𝙎𝙏𝙍𝘼𝙉𝙂𝙀𝙍 𝙏𝙃𝙄𝙉𝙂𝙎 | 010.2

𝐂𝐇𝐀𝐏𝐓𝐄𝐑. 𝟐𝟓

|𝗛𝗘𝗟𝗟𝗢 𝗪𝗜𝗟𝗟|

º¹º

Lo encerraron en su habitación después de que lo pusieron en el tanque. Estaba con completa confusión. Apenas salió lo llevaron a donde tenían la criatura. No sabía cómo era, solo lo que hacía. Matar.

La sangre del suelo estaba siendo limpiada por los guardias. Daba miedo.

—Электрифицирована ли проволока?— "¿El cable está electrificado?" pregunta Diez pasando por el alambre. El guardia que lo acompañaba le dijo que si. —Насколько это опасно?— "¿Qué tan peligroso es eso?"

—Много— "Mucho" le contestó.

—Что произойдет, если кабель выйдет из строя?— "¿Qué sucede si el cable falla?"

—Tu contendrás al monstruo, soldado. Eres el único que podría hacerlo—dice el general atrás de ellos.

Ambos voltearon y este sonrió.

—Por eso es que ya no estas en el laboratorio... Te necesitábamos aquí, por si esa cosa se sale de control—dice apuntando abajo. Seguido de eso e escucha un rugido de la puerta de metal.

—Da miedo—seguido de eso escucho que los demás comenzaron a reír.

—Silencio—pidió el general. Todos guardaron silencio mientras el general los veía con su mirada fría y autoritaria. —Deberían de temer como lo hace Diez.

Después de eso se fue. Dejó una gran tensión detrás de él. Los camaradas de atrás lo veían como su cena. No se sentía comodo cuando estaba solo.

—Ты должен был умереть в Америке, Десять—"Tenías que morir en Estados Unidos, Diez"

Esas palabras lo desconcertaron. Giro y vio al que le había dicho eso. Se acercó a él sin que nadie pudiera detenerlo.

—Что ты сказал?— "¿Qué has dicho?"

—Вы предатель. Вы сбежали из лаборатории, убили великого офицера, а затем уничтожили инвестиции, на строительство которых ушли годы... — "Eres un traidor. Escapaste del laboratorio, mataste a un gran oficial y luego destruiste una inversión que tardó años en construirse ..."

No pudo terminar de hablar porque comenzó a ahogarse. Diez, estaba estrangulandolo sin siquiera mover un musculo.

—Te recomiendo que te calles... Te recordaré que es la mayor inversión de este lugar...—le dice limpiando su nariz. —Soy yo.

Dejo si garganta. Estaba ya demasiado presionado con amplificar sus poderes como para suportarlos a ellos.

—Они должны запереть вас— "Tienen que encerrarte" le dice el soldado que se estaba ahogando.

—Hazlo si puedes.

—Десять!—le gritaron. —Deja de jugar y regresa al estudio. El doctor quiere hacer otra prueba.

Diez vio a sus camaradas y se fue con el guardia que lo había llamado. Nadie estaba contento con su presencia.

. . .

El tanque estaba igual que el primer día. Azul y terriblemente intimidante.

—¿Estas listo?—pregunta el doctor. Lo que no sabía es que Diez aprovecharía está prueba para tratar de contactar alguien que pudiera ayudarlo.