Llevando la Cultura a un Mundo Diferente [1]

Capítulo 72

¡Legendario! ¡Legendario! Tirion Vadín!

Messai no tenía idea de lo que estaba pasando con ella recientemente. En el pasado, siempre ha sido diligente y ahorrativa. Sus gastos mensuales completos ni siquiera alcanzarían las diez monedas de oro. Sin embargo, en los últimos dos días, terminó gastando más de doscientas monedas de oro.

Si esas monedas de oro se donaran a pequeños pueblos, sería suficiente para construir varias capillas pequeñas. También podrían proporcionar una comida completa a innumerables niños vestidos con ropa harapienta.

Fue precisamente por esas cosas que Messai terminó dando todo el dinero que ganaba a la iglesia.

Pero, en dos días cortos, gastó una enorme cantidad de monedas de oro. Si hubiera sido antes, sería un pecado para ella mostrar tal comportamiento de extravagancia.

Pero, una vez que Messai pensó en cómo estaba haciendo esto para derrotar a los demonios, que su dinero era un financiamiento esencial en la batalla, logró persuadirse a sí misma con éxito. ¡Así de simple, ella continuó empujando sus monedas de oro en esa maquinaria demoníaca!

La mujer caballero metió en la máquina tres monedas de oro y compró su octogésimo paquete de cartas de Hearthstone. Pero, las cinco cartas del paquete eran ordinarias hasta el extremo.

Ayer, Messai había visto a un enano abrir una carta legendaria de Paladin llamada Tirion Fordring. Era una carta con una habilidad abrumadora. [1]

Nunca antes había visto a ese Paladín legendario en los ochenta paquetes que abrió. Pero, Messai logró abrir dos cartas legendarias de otras clases.

La señorita caballero del ejército templario no se desanimó. Una vez más lanzó un desafío a Ynor.

Sentado detrás del mostrador, Joshua observaba la batalla entre Messai e Ynor.

En los últimos dos días, esta mujer vestida de monja se había convertido en un individuo visto con frecuencia en la taberna.

Parecía haberse olvidado ya de su verdadero propósito al venir a la taberna. Ella estaba destinada a castigar al demonio y no a jugar a las cartas con el demonio.

Este tipo de desarrollo era lo que Joshua esperaba ver. Si los otros templarios pudieran ser como esta señorita caballero y resolver batallas con demonios a través de un juego de cartas, entonces quizás las bajas sufridas por cualquiera de los bandos en las batallas disminuirían drásticamente.

Mientras Joshua reflexionaba sobre si Messai sería capaz de cambiar el rumbo esta vez y lograr la victoria para demostrar la gloria de los Templarios Eclesiásticos o si Ynor logró su victoria sucesiva ciento setenta y dos, un anciano de complexión delgada apoyado por un Muleta entró en la taberna.

Con lo ruidosa que era la taberna, nadie debería haber notado la apariencia de este anciano. Pero, Joshua inmediatamente detectó su presencia.

La carrera de Joshua como Demonio del Caos y la huella del Duque de Huesos en su mano izquierda le informaban que este anciano... era muy peligroso.

"Ciri, sube. Trae a Melina contigo.

Joshua no tuvo suficiente tiempo para advertir a Ynor. Solo podía ordenarle a Ciri que estaba detrás de él que se fuera.

"¿Por qué?"

Cuando Ciri vio la mirada inexpresiva en el rostro de Joshua, se dio cuenta de la respuesta a su pregunta.

"Me estás menospreciando demasiado".

Siguiendo los ojos de Joshua, Ciri vio al anciano que entró en la taberna. Sacó su bastón que podría usarse como lanza. Ella había hecho los preparativos para la batalla.