¿Me Elegirías A Mí? #2

Capítulo 8

•|9 de agosto de 2020, Silverstone, Inglaterra|•

Jon me hace girar y yo me río cuando casi tropiezo. La música es alegre pero calmada, y ambos bailamos a gusto y felices, riendo tranquilamente sabiendo que Livie está cuidando de Dani y esta noche es para nosotros dos. Realmente necesitábamos esto...

- Deberíamos escaparnos más a menudo - opina Jonny sonriendo y tomándome por la cintura.

- A mí no me gusta dejar sola a Daniella - murmuro haciendo una mueca.

- No está sola, amor...

- Ya sabes a qué me refiero - digo rodando los ojos. - Odio estar alejada de ella.

- Yo odio que tú estés lejos - dice acercándose a mis labios para besarme, pero alguien pasa junto a nosotros y mueve a Jon, que se aparta con brusquedad. - Idiota - gruñe por lo bajo al ver al culpable.

No puedo evitar sentir una punzada de culpabilidad al ver los rizos de un inglés muy simpático alejarse de nosotros. ¿Por qué creo que Lando está protegiendo a Carlos de algún modo?

- No pasa nada - suspiro y dejo un casto beso en los labios de mi novio. - No tiene importancia...

- Ese niñato la tiene tomada conmigo - se queja.

- Pues a mí me trata muy bien - le defiendo sin saber por qué.

- Aquí todos tratan genial a las chicas lindas, lo único que les importa es follar todos los findes - replica con indignación.

- Lando tiene novia...

- ¿Por qué le defiendes? - Exige saber apartándose de mí.

- Porque es injusto que digas eso de los pilotos cuando ni siquiera les conoces. Lan es buen chico, y no puedes decir que mi hermano es como tú dices - me explico con cuidado de usar las palabras adecuadas.

- Sólo conozco bien a tu hermano, y él quizá se libre, pero los demás... - niega con la cabeza. - Puede que Sainz también sea un buen hombre. Las pocas veces que he hablado con él ha sido muy... Formal.

Si tú supieras...

Cállate.

- Bueno, pero no conoces a todos los pilotos. Seb es también muy simpático, y Lewis es un encanto. Además, Lan, Alex y Esteban me tratan siempre genial y son unos caballeros. Me atrevería a decir que todos son buenos chicos...

- Eres muy amiguita de todos, ¿no?

- ¿Qué insinúas? - Frunzo el ceño y él se ríe con ironía y me deja plantada en el centro de la pista.

- ¿Problemas en el paraíso? - Dice una voz a mi espalda, sobresaltándome. Al girarme me encuentro con un holandés de mal carácter con el que he tenido el placer de no hablar mucho en todos estos años.

- ¿A ti qué te importa?

- Tu hermano y yo somos muy amigos, y me encargó que te vigilase de vez en cuando - dice sonriendo y encogiéndose de hombros.

- Dan... - gruño por lo bajo. - ¿Qué demonios quieres?

- ¿Bailas? - Propone sorprendiéndome.

- ¿Contigo? No - me río por lo descabellada que me resulta su idea y él me mira frustrado.

- Como quieras, pero una chica tan linda, estando sola, es presa fácil de cualquier imbécil - dice alejándose.

- ¿Un imbécil como tú? - Le digo mientras se va.

- Yo no te tocaría un pelo, Ricciardo - responde desapareciendo de mi vista.

Idiota...

Ruedo los ojos y camino hacia la mesa de canapés, procurando analizar todo lo que ha pasado. Jon ha tenido un ataque estúpido de celos y Max ha intentado... ¿Protegerme? Lo dudo. Suspiro y me como una tosta con queso y jamón de un solo bocado.