La cita +18

4K 186 22
                                    

- ¿Lista para nuestra cita, Maddy? -cuando abrí la puerta, Eddie estaba ahí, con un pequeño ramo de flores y una gran sonrisa.

- Te has vuelto todo un caballero, Munson. -le sonreí y me fui con el a su camioneta.

Cinco días después, Eddie y Steve habían salido del hospital, y él no podía esperar para tener nuestra cita, así que ahí estábamos, yendo a algún lugar sorpresa que él había planeado.

- ¿Dónde me llevas? -le pregunté.

Eran las siete de la tarde y empezaba a anochecer.

- Ya lo verás. -sonrió de nuevo y colocó su mano en mi muslo.

Los dos cantábamos las canciones que sonaban en la radio.

Eddie aparcó la camioneta en un mirador.

En el mirador de Billy.

Yo lo miré, sorprendida.

- Hargrove me dijo que te trajera aquí, me dio permiso para ensuciar vuestro lugar. -explicó y yo me reí imaginándome a Billy diciéndole eso a Eddie.

Abrió las puertas de atrás y me encontré con que había metido mantas y cojines, haciendo una especie de cama.

- Esto es genial, Eddie.

Él sacó algo de comida y la puso ahí.

Los dos nos tumbamos en la parte de atrás, entre las mantas y los cojines.

Se veía el cielo entero, lleno de estrellas.

Era precioso.

Me giré para mirar a Eddie, pero él ya me estaba mirando.

- ¿Puedo preguntarte algo? -dijo en un susurro, cerca de mi cara.

- Ya lo has hecho. -le sonreí.

- Otra, pues. -se rio.

Yo asentí, esperando a que siguiera hablando.

- Quiero que seas mi chica, que vengas a verme a todos mis conciertos y seas mi fan número uno, que duermas conmigo por las noches, que vivas tu vida a mi lado, quiero apoyarte en todo y verte crecer cada vez más, quiero casarme contigo, Maddy. -susurró justo enfrente de mi cara.

Yo lo besé, acorté la distancia que nos separaba y uní mis labios a los suyos.

Me separé un segundo para mirarlo a los ojos.

- Fui tu chica desde que me miraste con esos ojos por primera vez. -le susurré justo antes de volver a estampar sus labios con los míos.

Nos fundimos en un beso largo y lento, disfrutando el uno del otro.

Las manos de Eddie se colaron por mi vestido, contrastando su piel caliente y sus anillos fríos.

Sus dedos encontraron mi entrada y se quedaron jugando ahí, haciendo que mi humedad creciera cada vez más.

Mis manos viajaron a su pantalón, desabrochándolo.

Nuestros labios no se separaban.

Nos desvestimos mutuamente, nuestra ropa quedó por todos lados de la camioneta.

Eddie se levantó y levantó mi culo con él, haciéndome quedar con mis manos y mis rodillas contra la manta.

Oh dios.

Escuché como rasgaba un condón y un segundo después, presionaba mi entrada con su miembro.

- Eddie.. -gemí al sentir como iba entrando en mi desde atrás, de forma lenta.

- Buena chica, Maddy. -gruñó cuando entró por completo en mi.

Yo casi me ahogo con sus palabras.

Agarró mi pelo en una coleta y tiró un poco de mí hacia él.

Y empezó a moverse, embistiéndome cada vez más fuerte.

Sus caderas chocaban contra mi culo uno y otra vez, de forma fuerte.

Solo se escuchaban nuestros gemidos y el ruido de nuestros cuerpos chocando entre sí.

Sus manos fueron a parar a mis caderas, apretándolas.

Me dio alguna nalgada, haciéndome gritar, sus anillos se sentían bien contra mí.

Yo gemía sin control alguno mientras Eddie entraba y salía de mi con fuerza.

- Necesito correrme, Eddie.. -dije casi en un susurro.

- Déjame ver como lo haces, cariño, hazlo para mi. -dijo y con solo escuchar esas palabras y como me había llamado, me corrí, apretando mis paredes a su alrededor.

Eddie paró las embestidas un segundo, y volvió a empezar de nuevo, esta vez más rápido y fuerte.

Él necesitaba correrse.

Empecé a chocar mis caderas al mismo ritmo que él me embestía, haciendo que entrase más fondo y más fuerte.

Los gemidos de Eddie inundaban su camioneta y yo me volvía loca escuchándolo.

Hasta que se corrió y se dejó caer encima mía, quedando los dos boca abajo entre las mantas.

- Te quiero. -susurré cuando él se tumbó boca arriba y yo me coloqué en su pecho.

- Yo también te quiero, Maddy. -dijo él y besó mi frente.

Y nos quedamos abrazados entre las mantas durante horas, mirando las estrellas, entre besos y caricias.

Eddie era mi chico.

Y esta vez nadie me lo iba a arrebatar.

Ni a él ni a nadie más.

-------------------------------

MARATÓN 3/3

QUEDAN DOS CAPITULOS MÁS PARA DESPEDIROS DE ELLOS...

O TAL VEZ NO... 

SI MI NUEVO TIKTOK LLEGA A 300 LIKES Y 150 COMENTARIOS, MAÑANA TENDRÉIS OTROS DOS CAPÍTULOS MÁS Y UNA SORPRESAAAAAAA
MI TIKTOK: LIZZBETBOOKS

:)

Lovely - Eddie Munson +18Where stories live. Discover now