9. Veneno (2/2)

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Wei Ying permitió que Hua Cheng entrara a su departamento, era extraño, nunca había llevado a nadie ajeno a su círculo de amigos a su hogar.

- Muchas gracias.

Wei Ying dejo la cartera prestada en el mueble que posaba después de la entrada, al fin había podido quitar sus tacones y podía notar lo doloroso que era. Ahora entendía por qué muchas mujeres no disfrutaban de usar tacones, incluso si eran de tacón cuadrado.

- ¿Tiene un botiquín? - Wei Ying Miro sorprendido a Hua Cheng ¡¿Se había sentido mal todo este tiempo?!

- ¡Si! Hay uno en el baño, es la puerta a la izquierda, ¡Fui demasiado desconsiderado! Discúlpeme por pedirle que me trajera aquí si se sentía mal.

- Cálmense, lo digo por sus pies.

El hombre desapareció antes que Wei Ying insistiera más y finalmente se sentó. Incluso si el modista no había permitido que su invitado limpiara sus heridas, la fuerza de Hua Cheng mantuvo su dominio en sus tobillos.

- ¿Quién diría que algún día el gran artista y diseñador Hua Cheng limpiaría mis heridas? - Wei Ying sonrió con algo de diversión pero no suficiente para parecer burlón. Simplemente, era una sonrisa vacía, no decía nada, pero era menos incómoda que el silencio.

- Cállate.

Limpiar unos pequeños cortes como esos fue sencillo, simplemente limpio un poco y después coloco unos parches para la cicatrización. Hua Cheng solo podía ver a Wei Ying dentro de esta calma y rezar por qué nadie hubiera tomado una fotografía, el odio entre Luo Binghe y Wei Ying era demasiado grande. Si bien Luo Binghe sabía que el culpable de que asesinara a Wen Ning era un policía, no sabía quién era, fue una misión en cubierto. Con la peluca y las faldas puestas, claramente Wei Ying era ese policía que de no ser por su voz parecería mujer por el gran trabajo de maquillaje. Si el rey supiera quién era Wei Ying habría mucha sangre que lavar.

Cuando Hua Cheng se levantó no pudo no dirigir su mirada a un cuadrado parado en el librero, era la funda de un vinilo dónde en la portada se podían apreciar los rostros extranjeros rodeados de plantas, por lo que parecía ser un disco en Español.

- ¿Quiénes son?

- Son un grupo latino, de Colombia, me gusta mucho esa música.

- ¿Alguna vez a ido a Latinoamérica? - Wei Ying negó con la cabeza, pero se acercó a su lado para apreciar la portada del álbum junto a él.

- No, pero los conocí en una redada en el aeropuerto internacional, habían intentado cruzar con drogas y una de las chicas que iba ahí lleva el disco, ella no sabía nada de eso, simplemente su novio de Xian Lee la había traído para conocer el país. Todavía recuerdo que era una persona con demasiada ansiedad, después de checar el vinilo lo pusimos para calmar sus ataques de pánico. Cuando se resolvió todo ella me lo regalo, por la ayuda.

Su tono de voz solo podía destacar lo mucho que Wei Ying disfruto su tiempo como oficial. Su poca estancia como oficial había sido emocionante, tenía muchas historias que contar, tantas cicatrices con historias, algunas divertidas, otras no tanto y algunas otras parecían sacadas de un libro de acción. Hua Cheng simplemente pudo sonreír complacido por la sonrisa de Wei Ying, ese hombre era una persona que se alegraba por cualquier cosa tan pequeña.

Hua Cheng siguió mirando y noto como había más vinilos en un idioma que claramente no comprendía.

- Señorita, ¿No quiere terminar esta dulce velada de la mejor forma? - Wei Ying lo miro sin comprender hasta que noto como Hua Cheng levantaba el vinilo.

Wei Ying lo tomo y con delicadeza se acercó la toca discos que podría para colocar el vinilo. No estaba seguro de cuál colocar, pero simplemente puso la aguja en la línea de "interludio" para continuar con "Me vas a hacer falta".

No lullaby (HuaWei)Where stories live. Discover now