Hurren llegó a la aldea en busca de una nueva vida para su futuro, trabaja cómo niñera de Esther Mikaelson.
Esposa de un poderoso terrateniente,
Mikael Mikaelson, quien queda totalmente enamorado de la peliroja quien la enamoró y Hurren da a Luz a s...
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Finn se encontraba distante a pesar de estar en en mi habitación leyendo con tranquilidad, el aire el algo pesado y el no paraba de fruncir el ceño.
— Deseo no ser yo la esté en tu cabeza si traes esa cara — Mi hijo regreso al mundo para verme y negar con una ligera sonrisa. — Estás molesto desde que entraste, ¿qué sucede hijo mío?
— Klaus ha traído a un niño al castillo, dijo algo sobre qué era huérfano. No lo tomes a mal mamá pero no me causa comodidad ese tema — Hizo una pausa — no somos orfanato. — Cerró el libro y me observó en busca de una respuesta.
No había oído hablar así a Finn y ambos sabíamos que había iniciado una fundación para los pobres y necesitados de New Orleans que se expandía rápidamente.
— Se cuál es tu pensamiento ante este tema cariño, hay reglas que deben cumplirse y Klaus debe saberlo perfectamente... — Cerré mi libro y Finn asintió mientras suspiraba.
— Podríamos iniciar la construcción de orfanatos si así lo deseas...— Sonreí mientras veía a Finn cambiar su semblante y asentír.
La puerta fue tocada y a los segundos Klaus entro para tomar mi mano y besarla.
— Madre, he traído a un huérfano...me he encariñado un poco y...— Klaus dudo un poco y se sonrojo levemente al sentir mi mirada en el — Quiero criarlo como hijo...
— Sabes que hay normas ¿verdad? — Pregunté lo mas suave que pude. — Una de esas es que él no puede tener un título de la corona...— Suspiré y volvió a asentir mientras esperaba mi respuesta.
— No tendrá un título como tal, sólo no quiero que se quede solo como un bastardo yo... — Frunció el ceño en busca de palabras.
Observé a Finn de reojo que pareció también entender su punto y soltó un suspiro para verlo.
— Sabes que cuidar de un niño no es fácil ¿verdad? Debes ver por su educación y cuidado ¿Estás listo para esa responsabilidad? — Preguntó Finn y Klaus asintió después de unos minutos.
— Lo pensé muchas veces, estoy listo. — Hablo con seguridad.
No es solo pensarlo quise interrumpir.
— No creo que sea buena idea Madre. Después de todo es un extraño — Finn frunció el ceño.
Suspiré al ver la ilusión que le hacia el tema y después de todo ya tiene edad... somos inmortales pero aún así.
— Un error, Niklaus. Un error y le buscaremos otra familia... — Klaus sonrió asintiendo con emoción mientras salía de la habitación casi dando brincos.
— Recordé a tú difunta hermana Freya y Henrik — Hablé sin dejar de ver a la puerta.
— Ellos no eran huérfanos — Respondió con una ligera risa.
