Capítulo 14"Besarte se siente diferente"

3K 377 846
                                    


"Pero yo te amo Louis... y te me estás yendo de las manos y no sé si puedo evitarlo"...

—Harry, hola? —su voz no sonó amable, era un reclamo por no tener la mirada de Harry sobre ella, pero a la luz de Louis ¿quién podría tener su atención?...exacto, nadie —¿puedes mirarme por favor?

—Dime— respondió, pero en realidad su mirada seguía puesta en el punto donde desapareció aquel hombre que calmaba sus desesperos con solo una sonrisa.

—¡Vaya que tu amiguito es un tipo grosero, ni siquiera me saludó! Y eso que soy tu novia.

—Él no es así, ni siquiera lo conoces...—su ceño fruncido le advirtió a la chica que no siguiera presionando sobre ese punto, aunque le doliera admitirlo, Amelia sabía que en aquel tema llamado Louis Tomlinson, siempre tendría desventaja —¿Qué haces aquí Amelia?

—Jack me pidió que viniera, al parecer hay rumores de que un tipo sospechoso está filmando contigo de encubierto, y para calmar las aguas, Jack cree que debemos hacer unas fotos.

¿Alguien había comenzado rumores? ¡Tretas publicitarias! Maldijo a su manager en su mente, Harry estaba cansado de los paparazzis, "calmar las aguas" significaba sesiones de fotos donde aparentarían estar enamorados, incluso una de las cosas que más rechazaba el actor, besos. Porque después de besar a Louis, finalmente, no quería ninguna otra boca sobre la suya, nada que atentara contra la hermosa sensación de los labios del castañito.

—¿Cuándo? —preguntó sin ninguna emoción, solo el cansancio de un trabajo que mermaba su vida personal.

—Mañana, tendremos la mañana para dar un paseo, iremos por algo para beber, a fin de mes nos vamos a Italia, ya tengo los boletos.

—Mañana tenemos que grabar, Jack lo sabe.

—Está arreglado, Greg está informado, así que sonríe, ¡mañana vamos a deleitar al mundo con nuestra relación!

Sonreír, aparentar, desde hacía años Harry vivía con una preciosa pero dolorosa máscara, que solo hería a quien la portaba. Amelia o cualquier otra chica no ofrecerían ni una pizca de amor porque todas querían tomar algo de él sin importar cuán vacío quedara.

Louis en cambio era diferente, él era el único que ofrecía, que llenaba, que daba a manos llenas, quien reparaba y cosía las alas rotas de Harry cada vez que salía de una nueva relación pública.

Quizá por eso lo amaba tanto, porque ¿quién no amaría a su cuidador, a su alquimista personal?

El camino a su casa fue de palabras huecas, la voz de Amelia se escuchaba lejana, monótona, era una voz plana que no alteraba ni cosquilleaba los bordes de su sistema, su corazón no se aceleraba cuando la escuchaba y su cuerpo no se estremecía con su risa. Quizá era porque ella solo marcaba los pasos siguientes o porque no intentaba compartir algo más que fama, ella estaba en una fase permanentemente vacía y Harry, habiendo sido saqueado, solo podía sentirse completo junto a quien lo hacía sentirse lleno, es decir; Louis.

Los planes no cambiaban, grabaría por la tarde, pero por la mañana saldrían tomados de la mano y harían suficientes fotos, caminaría junto a la chica pero por dentro se sentiría extraño dentro de su propio ser, ¡¿Cómo alguien puede extrañarse tanto a sí mismo?! ¿Cuándo fue el momento en que Harry se dio la espalda y comenzó a olvidarse?

Llegó a casa con la chica, permanecieron juntos por un par de horas mientras ella todavía señalaba lo que harían, no quería ser grosero pero su presencia mermaba su energía y él solo necesitaba un respiro y escuchar la voz de su cantante favorito.

"Sin créditos para Louis"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora