Lovely - Eddie Munson +18

¿Eddie?

Narra Eddie

- ¿Eddie? 

Abrí los ojos de golpe al escucharla.

- ¿Maddy? -pregunté mirando por toda la habitación.

Pero ahí no había nadie.

Max y Steve dormían a mi lado.

Volví a tumbarme al lado de ellos y cerré los ojos.

No volví a escuchar nada durante unas horas.

Hasta que un ruido muy fuerte en el salón hizo que los tres nos despertáramos de golpe.

- ¡Está pasando algo! -Robin entró en la habitación corriendo.

Y unos segundos después entraron todos los demás, llevaban los walkies en la mano.

- ¡Están haciendo un montón de ruido todos! -gritó Dustin y los tiró al suelo.

Efectivamente.

Hacían interferencias y se escuchaba como alguien intentase hablar pero estuviese lejos.

- Dustin, estarán captando la señal de alguien más. -dijo Mike.

- Esto es muy raro. -dijo Lucas.

- Sácalos de aquí. -dijo Max cogiéndolos y saliendo de la habitación.

Pero pararon.

Justo cuando Max pasó por la puerta dejaron de hacer ruido. 

- ¿Qué cojones? -habló ella mirando los walkies.

- Entra de nuevo. -le dije yo.

Max volvió atrás y justo cuando volvió a entrar en la habitación, los ruidos volvieron a sonar a través de los walkies.

- No me lo creo. -dijo Will.

- Maddy.. -susurró Steve.

- Está muerta, Steve. -sentenció Robin a punto de ponerse a llorar.

- ¿Y cómo explicas esto? -pregunté yo.

Los walkies no dejaban de sonar, pero no se entendía nada.

- Apágalos todos, uno por uno. -dije yo y me acerqué a ellos.

Dustin fue apagándolos, uno a uno hasta que solo quedó uno encendido, que seguía haciendo interferencias.

- ¿Maddy? -Robin fue quien cogió el walkie y habló por él.

Se paró el ruido en seco.

No se escuchaba nada.

- ¿Maddy, eres tu? -volvió a preguntar mirándonos a todos.

Silencio.

- Esto es estúpido. -dijo Max, ya estaba llorando y se sentó a mi lado.

- Maddy si puedes oírnos haz algo cualquier cosa, por favor. -dijo Robin de nuevo.

Más silencio.

- Vamos a dormir, esto es ridículo, todos hemos visto como ella no salía del porta, está muer... -Steve no terminó la frase.

Un fuerte ruido justo en el escritorio de Billy llamó la atención de todos.

Las fotos de la pared habían caído al suelo con fuerza, como si alguien las hubiese tirado a propósito.

- No me jodas. -susurró Max.

- Maddy, ¿esa has sido tu? vuelve a hacerlo. -dijo Robin al walkie, las lágrimas cubrían su cara.