflejando el rostro de Wang Yibo. Yibo giró la cabeza cuando escuchó el movimiento, cuando vio a Xiao WenHan se puso de pie inmediatamente, sonriendo dijo

— WenHan, finalmente estás aquí.

Vestía un elegante traje negro ajustado, sus cejas se suavizaron mirando a Xiao WenHan.

— ¿Qué estás haciendo parado ahí como estúpido? ¿Por qué no entras?

Solo entonces Xiao WenHan volvió a sus sentidos, mirando la sonrisa de Yibo, de repente se sintió un poco perdido, sus orejas también se calentaron

— Yibo-ge, esto... ¿qué está pasando?

— ¿Te gusta?

Yibo lo acercó a la mesa, como todo un caballero, lo ayudó a retirar la silla

— Sé que no quieres que otros te señalen, así que después de tu llamada de ayer, reserve todo el restaurante. Solo estamos tú y yo aquí, así que ya no tienes que sentirte incómodo.

Xiao WenHan se quedó atónito y no dijo ni una palabra durante mucho tiempo.

Desde que se expuso el video del coche, no ha tenido un día cómodo. Los reporteros de los medios son como moscas sin cabeza, todos los días lo perseguían para hacerle preguntas.

No importa a dónde fuera, había gente hablando desde atrás

— Este es el fulano del video, un hijo ilegítimo.

Incluso cuando regresó a casa, Xiao Ji, ni lo miro a la cara y lo echó directamente de la antigua casa de la familia Xiao. Era una casa vieja en ruinas.

Con tantas burlas, nadie le ha dado consuelo, solo abuso verbal. Wang Yibo nunca le pregunto o se rio de sus dificultades, pero le estaba ayudando.

— Yibo-ge, he escuchado demasiadas calumnias sobre mí, pero no me importa lo que la gente diga de mí, si tú me crees, es suficiente.

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